Cuando se carece de nutrientes en el organismo, la salud del cabello se puede ver afectada. Por tal motivo, se debe tener presente el aporte de determinadas vitaminas, debido a que ayudan a mantener un cabello sano.

En ese sentido, las vitaminas del grupo B son indispensable para este fin. Por ejemplo, la vitamina B1 permite transformar los alimentos en energía, motivo por el cual permite el desarrollo las células capilares. En la carne y el pescado se puede ingerir esta vitamina.

En cuanto a la vitamina B2, esta interviene en la regeneración celular, lo que permite fortalecer el cabello y darle más brillo. La vitamina B2 se puede encontrar vegetales verdes y frutos secos.

Los frutos secos le aportan diversos beneficios al organismo. | Foto: Rosette Jordaan/Getty Images

La vitamina B3 mejora la microcirculación de del cuero cabelludo, motivo por el cual permite que crezca sano y fuerte. La niacina está presente en los lácteos y huevos, así como las legumbres.

La vitamina B5 cuenta con propiedades hidratantes para el cabello. Asimismo, estimula el crecimiento del cabello y equilibra el cebo del cabello. Esta vitamina aparece en los cereales integrales y el aguacate.

En cuanto en la vitamina B6, esta permite el transporte del oxígeno por la sangre, con el propósito de que lleguen correctamente a los folículos pilosos. El portal Hola indica que la piridoxina participa en el metabolismo de la melanina, cisteína y queratina. La vitamina B6 está presente en el atún, el salmón y el plátano.

La vitamina B7 es la que más influencia tiene en el crecimiento del cabello. De igual forma, contribuye a la formación de aminoácidos y mejora la salud de las raíces del cabello. Esta vitamina se encuentra en las nueces o el pescado azul.

La vitamina B9 es necesaria para el crecimiento del cabello, debido a que también permite la regeneración celular. El ácido fólico mejora la absorción del cuero cabelludo y proporciona más brillo. La vitamina B6 se encuentra en las legumbres y el aguacate.

La vitamina B9 es necesaria para el crecimiento del cabello, debido a que también permite la regeneración celular. | Foto: Getty Images

En cuanto a la vitamina B12, esta ayuda a nutrir correctamente y evita las canas prematuras. La vitamina B12 se encuentra en la mayoría de los alimentos de origen animal, como la carne, los huevos y la leche.

¿Cómo preparar champú casero para evitar la caída del cabello?

En la actualidad, existe una gran cantidad de tratamientos y productos que logran controlar la caída del cabello, no obstante, pueden resultar muy costosos, motivo por el cual la mayoría optan por los tratamientos caseros, como los champús.

De acuerdo con el portal Mejor con Salud, estas preparaciones cuentan con ingredientes naturales. Sin embargo, antes de ponerlos a prueba, se recomienda consultar con un profesional.

En ese orden de ideas, existe un champú a base de romero con limón y se prepara de la siguiente manera:

Ingredientes:

  • Champú natural con un pH neutro de 250 ml.
  • Aceite esencial de romero.
  • Aceite esencial de limón.
El aceite de limón fortalece el cuero cabelludo. | Foto: Foto: Getty Images.

Preparación:

  • Agregar al champú diez gotas de aceite de romero.
  • Acto seguido, agregar diez gotas de aceite de limón.
  • Luego, agregar las cápsulas de vitamina E.
  • Agitar todos los ingredientes con fuerza y dejar reposar por 5 minutos.

Modo de uso:

  • Aplicar sobre el cabello húmedo.
  • Masajear la superficie del cuero cabelludo durante diez minutos.
  • Dejar actuar durante otros diez minutos.
  • Enjuagar con abundante agua tibia.
  • Aplicar acondicionador.
  • Realizar el proceso tres veces por semana.

Otra forma de usarlo es preparar media taza de aceite de oliva con dos cucharadas de hojas de romero, se calienta por dos minutos y se debe dejar reposar cubierto con un pañuelo por tres días. La forma de aplicarlo es igual al método anterior.

Finalmente, el romero permite activar la circulación de sangre del cuero cabelludo y, por ende, el crecimiento de cabello más fuerte. Además, consigue dilatar los vasos sanguíneos estimulando el folículo piloso, haciendo que el cabello crezca de una manera más rápida.