La diabetes tipo 2 es una condición común que se presenta en millones de personas en el mundo. Solo en Estados Unidos según un informe presentado en 2017 por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, en inglés) dio a conocer que 30.3 millones de adultos en ese país tienen diabetes.
Asimismo, la investigación estimó que otros 84.1 millones de adultos estadounidenses tienen prediabetes. Los realizadores del informe explicaron que aunque los niveles de azúcar en la sangre de las personas con prediabetes son más altos de lo normal, los médicos aún no consideran que padezcan la enfermedad.
Las investigaciones han podido determinar que la aparición de la diabetes tipo 2 puede ser gradual y los síntomas pueden ser leves durante las primeras etapas. Por consiguiente, muchas personas pueden no darse cuenta de que tienen esta afección. De ahí la importancia de un diagnóstico temprano.
Los primeros signos y síntomas
Los primeros signos y síntomas de la diabetes tipo 2 pueden incluir:
1. Micción frecuente
Cuando los niveles de azúcar en la sangre son altos, los riñones intentan bajarlos mediante el filtrado de la sangre. Esto puede llevar a que una persona necesite orinar con más frecuencia, especialmente durante la noche.
2. Aumento de la sed
La micción frecuente necesaria para eliminar el exceso de azúcar de la sangre puede provocar que el cuerpo pierda agua adicional. Con el tiempo, esto puede causar deshidratación y hacer que una persona tenga más sed de lo normal.
3. Sentir hambre todo el tiempo
Las personas con diabetes no reciben la suficiente energía de los alimentos que consumen. El sistema digestivo descompone los alimentos en un azúcar, es decir, en glucosa, que el cuerpo utiliza como combustible. En las personas con diabetes, la glucosa pasa del torrente sanguíneo a las células del cuerpo en una cantidad insuficiente.
Por ello es que las personas con diabetes tipo 2 suelen sentirse con hambre constantemente, independientemente de qué tan recientemente hayan comido.
4. Sentir mucho cansancio
La diabetes tipo 2 puede afectar los niveles de energía de una persona y hacer que se sienta muy cansada o fatigada. Este cansancio se produce como resultado de que la cantidad de azúcar que pasa del torrente sanguíneo a las células del cuerpo es insuficiente.
5. Visión borrosa
El exceso de azúcar en la sangre puede dañar los pequeños vasos sanguíneos en los ojos, lo que puede causar visión borrosa. Esta visión borrosa puede ocurrir en uno o ambos ojos y puede aparecer y desaparecer.
Si una persona con diabetes no recibe tratamiento, el daño a estos vasos sanguíneos puede ser más severo y, eventualmente, desencadenaría en la pérdida permanente de la visión.