El hígado es el órgano de mayor tamaño dentro del cuerpo ubicado en la parte superior del abdomen y limpia la sangre y ayuda a la digestión secretando bilis, de acuerdo con el Instituto Nacional del Cáncer de Estados Unidos.
Asimismo, el sistema de atención médica, Stanford Medicine Children’s Health, señaló que otras funciones del hígado son:
- Producción de ciertas proteínas para el plasma sanguíneo.
- Producción de colesterol y proteínas especiales para ayudar a transportar las grasas por todo el cuerpo.
- Almacenamiento y liberación de glucosa, según sea necesario.
- Procesa la hemoglobina para usar su contenido de hierro (el hígado almacena hierro).
- Convierte el amoniaco nocivo en urea (uno de los productos finales del metabolismo proteínico que se excreta en la orina).
- Depuración de fármacos y otras sustancias nocivas de la sangre.
- Regulación de la coagulación sanguínea.
- Crea resistencia a las infecciones al producir factores inmunitarios y eliminar bacterias del torrente sanguíneo.
- Compensación de la bilirrubina (si se produce una acumulación de bilirrubina, la piel y los ojos se ponen amarillos).
No obstante, Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, explicó que existen muchos tipos de enfermedades hepáticas, como, por ejemplo:
- Enfermedades causadas por virus, como la hepatitis A, la hepatitis B y la hepatitis C.
- Enfermedades causadas por drogas, venenos o toxinas o por ingerir demasiado alcohol. Los ejemplos incluyen enfermedad por hígado graso y cirrosis.
- Enfermedades hereditarias, como hemocromatosis y la enfermedad de Wilson.
Es más, Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, explicó que la enfermedad hepática no siempre causa signos y síntomas perceptibles, pero si se presentan signos y síntomas de enfermedad hepática, estos pueden incluir los siguientes:
1. Color amarillento en la piel y los ojos (ictericia).
2. Picazón en la piel.
3. Orina de color oscuro.
4. Color pálido de las heces.
5. Tendencia a que aparezcan moretones con facilidad.
Así las cosas, es importante cuidar del hígado, y el portal portugués de salud, nutrición y bienestar, Tua Saúde, reveló que algunas bebidas caseras, como el té verde, té de boldo o el jugo de betabel (remolacha), ayudan en el tratamiento de los problemas de hígado, porque tienen acción digestiva, aliviando algunos síntomas como las náuseas, mala digestión y malestar, por ejemplo.
Dicho lo anterior, para preparar el té verde hay que hervir una taza de agua y agregar una cucharadita de hojas de té verde; para el té boldo hay que hervir una taza de agua y agregar dos hojas de boldo, y para el jugo de betabel se debe licuar una remolacha pequeña cruda con el zumo de un limón más un vaso y medio de de agua.
Ahora bien, las bebidas mencionadas deben acompañarse de otras recomendaciones para cuidar el hígado, como, por ejemplo:
1. Tener una dieta saludable: hay que elegir alimentos ricos en fibra, con bajo contenido graso y pocas calorías, y centrarse en las frutas, las verduras y los granos integrales.
3. Beber alcohol con moderación:
- Para la mayoría de las mujeres, beber moderadamente significa no más de un trago estándar al día.
- Para la mayoría de los hombres, significa no más de dos tragos estándar al día.
4. No fumar: Usar tabaco por mucho tiempo puede incrementar el riesgo de desarrollar muchos problemas de salud.
De todos modos, la información antes dada no sustituye la asesoría médica y es de vital importancia consultar a un experto de la salud para que sea este quien guíe el proceso e indique qué es lo más adecuado para cada persona.