Las frutas son, sin duda, uno de los alimentos recomendados por su alto contenido en fibra y vitaminas. Por eso, es común que su consumo sea ideal para sostener una dieta balanceada y equilibrada.
Sin embargo, una de las creencias populares es que, quienes padecen de diabetes, no pueden consumir este alimento por su alto contenido en azúcar. Frente a este debate, la Fundación para la Diabetes explica que la concentración de hidratos de carbono varía de acuerdo con el tipo de la fruta.
Según los expertos del portal especializado, los diabéticos deben tener presentes dos valores fundamentales como el contenido en hidratos de carbono, los cuales tendrán un efecto directo sobre sus niveles de glucosa en sangre y el Índice Glucémico, valor que indica la velocidad con la que un alimento aumenta la glucemia.
Entre las principales recomendaciones se encuentran el consumo de la fruta entera (con cáscara) como la manzana, la pera, la mandaria o la naranja. Además, es conveniente acompañar su consumo con alimentos ricos en fibra, ya que esta ayuda a disminuir la velocidad en la que el cuerpo absorbe el azúcar.
Cuidado con el consumo de estas frutas
A continuación, tome nota de las frutas con más azúcar por cada 100 gramos.
Dátil: 63,95 gramos.
Higo: 16,26 gramos.
Uva: 16,25 gramos.
Mango: 13,66 gramos.
Cereza: 12,82 gramos.
Plátano: 12,13 gramos.
Mandarina: 10,58 gramos.
Manzana: 10,31 gramos.
Tenga en cuenta
Las frutas como la chirimoya, el plátano y la uva tienen un alto contenido en hidratos de carbono. Por lo tanto, las personas con diabetes tipo 1 o tipo 2 deberán abstenerse, en lo posible, de consumirlos o, al menos, controlar las cantidades
Por otro lado, los especialistas recomiendan consumir, con moderación, la sandía y el melón por su alto Índice Glucémico (75 y 60, respectivamente), lo cual podría aumentar los niveles de azúcar en la sangre con rapidez.
¿Qué hace el agua con limón en el cuerpo?
El consumo recurrente de agua con limón en horas de la mañana puede tener beneficios para la salud. Así lo sostienen los expertos, quienes también aseguran que sus propiedades van más allá del efecto detox que se le ha atribuido en los últimos años.
En diálogo con Vogue México y Latinoamérica, Laura Parada, nutricionista y técnica de Slow Life House, reveló que esta bebida casera puede evitar que el organismo retenga líquidos ante su ausencia para poder realizar sus funciones corporales.
De acuerdo con la especialista, su consumo en las primeras horas del día “pone en marcha el proceso de digestión por la mañana”, lo que permite calmar la indigestión, la acidez estomacal y la hinchazón.
Además, entre las propiedades del limón se encuentra la estimulación de la producción de bilis y jugos gástricos. De esta manera, puede evitar la formación de gases.
“Refuerza el sistema inmunológico”, apuntó la nutricionista, refiriéndose al alto contenido en vitamina C del jugo de limón. De igual forma, añadió que es rico en vitamina B, calcio, hierro, magnesio, potasio y enzimas, puntualizó.
En el portal mencionado anteriormente, la experta sostuvo que la mezcla también tiene grandes beneficios para la piel, pues su consumo previene el daño de los radicales libres por su alto contenido en antioxidantes.
Por otro lado, Parada argumentó que este hábito va de la mano con impulsar la práctica de beber agua en ayunas, puesto que, para algunos, esta tarea puede generar cierta pereza. Además, el limón, al ser rico en fibra, también favorece los procesos intestinales.
“El agua con limón representa una parte importante de la cantidad de agua que tenemos que beber durante el día, es una forma eficaz de estimular el metabolismo e hidratar el cuerpo”, manifestó.