Guisadas, con dulce, con sal, acompañadas de carne o pollo, entre muchas otras formas de preparar se pueden consumir las habichuelas, una hortaliza con muchas propiedades,
Con ellas se pueden preparar diferentes platos y realizar diversas combinaciones de ingredientes al prepararlas al vapor, rehogadas, hervidas o en platos fríos como ensaladas.
Su consumo es garantizado, pues se producen y consumen durante todo el año. Las habichuelas son una buena fuente de fibra, con la cual el organismo puede disminuir el colesterol malo y remover las toxinas para ayudar a prevenir el cáncer al colon.
Estas son también una rica fuente de minerales como el hierro, el magnesio, cobre y el manganeso.
Su nombre es adquirido según el país o la región donde se encuentre y va desde habichuelas, judías verdes, alubias verdes, frijoles o ejotes.
Este fruto inmaduro de la planta Phaseolus vulgaris, pertenece a la familia de las leguminosas. Sus vainas son aplanadas y tienen forma alargada.
En su interior se encuentran varias semillas que tienen diferentes funciones.
Variedades y propiedades
Existe más de un centenar de especies de habichuelas, aunque estas pueden dividirse en dos grandes grupos: las de enrame, de vaina gruesa y aplanada, cuyas matas poseen un tallo largo que se cultivan sujetos con varillas; y aquellas que se caracterizan por ser enanas, de vaina más estrecha y redondeada, con plantas mucho más bajas.
Cabe señalar que hay otras variedades que se caracterizan por el color de su vaina: las Bobby, las cuales son verdes, carnosas y gruesas; las Borlotto que son aquellas de color blanco con jaspeado rojo; las de cera que son amarillas y las obelisco, que se distinguen por ser verdes con jaspeado púrpura.
Dentro de sus cualidades se encuentra que es un alimento ligero y nutritivo, que no posee grasas ni calorías, por lo que es un alimento ideal para ser incluido dentro de una dieta.
Una ración de 100 gramos puede llegar a contener solamente 31 kilocalorías, además son muy ricas en agua y son primordiales para ayudar a eliminar los líquidos y toxinas que sobran en el organismo.
Además entregan un importante aporte de minerales como el potasio y el magnesio, al igual que varias vitaminas, especialmente la C, pero también la A, la K y las del grupo B, incluido el ácido fólico.
Beneficios para el organismo
Al ser ricas en fibra, contribuyen a regular el tránsito intestinal, a combatir el estreñimiento y a evitar que la persona empiece a picar entre horas dado su efecto saciante.
Este alimento es sumamente importante dentro de las dietas de adelgazamiento.
· Quienes padecen de hipertensión y de enfermedades cardiovasculares deben consumirlas, por los altos niveles de potasio y magnesio que posee.
No se exceda
Las personas que no deben consumirlas bajo ninguna circunstancia son los pacientes con tratamientos anticoagulantes, ya que la vitamina K es muy relevante en el proceso de coagulación sanguínea.
Tenga presente que si se consumen en exceso pueden provocar problemas gastrointestinales como dolor, hinchazón y gases, por las lectinas que contiene.
Si lo que desea es reducir el contenido de esta proteína, debe someterlas a altas temperaturas o dejarlas en remojo durante un tiempo para que así no le produzcan gases ni hinchazón.