El ajo, al ser rico en compuestos sulfurosos como la alicina, se caracteriza por tener propiedades antibacterianas y antivirales. Además, es conocido por su distinto sabor y aroma, el cual se ha utilizado durante varios años como fines medicinales y como un gran ingrediente de cocina.

Cabe señalar que el ajo es un azonador infaltable en la gastronomía, entre sus ingredientes se encuentra la vitamina C, el selenio y el manganeso, los cuales evitan que el organismo se contagie de diferentes enfermedades.

Desde la antigüedad, se le atribuyen una serie de propiedades curativas que han llevado a que se le considere un “superalimento”.

El té de ajo le brinda diversos beneficios al organismo. | Foto: Getty Images

Algunos expertos han señalado que consumir ajo en ayunas y antes de dormir es una práctica que ha ganado popularidad en los últimos años debido a los numerosos beneficios que se le atribuyen.

Una forma sencilla de incorporar el ajo en ayunas es masticar uno o dos dientes de ajo crudo. Si el sabor es demasiado fuerte para ti, puedes cortarlo en trozos pequeños y tragarlo con agua. También es posible consumirlo triturado en forma de pasta o mezclarlo con miel para hacerlo más agradable al paladar.

Antes de dormir, es recomendable preparar una infusión de ajo. Para ello, hierve uno o dos dientes de ajo en una taza de agua durante unos minutos, déjalo reposar y luego bébelo antes de irte a la cama.

Beneficios del ajo:

  • Refuerza el Sistema Inmunológico: consumirlo en ayunas puede ayudar a fortalecer el sistema inmunológico, lo que nos hace más resistentes a las infecciones y enfermedades.
  • Mejora la Salud Cardiovascular: el ajo ha sido ampliamente estudiado por sus beneficios para el corazón. Consumirlo regularmente puede ayudar a reducir los niveles de colesterol LDL (colesterol “malo”) y triglicéridos, lo que a su vez puede disminuir el riesgo de enfermedades cardiovasculares, como la hipertensión y la aterosclerosis.
  • Efecto Antiinflamatorio: los compuestos presentes en el ajo tienen propiedades antiinflamatorias, lo que puede ser beneficioso para personas que padecen afecciones inflamatorias como la artritis y otras enfermedades autoinmunes.
Es importante tener en cuenta que algunas personas pueden ser sensibles al ajo y experimentar malestar estomacal o alergias. | Foto: GettyImages
  • Digestión: consumir ajo en ayunas puede estimular la producción de jugos gástricos y promover una digestión saludable. Además, puede tener un efecto positivo en la flora intestinal, favoreciendo el equilibrio de la microbiota.
  • Efecto Antiinflamatorio: los compuestos presentes en el ajo tienen propiedades antiinflamatorias, lo que puede ser beneficioso para personas que padecen afecciones inflamatorias como la artritis y otras enfermedades autoinmunes.
  • Potencial Anticancerígeno: si bien se necesita más investigación, algunos estudios sugieren que el ajo podría tener efectos preventivos contra ciertos tipos de cáncer, como el de estómago y el colorrectal, debido a sus propiedades antioxidantes y antiinflamatorias.
  • Beneficios para la Respiración: el ajo ha sido tradicionalmente utilizado para aliviar los síntomas del resfriado común y otras infecciones respiratorias debido a sus propiedades antibacterianas y descongestionantes.

Precauciones:

Aunque el ajo tiene muchos beneficios para la salud, es importante tener en cuenta que algunas personas pueden ser sensibles al ajo y experimentar malestar estomacal o alergias. Si tienes dudas o preocupaciones, es aconsejable consultar a un profesional de la salud antes de incorporar grandes cantidades de ajo en tu dieta diaria.

La miel y el ajo tienen un efecto antimicrobiano. | Foto: Foto: Getty Images

Es importante tener en cuenta que el ajo es conocido por estimular la producción de jugos gástricos, lo que puede causar molestias estomacales, acidez o incluso irritación gastrointestinal en algunas personas, especialmente cuando se consume crudo.

El ajo puede tener propiedades anticoagulantes, lo que significa que puede dificultar la coagulación de la sangre. Si se consume en grandes cantidades, podría aumentar el riesgo de sangrado excesivo en personas que ya están tomando medicamentos anticoagulantes.

Teniendo en cuenta estos posibles efectos, los expertos piden que se realice su consumo con mesura.