El consumo de verduras y frutas es clave para mantener una buena salud. La Organización Mundial para la Salud (OMS) recomienda consumir al menos 400 gramos de estos alimentos al día.
Una de las verduras con importantes efectos para el organismo es la alcachofa, la cual podría ayudar a mantener niveles saludables de presión arterial, según señaló un estudio publicado en la revista Journal of Dietary Supplements.
Por otra parte, el síndrome metabólico tiene lugar cuando aparecen una serie de condiciones que aumentan el riesgo cardiovascular y la probabilidad de tener diabetes tipo 2.
Estas condiciones son: hipertensión arterial, glucosa alta en la sangre, niveles sanguíneos elevados de triglicéridos, bajos niveles sanguíneos de HDL, el colesterol bueno y exceso de grasa alrededor de la cintura.
Otros beneficios
Mejorar la digestión
Esta planta también ayudaría a mejorar la digestión. Esta propiedad se le debe a sus hojas, que son medicinales. Contienen una sustancia, la silimarina, que aumenta la secreción biliar. Las sales biliares son imprescindibles para la digestión y la correcta absorción de los alimentos que se consume, explica Luz García Toro, de Arkopharma, para la revista Hola.
Bajar de peso
Su aporte calórico es muy bajo, ya que tiene menos del 1 % de grasa, y esto se traduce en unas 22 calorías por cada 100 gramos. Por lo tanto, el efecto adelgazante de la alcachofa se debe a tres factores: su bajo nivel calórico, su efecto diurético y su capacidad para digerir las grasas y eliminarlas. Sin embargo, hay que recordar que esto no será posible si no se acompaña de un estilo de vida saludable, en la que la dieta sana y el ejercicio estén presentes.
Recomendaciones frente a la hipertensión
Bajar de peso y cuidar la cintura: el sobrepeso puede llevar a una alteración respiratoria al dormir, que incrementa incluso más la presión arterial. Por esto, la entidad sugiere bajar de peso, incluso una pequeña cantidad puede ayudar a reducir la presión arterial. También debe ejercerse control sobre el diámetro de la cintura, pues esto hace que haya un mayor riesgo de padecer presión arterial alta.
Hacer ejercicio regularmente: al menos 150 minutos por semana o unos 30 minutos la mayoría de los días puede reducir la presión arterial alta. “Es importante tener constancia porque si no te ejercitas, la presión arterial puede elevarse nuevamente”, detalla el portal.
Comer saludablemente: se debe incluir cereales integrales, frutas, verduras y productos lácteos con bajo contenido de grasa en la dieta. Este plan de alimentación se conoce como dieta de enfoques dietéticos para detener la hipertensión (DASH).
Reducir el consumo de sodio: el efecto del consumo de sodio en la presión arterial depende de quien lo coma. Para reducir el consumo de sodio, se recomienda leer las etiquetas de los alimentos, bajar la ingesta de alimentos procesados y no añadir sal a los alimentos.
Limitar la cantidad de alcohol: su consumo solo con moderación, generalmente una bebida por día para las mujeres o dos por día para los hombres, puede reducir potencialmente la presión arterial. No obstante, ocurre lo contrario si se consume licor en exceso.
Dejar de fumar: dejar de fumar puede reducir el riesgo de una enfermedad cardíaca y mejorar la salud en general.