La hipertensión arterial se conoce como el enemigo silencioso, acecha a millones de personas en todo el planeta, incrementando de forma considerable el riesgo de enfermedades cardiovasculares, accidentes cerebrovasculares y daños en los riñones.
Afortunadamente, la tierra provee a los humanos de una poderosa fruta para enfrentar estos desafíos. El kiwi es esta fruta ‘mágica’ que crece en una enredadera leñosa y retorcida, prosperando en áreas de clima templado. China lidera la producción de este fruto, contribuyendo al 50% del suministro mundial, seguido por Italia con un 13% y Nueva Zelanda con un 10%.
Los alimentos pueden ser un valioso aliado para la salud y el control de la presión arterial. Las frutas albergan una fuente inagotable de vitaminas, minerales, compuestos antioxidantes y fibra, si no que también ocultan propiedades antihipertensivas que las convierten en piezas clave en la lucha contra la hipertensión y para la salud del corazón.
El misterioso aliado para la salud
Existen estudios que han revelado que el consumo diario de tres kiwis puede conducir a una notable reducción de la presión arterial en personas que padecen de hipertensión.
En esta hazaña, la vitamina C y la fibra contenidas en el kiwi podrían desempeñar un papel crucial. Una idea saludable y deliciosa sería incorporar el kiwi y el banano en un batido. Para un impulso adicional al sistema cardiovascular, agregar ingredientes como el jengibre, cúrcuma, aceite de linaza y nueces a esta mezcla.
En la actualidad, se utiliza en una variedad de preparaciones, desde ensaladas frescas hasta jugos, productos de panadería, rodajas deshidratadas y como compañero de otras frutas en colaciones, refrigerios y barras energéticas, entre otros usos creativos.
Beneficios del kiwi
- Esta fruta se destaca por su impresionante potencial antioxidante. Su riqueza en antioxidantes, vitamina C, fenoles y carotenoides, desempeña un papel fundamental en la promoción de la salud. Al combatir a los radicales libres, estos antioxidantes protegen el ADN celular, disminuyendo el riesgo de inflamación y enfermedades diversas, como diabetes, hipertensión, obesidad, trastornos intestinales y cáncer, por nombrar algunos.
- Esta fruta controla los niveles de glucosa. Su bajo índice glucémico lo hace apto para las personas con diabetes. Según investigaciones, 100 gramos de kiwi apenas equivalen a 5 gramos de glucosa, lo que demuestra su efecto benevolente en los niveles de azúcar en la sangre.
- Si se está buscando una herramienta eficaz para el control de peso, el kiwi es el perfecto aliado. Con tan solo 61 calorías en una porción de 100 gramos, este fruto ofrece una fibra soluble que promueve la saciedad, reduciendo la sensación de hambre y, por lo tanto, limitando la ingesta calórica.
- Las mamás gestantes van a encontrar en el kiwi un aliado debido a su alto contenido de ácido fólico. Este nutriente esencial contribuye a la prevención de defectos en el tubo neural del bebé y es fundamental para su crecimiento cerebral y cognitivo. Además, vitaminas como la C, E y K, junto con los flavonoides en la fruta, fomentan la salud tanto del feto como de la madre.
- A la hora de mejorar la calidad del sueño, esta fruta se establece como la mejor elección. Cargado de flavonoides como quercetina, naringenina, catequina y epicatequina, este fruto modula los receptores inductores del sueño y actúa como eficaz agente sedante de origen natural. Incluso su cáscara se ha utilizado en remedios natrales para conciliar el sueño.
- Para el cuidado de la piel, el kiwi es el aliado perfecto, así como para reducir los riesgos de ciertos tipos de cáncer y degeneración macular. También despliega propiedades antimicrobianas, protegiendo contra diversas amenazas y fortaleciendo nuestro sistema inmunológico.