Las plantas de los pies y los talones son zonas donde la piel tiende a resecarse. Generalmente, una de las causas de los pies secos es la deshidratación, la cual genera descamación y engrosamiento, además de provocar los temidos callos.
De acuerdo con el portal Mejor Con Salud, cuando se grieta la piel de los talones, esto se debe a una alteración en la dermis a causa de la resequedad, por eso la piel tiende a ponerse dura y en algunos casos comienza a desprenderse. Estos síntomas pueden venir acompañados de dolor en la zona y en los casos más graves, presencia de sangre.
En el caso especial de los talones, una de las razones más frecuentes por las que se puede presentar resequedad y grietas en la piel es el uso de calzado que deje la zona al descubierto, esto permite que los talones queden bajo exposición a la intemperie (sol, lluvia, frío, calor).
Otras de las razones, según Mejor Con Salud, es el sobrepeso. Unos talones que deban soportar un peso muy alto pueden empezar a causar molestia articular, muscular y este caso afectación cutánea, además del incremento en el grosor de los talones hará que la piel de la zona se deba estirar de más.
El portal especializado en temas de salud comparte algunos ingredientes naturales que, al combinar de forma sencilla y aplicar, pueden ser de gran ayuda para acabar con los talones y pies resecos.
Azúcar y aceite de almendras
La combinación entre azúcar y aceite de almendras ayuda a hidratar y nutrir la piel reseca de los pies y talones. Es recomendada para personas con grietas en la piel, si presenta heridas el azúcar no provocará ningún tipo de ardor a ponerlo en contacto.
El aceite de almendras es un ingrediente económico y muy nutritivo para la piel. Gracias a su contenido en vitamina E, es muy recomendable para la piel, según un estudio realizado por el Government Medical College and Associated SMHS Hospital (India). Con este aceite se aporta elasticidad a la piel para evitar que se agriete con facilidad.
Bicarbonato y aceite de oliva
De igual manera, el bicarbonato de sodio tiene grandes propiedades exfoliantes, este deja la piel realmente suave. Por su parte, el aceite de oliva no solamente actúa como un gran hidratante, sino que también protege la zona de condiciones de intemperie.
Esta combinación también puede ser clave para ayudar a calmar la molestia que pueden producir las irritaciones e inflamaciones de la piel, así lo indica un estudio del Instituto de Cardiología de Brasil. El bicarbonato con aceite de oliva puede ser aplicado en otras zonas del cuerpo como el rostro, realizando masajes en forma circular, hidratará la piel, además de dar un momento relajante.
Otras recomendaciones
Mayo Clinic brinda algunas recomendaciones para tratar esta afección:
Humectar los pies mínimo dos veces al día: En el mercado existen diferentes cremas y otros productos para hacerlo. “Algunos humectantes contienen agentes suavizantes para la piel, como urea, ácido salicílico o alfa hidroxiácidos, que pueden ayudar a quitar la piel muerta. Pueden causar escozor o irritación leve”, explica la entidad.
Antes de ir a dormir hacer el siguiente procedimiento: Primero, remojar los talones diez minutos en agua sola o combinada con jabón. Luego de este tiempo, secarlos suavemente con pequeños golpes. Segundo, con una piedra pómez retirar la piel muerta de los talones. Tercero, aplicar una crema que sea a base de aceite o con vaselina. Cuarto, ponerse un par de medias de algodón finas.