Las infecciones virales son un riesgo continuo para la salud de las personas. Como su nombre lo indica, la enfermedad es causada por un virus, que puede entrar al organismo de una forma muy sencilla al respirar, por sus partículas desprendidas en el aire, o de maneras más específicas como por la picazón de una garrapata o un insecto, o luego de mantener relaciones sexuales.

Lo que ocurre al interior del cuerpo es que el virus ingresa e inmediatamente es atacado por los glóbulos blancos hasta que lo destruyen, por lo que en la mayoría de ocasiones la enfermedad aparece poco después de contraer la infección y desparece con los días.

Sin embargo, lo mejor es no subestimar estas afecciones, ya que existen casos en los que esos virus incorporados al organismo pueden cambiar la manera en la que funcionan las células, llegando a provocar diferentes tipos de cáncer en situaciones extremas.

Los virus pueden propiciar la aparición de células cancerosas en el organismo.

Por ejemplo, los virus de la Hepatitis B y C están en capacidades de generar cáncer de hígado, y el Virus de Papiloma Humano (VPH) puede causar, entre otros, cáncer de cuello uterino.

Pese a esto, hay que mencionar que las infecciones víricas más comunes no son las ya mencionadas, sino que suelen serlo, por ejemplo, la gripe o los resfriados, lo cual produce malestar general e interfiere en el correcto funcionamiento de la respiración. De acuerdo con el portal GatroLab, el té de orégano y ajo contiene potentes propiedades que ayudan a combatir estos y otros problemas relacionados, como el asma y las bronquitis aguda y grave.

Esto gracias a su contenido rico en yodo, fósforo, potasio y vitaminas. También tiene propiedades antibióticas, por lo que suele incluirse en la preparación de diferentes remedios naturales.

Una solución natural como esta siempre trae beneficios para la salud, según Harvard, pero esto debe estar acompañado de una buena dieta diaria, actividad física constante y cambios de hábito que suelen ser sedentarios para que el efecto positivo llegue a ser el esperado.

Estos son otros beneficios a tener en cuenta de esta bebida natural:

El ajo tiene propiedades diuréticas, depurativas, antisépticas, antibacterianas y antibióticas. | Foto: Dimitri Vervitsiotis
  • Sus dos ingredientes: ajo y orégano, tienen la facultad de mejorar el proceso de digestión. Por un lado, el orégano hace parte de la familia de la menta, contando así con propiedades carminativas; también ayuda a eliminar algunas bacterias. De otro lado, un estudio publicado en la revista Journal of Antimicrobial Chemotherapy sostiene que uno de los compuestos del ajo es el sulfuro de dialilo, que es 100 veces más eficaz que los antibióticos para combatir las infecciones intestinales.
  • Por último, las hojas de orégano tienen un alto contenido en antioxidantes, por lo que no solo aporta en la reducción del estrés, sino que también permite la mejora en el aspecto de la piel y retrasa el envejecimiento.

¿Cómo preparar el té de orégano y ajo?

Los ingredientes son muy sencillos, solo se requiere de una cucharada de orégano, taza y cuarto de agua y un diente de ajo de tamaño mediano.

Un estudio reveló que el orégano podría ayudar a combatir también el cáncer de próstata. | Foto: © 2022 Annick Vanderschelden

Luego habrá que apagar el fuego y dejar la olla tapada en la estufa por cinco minutos más, hasta completar los 20 totales, esto para que las propiedades penetren bien en la infusión. Lo último será colar la bebida, dejarla reposar y beberla.