Un particular síndrome sobre el cual aún hay muchos asuntos por explorar se presume que sería el causante de algunas reacciones alérgicas y otros síntomas tras el consumo de carnes rojas, entre ellas la inflamación del estómago.

Se trata del síndrome de alfa-gal, un tipo de alergia alimentaria como consecuencia del consumo de productos derivados de mamíferos, en especial carnes rojas y algunos lácteos.

El alfa-gal se presenta especialmente en los Estados Unidos y quienes lo padecen comúnmente lo adquieren tras la picadura de una garrapata conocida como estrella solitaria, predominante en el sureste de este país del norte del continente americano.

La acción de este bicho justamente transmite al organismo una molécula de azúcar denominada alfa-gal produciendo una reacción en cadena de las defensas del cuerpo, es decir, del sistema inmunitario.

Aunque en el caso de Estados Unidos los venados son animales que específicamente portan esta garrapata, otras especies también también son factibles de llevarla consigo y transmitirla, por eso el alfa-gal también se ha diagnosticado en regiones de Europa, Australia, Asia, Sudáfrica y América del Sur y Central.

Para evitar las consecuencias de esta alergia alimentaria, que puede aparecer entre 3 y 6 horas tras la ingesta de carne, hasta ahora no existe otro tratamiento efectivo que abstenerse del consumo de carne roja y otros productos como leches o gelatinas provenientes de mamíferos.

Las garrapatas pueden presentarse en diversos animales, incluso domésticos.

En caso de que la situación se complique y exista una reacción alérgica grave, es posible que se requiera un medicamento llamado epinefrina y tratamiento inclusive en sala de emergencias.

Los síntomas más comunes están relacionados con urticaria, picazón en la piel o piel escamosa, hinchazón en los labios, el rostro, la lengua u otras partes del cuerpo, pero también intenso dolor de estómago, diarrea, malestar estomacal o vómitos.

En cuanto a la picadura de la garrapata solo es posible evitarla usando ropa como pantalones y camisetas largas además del uso de repelente en áreas boscosas, pastizales o donde se presume la existencia de este animal.

También es recomendable, tras un periodo al aire libre en estos lugares, revisarse todo el cuerpo para verificar que no se ha portado el bicho.

Las personas expuestas a muchas picaduras de garrapatas, con el tiempo, pueden manifestar un empeoramiento de los síntomas descritos.

¿Cómo reemplazar las carnes rojas?

Debido a la tendencia de buena parte de la población durante los últimos años de transformar los hábitos alimenticios, ahora son variadas las posibilidades y mayor el conocimiento sobre las alternativas para reemplazar el consumo de carne de res, cerdo o cordero.

Los investigadores creen que la carne roja debe ser un alimento ocasional en nuestra dieta.

Una de las opciones más sencillas, si se desea continuar consumiendo proteína de origen animal, es optar por las carnes blancas como el pollo y el pavo, que se caracterizan por ser más magras y contener menor porcentaje de grasa saturada.

Otra alternativa, que además está en auge, son los alimentos a base de plantas. Las hamburguesas vegetales, por ejemplo, elaboradas con ingredientes como proteína de soja, frijoles o champiñones, han ganado popularidad debido a su sabor y textura similares a la carne. Además, están libres de colesterol y contienen fibra y otros nutrientes beneficiosos para la salud.

Carne roja | Foto: GettyImages

Los productos a base de tofu, tempeh y seitan también son excelentes opciones para reemplazar las carnes rojas. Estos alimentos de origen vegetal son ricos en proteínas y pueden ser utilizados en una amplia variedad de recetas, desde guisos hasta salteados.

De acuerdo con expertos en nutrición, reemplazar las carnes rojas en la alimentación no implica renunciar al sabor o a los nutrientes esenciales. Al contrario, brinda la oportunidad de explorar nuevos sabores, promover una buena salud e incluso si se quiere contribuir a la sostenibilidad del medio ambiente.