¿Le ha pasado que cada vez que hace frío siente más hambre?, pues sí, al parecer la conexión entre las bajas temperaturas y el consumo de alimentos calóricos tiene varias razones posibles.
Chcolates, postres, guisos y sopas hacen parte de los platillos que la mayoría de personas buscan consumir en estas ocasiones.
Para Megan Lee, candidata a doctorado, y Jacqui Yoxall, profesora de Salud Aliada, de la Universidad Southern Cross, el sistema digestivo se comunica con el cerebro y si se consumen comidas como pastas, chocolate y sopas, se producen dopamina y serotonina.
La explicación la dieron a través de un artículo publicado en The Conversation, en donde indicaron que la dopamina y la serotonina son considerados neurotransmisores de la felicidad, porque producen una sensación de bienestar.
Alimentos que debe consumir
La Clínica Cleveland aconseja comer zanahoria, remolacha y nabos, los cuales pueden saciar el apetito.
También están los alimentos ricos en vitamina D, como hongos shiitake, salmón, yemas de huevo, carnes rojas y leche. La avena es otro alimento versátil, al cual le puede agregar especias de todo tipo.
Otro alimento representativo durante la época de frío son las sopas. Los expertos, según Infobae, recomiendan el caldo de pollo o de verduras. Para sumar proteínas sin grasas y fibra, opte por incluir vegetales, frijoles o lentejas.
“La proteína y la fibra frenan el apetito al ralentizar la digestión y controlar los niveles de azúcar en la sangre. Esto puede ayudar a controlar el hambre y reforzar el estado de ánimo”, mencionaron.
Las frutas que también recomiendan son kiwis, limones, naranjas y mangos, los cuales son ricos en vitamina C. En este grupo también están el brócoli y la coliflor.
Los expertos de la Universidad de Valencia mencionaron que un adulto en situaciones extremas de frío puede quemar hasta 500 calorías por hora.
“La grasa tiene una gran concentración de mitocondrias y su función es quemar energía para dársela al organismo y mantener su calor”, explicaron.