Un artículo publicado por la Clínica Vistaláser Oftalmología en España explica que la visión borrosa puede ser causada por diversos defectos refractivos, como el astigmatismo, la hipermetropía, la miopía o la presbicia. Se menciona que algunos de estos problemas se manifiestan desde la infancia, mientras que otros, como la presbicia, surgen a partir de los 40 años.
Según el centro de salud, “el astigmatismo puede provocar visión borrosa a todas las distancias debido a que la córnea tiene una curvatura irregular. En cambio, la miopía produce visión borrosa cuando miramos a lo lejos. La hipermetropía suele producir visión borrosa de cerca, al igual que la presbicia pero por distintas causas”.
El informe también señala que estos defectos refractivos pueden coexistir, lo que significa que una persona puede tener, por ejemplo, miopía y astigmatismo en un solo ojo o hipermetropía en un ojo y miopía en el otro. Para corregir estos problemas, se pueden utilizar gafas, lentes de contacto o someterse a cirugía refractiva.
El artículo advierte que “algunas personas esperan que su problema de visión borrosa se solucione por sí solo en pocos días. También hay personas mayores que asumen que su mala visión es parte del proceso natural de envejecimiento y que no tiene solución”. Sin embargo, se destaca que abandonar la atención oftalmológica en cualquiera de estos casos es un error grave, ya que la visión borrosa puede ser un síntoma de diversas enfermedades o afecciones.
Según la Academia Estadounidense de Oftalmología, estas son algunas de las enfermedades que pueden causar visión borrosa:
- Abrasión de la córnea.
- Arteritis de células gigantes.
- Astigmatismo.
- Cataratas.
- Celulitis.
El informe también destaca la importancia de la alimentación para mejorar la visión y el cuidado de los ojos. Se menciona que los arándanos son especialmente beneficiosos debido a su contenido en vitaminas, nutrientes como flavonoides y antocianinas, y pigmentos con propiedades antioxidantes que ayudan a reparar las células nerviosas de la retina.
Los flavonoides presentes en los arándanos desempeñan una función antioxidante, que contribuye a reparar lesiones oculares causadas por radicales libres. Además, mejoran el flujo sanguíneo, proporcionando más nutrientes al ojo y estimulando la producción de colágeno, lo que promueve una mayor producción de rodopsina, una proteína esencial para la visión en condiciones de poca luz.
Estudios realizados por la Universidad de Clemson y el Departamento de Agricultura de Estados Unidos respaldan el efecto positivo de los arándanos en la pigmentación de la retina y la visión nocturna, así como la prevención de enfermedades como las cataratas, el glaucoma, la degeneración macular y la retinitis.
Más beneficios de los arándanos para la salud
De acuerdo con La Vanguardia, una investigación dirigida por el científico E. Mitchell Seymour de la Universidad de Michigan revela que la inclusión de arándanos en la dieta puede fortalecer la defensa del organismo contra diversos factores de riesgo asociados a enfermedades cardiovasculares. Además, se ha observado que ayudan a prevenir la acumulación de grasa abdominal, así como a reducir los niveles de colesterol y azúcar en la sangre.
Es importante destacar que el componente activo en los arándanos que brinda protección contra enfermedades cardiovasculares es la antocianina. Según el Departamento de Agricultura de EE. UU., los arándanos también contienen pterostilbeno, que contribuye a prevenir problemas cardíacos y la diabetes.
Beneficios para la preservación de la memoria
Por otro lado, la antocianina, además de sus efectos beneficiosos en la salud vascular, actúa como un potente revitalizador de la memoria y puede revertir la pérdida cognitiva relacionada con la edad. Además, gracias a sus propiedades antioxidantes, contribuye a mejorar el estado de ánimo y a combatir la anemia.
Según un estudio llevado a cabo por investigadores de la Universidad de Cincinnati, en el cual se evaluaron las funciones cognitivas de 94 personas con edades comprendidas entre los 62 y 80 años que presentaban problemas cognitivos leves, se observó que el grupo que incorporó arándanos en su dieta experimentó mejoras cognitivas significativamente superiores en comparación con los demás grupos que consumieron otros alimentos, como el pescado.