La lenteja es una leguminosa rica en proteínas, vitaminas y minerales, según la Fundación Española de la Nutrición (FEN)
Asimismo, señaló que existen numerosos tipos de lentejas que se clasifican según el color de la semilla: las lentejas verdes o verdina, de pequeño tamaño y color verde o verde amarillento con manchas negruzcas; las llamadas lentejones, lentejas rubias o de la reina, entre las que se encuentran la rubia castellana y la rubia de La Armuña; las lentejas amarillas, de origen asiático; las lentejas naranjas, que constituyen un alimento básico en Oriente Próximo; lentejas pardas o pardinas, originarias de la India, lentejas rojas, de sabor muy fino y muy apropiadas para la elaboración de purés y lentejas verdes azules, que crecen en zonas volcánicas.
Respecto a su valor nutricional, la FEN indicó que las lentejas aportan proteínas, fibra, hierro, magnesio, zinc, potasio, fósforo, selenio, tiamina, niacina, folatos y vitamina B6.
Además, el portal portugués de salud, nutrición y bienestar, Tua Saúde, puntualizó que el consumo de lentejas es ideal para:
1. Ayudar a disminuir el colesterol, “debido a que es una fuente de fibras solubles e insolubles, las cuales disminuyen la absorción de grasas a nivel intestinal y aumentan la secreción de ácidos biliares, inhibiendo la producción de colesterol en el hígado”, asegura el portal.
2. Promover la pérdida de peso, ya que “al ser una leguminosa rica en fibras, la lenteja promueve la pérdida de peso al disminuir la velocidad de digestión de los alimentos en el estómago, prolongando la sensación de saciedad durante el día y reduciendo el apetito”.
3. Prevenir la anemia, porque “contienen cantidades óptimas de hierro, un mineral que contribuye a la producción de hemoglobina, el componente responsable de transportar el oxígeno desde los pulmones hacia todo el cuerpo”.
4. Evitar el desarrollo del cáncer, debido a que “son ricas en fibras que sirven de alimento para las bacterias beneficiosas del intestino, mejorando las defensas del organismo y el funcionamiento intestinal”.
5. Prevenir la osteoporosis, porque “por su contenido de isoflavonas, las lentejas favorecen la producción de hormonas responsables de la absorción de calcio en los huesos, lo que reduce la pérdida ósea y previene la osteoporosis”.
6. Evitar la diabetes, pues son ricas en fibras que disminuyen la velocidad de absorción de los carbohidratos, lo cual equilibra los niveles de azúcar en la sangre y evita la resistencia a la insulina.
7. Aliviar los síntomas del síndrome premenstrual (SPM) y la menopausia. “Debido a su contenido de lignanas e isoflavonas, que son compuestos bioactivos con propiedades similares a las hormonas estrogénicas, las lentejas ayudan a regular las hormonas femeninas, aliviando los síntomas de la menopausia y el síndrome premenstrual, como los sofocos y los cambios de humor, por ejemplo”.
8. Fortalecer el sistema inmunológico, porque “las lentejas son ricas en proteínas, que son nutrientes esenciales para la formación de las células de defensa del organismo, lo que ayuda a fortalecer el sistema inmunológico y contribuye a la prevención de enfermedades e infecciones”.
Respecto al consumo, el portal explicó que “se pueden utilizar en preparaciones como sopas, ensaladas, arroces y guisos, pero es importante dejarlas en remojo entre ocho y 12 horas, porque contienen fitatos, ácido fítico y taninos, compuestos antinutricionales que, cuando se consumen en exceso, pueden causar exceso de gases y disminuir la absorción de proteínas, hierro y otros nutrientes”.
Información nutricional por 100 gramos de lentejas cocidas
- Energía: 93 calorías
- Proteínas: 9,1 g
- Grasas: 0,5 g
- Carbohidratos: 16,3 g
- Vitamina B9: 181 mcg
- Fibras: 7,9 g
- Hierro: 3,3 mg
- Saponinas: 400 mg
De todos modos, la información antes dada no sustituye la asesoría médica y es de vital importancia consultar a un experto de la salud para que sea este quien explique el tema mencionado.