Llorar mientras se corta una cebolla es una experiencia que casi todos han vivido. Para evitar lo múltiples los trucos que se realizan, pero lo que a muchos les llama la atención es la razón por la cual esto sucede.

Al cortar cebollas se produce un gas que, al combinarse con el agua de las lágrimas, irrita los ojos. | Foto: Kathrin Ziegler

Pero según la divulgadora y biotecnóloga Lucía Almagro, quien es conocida a través de la cuenta de Instagram como Diario de una Científica, lo que la cebolla trata de hacer es defenderse.

A través de una infografía la especialista explicó: “las cebollas se defienden frente a sus depredadores utilizando la química. Al cortar la cebolla se rompen las células y esto provoca que una enzima convierta algunos aminoácidos en ácidos gaseosos”.

Dicho gas contiene azufre, el cual al mezclarse con el agua de los ojos forma “ácido sulfúrico”.

Pero ahí es cuando el cuerpo humano actúa, sobre todo para evitar que se dañen los ojos.

En ese preciso momento el cerebro se encarga de mandar una señal para llorar con el fin de diluir al máximo el ácido en los ojos.

En cambio las cebollas dulces, así como las verdes y las cebolletas poseen concentraciones más bajas. Por otro lado, algunas personas son más sensibles que otras a esta reacción, dijo el especialista.

Una sensación incómoda

Tenga en cuenta que los componentes sulfurados que provocan en lagrimeo, también son los responsables de que la cebolla pueda dejar mal aliento,

En cuestión de segundos seguramente estará llorando a lágrima viva.

Para el oftalmólogo Alberto Ollero, todo se debe a la reacción química de los componentes de la cebolla que al entrar en contacto con el agua de las lágrimas, los irrita. Siguiendo algunos consejos puedes evitar este efecto tan incómodo

Entre las sustancias químicas que se libera al cortarla se encuentran: las encimas, aminoácidos sulfóxidos y compuestos con azufre.

Lo que muchos no saben es que cuantas más lágrimas, mayor reacción, ya que luego e darse la combinación, el ácido sulfúrico irrita los ojos de tal manera que el cerebro reacciona ordenando la producción de más lágrimas para diluir el ácido.

Hay presencia de varias sustancias azufradas en la cebolla: ácido sulfhídrico, dipropildisulfuro y alilpropildisulfuro. | Foto: Jack Andersen

Para evitar que le lloren los ojos

No hay forma de evitar que la cebolla desprenda el azufre que tiene almacenado. Pero lo que sí se puede es seguir algunos consejos para reducir el lagrimeo que lo provoca.

Si lo que desea es que no se le irriten los ojos al cortar cebollas, tenga en cuenta los siguientes trucos:

  • Utilice unas gafas para proteger los ojos
  • Corte la cebolla bajo agua fría para que cuando se liberen los compuestos volátiles sulfurados la reacción se produzca con el agua y no con las lágrimas.
  • Otro truco consiste en congelar la cebolla antes de cortarla. Con ello logrará ralentizar el proceso de formación de compuestos volátiles sulfurados, sobre todo porque las enzimas responsables de formar dichos compuestos, disminuyen su eficacia.
  • Un truco que solo será útil para quienes tengan destreza con el cuchillo consta de realizar el corte de la cebolla de una manera muy rápida, pues así las emisiones de gas serán menos duraderas y dañarán menos los ojos.

En este caso, se deberá contar con un cuchillo afiliado y sobre todo con mucha pericia, esto debido a que cuanto más limpio sea el corte, menor será la cantidad de azufre que se vaporice en el aire.

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