Las investigaciones han dado a conocer que los aceites esenciales, aunque no pueden curar el dolor en las articulaciones, sí pueden aliviar los síntomas más fuertes de la artritis reumatoide y la osteoartritis, sobre todo en lo referente a la inflamación, la hinchazón, la rigidez y el dolor.

Se les llama esenciales porque están hechos de la esencia líquida de las plantas. Los aceites usualmente se extraen de la corteza, hojas o raíces de la planta.

Algunos estudios han determinado que los aceites esenciales y la aromaterapia son considerados como seguros para el uso en la artritis reumatoide, junto con tratamientos convencionales.

Los siguientes, según una publicación del portal Medical News Today, son los mejores aceites esenciales para la artritis reumatoide:

Lavanda

Es utilizada para reducir el dolor, la ansiedad y la depresión. Se puede inhalar, aplicar en la piel o agregar a un baño tibio.

Un estudio realizado en el 2016, probó los efectos de una mezcla del 5 % de aceite esencial de lavanda diluido en aceite de almendras dulces en la osteoartritis de la rodilla.

Al aplicar un masaje con 5 ml sobre las articulaciones inflamadas nueve veces por tres semanas, los participantes reportaron reducción en el dolor después de la primera semana.

Eucalipto

El eucalipto reduce la inflamación, hinchazón y el dolor, así lo demostró un estudio ejecutado en el 2013, donde se dio a conocer que quienes fueron sometidas a una cirugía de reemplazo total de rodilla, e inhalaron las preparaciones del aceite esencial de eucalipto en intervalos de 30 minutos por 3 días seguidos, notaron una reducción en el dolor.

La investigación sugiere inhalar aceite de eucalipto directamente o agregar algunas gotas en un baño de agua tibia.

Aceite de cúrcuma

Los ingredientes activos en la cúrcuma pueden tener propiedades antiinflamatorias, por lo que ayuda a mejorar la circulación.

Una investigación demostró que el extracto de cúrcuma parece reducir los síntomas de la artritis, aunque se requiere más investigación.

El aceite de lavanda se utiliza para el dolor, la ansiedad y la depresión. | Foto: NO

Jengibre

Es recomendado para las personas con inflamación y dolor crónico. Este puede agregarse a los alimentos o ingerirlo a través de suplementos.

El aceite esencial de jengibre puede contener compuestos que alivian los síntomas de la artritis reumatoide.

Incienso

Quienes practican la medicina tradicional han usado la resina y los aceites esenciales del incienso para tratar el dolor crónico y la inflamación.

Según la Fundación para la Artritis, los ácidos en el incienso tienen propiedades antiinflamatorias y analgésicas.

El aceite de eucalipto reduce la inflamación, hinchazón y el dolor | Foto: Veranika Litvinok

Albahaca

Este aceite tiene una amplia variedad de compuestos terapéuticos, como el cineole, el cual tiene efectos antiinflamatorios.

Una investigación realizada en el 2013, mencionó que las ratas con artritis que fueron inducidas con este aceite de albahaca, redujeron la inflamación en las articulaciones.

¿Cómo usar los aceites esenciales?

  • Se pueden colocar unas gotas en agua caliente e inhalar el vapor.
  • También puede utilizar un difusor que se encargue de diluir los aceites esenciales en agua caliente y liberar el vapor aromático.
  • Otra forma de usarlos es mezclar los aceites en sales para baño o agregarlos directamente al agua tibia.
  • Diluirlos en aceites base y aplicarlos por medio de un masaje en las articulaciones que presentan dolor. Algunos aceites base incluyen el aceite de coco, aceite de oliva, aceite de jojoba, aceite de semilla de uva, de almendras y de argán.
  • También puede optar por agregar unas cuantas gotas a las vendas o los paños.

Recomendaciones

Aunque dichos aceites se han utilizado con fines médicos, algunos pueden ser peligrosos si no se usan adecuadamente.

Tenga en cuenta que nunca debe reemplazar el medicamento recetado para la artritis reumatoide con terapias complementarias.

Si no trata la artritis reumatoide, puede presentar complicaciones como daño a los huesos y cartílagos.

Entre las posibles reacciones adversas que puede causar el uso de estos aceites se encuentran los dolores de cabeza, erupciones o problemas gastrointestinales.

Aplicar los aceites en las rodillas, los codos y hasta en los tobillos, le ayudará a reducir la hinchazón. | Foto: Libre de derechos