La glucosa es la principal fuente de energía del organismo. Se obtiene de los alimentos ricos en azúcar que se consumen a diario. Una hormona llamada insulina, excretada por el páncreas, se encarga de permitir su acceso a las células para ser usada como energía. Para que la glucosa no suba en la sangre o se mantenga elevada, es necesario no consumir en exceso productos con azúcar.
Cuando se abusa de la ingesta de los mismos y la glucosa sube mucho en la sangre, la insulina no logra cumplir su función de manera correcta, por lo que aumenta el riesgo de ocasionar el surgimiento de una enfermedad crónica y metabólica como la diabetes, la cual afecta a miles de personas en Colombia y en diferentes partes del mundo.
Por su parte, el colesterol “es una sustancia cerosa y parecida a la grasa que se encuentra en todas las células de su cuerpo. Su cuerpo necesita algo de colesterol para producir hormonas, vitamina D y sustancias que le ayuden a digerir los alimentos. Su cuerpo produce todo el colesterol que necesita. El colesterol también se encuentra en alimentos de origen animal, como yemas de huevo, carne y queso”, dice Medline Plus, Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos.
“Si tiene demasiado colesterol en la sangre, puede combinarse con otras sustancias en la sangre para formar placa. La placa se pega a las paredes de sus vasos sanguíneos. Esta acumulación se llama arterioesclerosis. Puede provocar enfermedad de las arterias coronarias, la que puede estrecharlas o incluso bloquearlas”, agrega la entidad.
El bloqueo o estrechamiento de las arterias hace, claramente, que la sangre no fluya de forma correcta de regreso al corazón, lo cual puede llegar a provocar un infarto o un accidente de tipo cerebrovascular, ataques que, como bien se sabe, pueden llevar a la muerte si no se tratan oportunamente.
Existe un alimento de origen vegetal que, por sus componentes, puede ayudar a bajar los niveles altos de la glucosa y el colesterol en la sangre. Se trata de la avena, uno de los cereales más saludables que existen.
La avena se puede encontrar fácilmente en cualquier supermercado de barrio o almacén de cadena. Existen diferentes maneras de preparar avena. Es muy rica en proteínas de buena calidad, fibras, vitamina B1, magnesio, zinc, fósforo y otros nutrientes más.
“Por ser rica en fibras, la avena disminuye la velocidad de absorción de azúcar de los alimentos, ayudando a controlar los niveles de glucosa en sangre, evitando así la resistencia a la insulina y la diabetes. Además de eso, la avena también contiene avenatramida, un compuesto bioactivo con acción antioxidante y antiinflamatoria, mejorando la función de la hormona insulina y ayudando así a controlar la glucemia en personas diabéticas”, afirma el sitio web Tua Saúde.
E incluye que “la avena es rica en un tipo específico de fibra, conocida como betaglucano, que disminuye la absorción de grasas a través del intestino, reduciendo los niveles de colesterol llamado ‘malo’ o LDL, en sangre, previniendo enfermedades cardiovasculares graves, como infarto o ACV”.
Para que estos beneficios se logren obtener oportunamente, la ingesta de un alimento de origen vegetal como la avena debe ser moderada, sin llegar a un exceso. Es de vital importancia que se acompañe con otros alimentos con características saludables, esto con el fin de potenciar sus propiedades.