La mala circulación en los pies tiene como efecto que los pies se enfríen, cambien de color o se adormezcan, incluso es un síntoma de una enfermedad.
Como ya se conoce, el cuerpo transporta sangre, oxígeno y nutrientes a las células y a todo el organismo por medio del sistema circulatorio. Por lo que, si los vasos sanguíneos en un área se llegan a cerrar, endurecen o se estrechan, se puede desarrollar una circulación reducida.
Ante esto, las personas que sufren de una mala circulación peden notar que sus pies se sienten fríos o entumecidos. Incluso, pueden notar un cambio de color, los pies pueden volverse rojizos, azulados, púrpura o blancos.
Se debe tener en cuenta que estos síntomas pueden empeorar debido a distintas situaciones, esto puede ser cuando una persona se queda quita durante largos períodos de tiempo o sale a la calle cuando hace bastante frío.
Sin embargo, para otras personas, estos síntomas recurrentes y aparecer debido a una afección subyacente,
Además, estos son algunos de los síntomas de mala circulación que se pueden incluir:
- piel seca y agrietada
- pérdida de cabello en las piernas o los pies
- uñas de los pies débiles
- cicatrización lenta de heridas
Factores de riesgo
Los factores que pueden aumentar la probabilidad de baja circulación incluyen:
- falta de actividad física
- fumar
- colesterol alto
- presión arterial alta
Las consecuencias de fumar genera que se reduzca el flujo sanguíneo así afectando el sistema cardiovascular de una persona.
Además, la cafeína, el alcohol y el estrés son otros factores que pueden estrangular los vasos sanguíneos, causando o empeorando los problemas de circulación. También, los problemas circulatorios son debido a las posiciones al sentarse que puede influyen en como circula la sangres, por lo que esto reduce el flujo sanguíneo, de acuerdo a un estudio de 2015.