El melón, perteneciente a la familia de las cucurbitáceas, es una rica fuente de nutrientes y antioxidantes que posee un alto contenido de agua, lo que lo convierte en una opción refrescante para mantenernos hidratados durante los días calurosos.

Sin embargo, sus beneficios van más allá de su capacidad para saciar la sed. Numerosos estudios y expertos en nutrición han destacado cómo el consumo regular de melón puede ser positivo para la salud renal, ya que es una fruta con grandes concentraciones de agua y potasio lo que le permite refrescar e hidratar mucho a quien la consume.

Las moelstias en los riñones siempre se reflejan con un dolor en la espalda. | Foto: riñones

En primer lugar, por ser excelente fuente de potasio, ayuda a equilibrar los niveles de líquidos y minerales en el cuerpo, lo que a su vez contribuye a mantener una presión arterial saludable. Además, el consumo adecuado de potasio puede reducir el riesgo de cálculos renales y la formación de piedras en los riñones.

Así el melón combate cálculos renales, con las propiedades que este posee que son de gran ayuda para la salud.

Propiedades del melón para los cálculos renales

Un aspecto clave del melón es su contenido de vitamina C, un antioxidante que ayuda a proteger las células del estrés oxidativo y la inflamación. Estas propiedades antioxidantes pueden ser especialmente beneficiosas para los riñones, ya que los protegen del daño causado por los radicales libres y otras sustancias tóxicas.

Además, el melón es una fuente significativa de vitamina A, que desempeña un papel fundamental en el mantenimiento de la salud renal. La vitamina A es conocida por su capacidad para fortalecer el sistema inmunológico y promover la salud de las membranas mucosas, incluidas las del tracto urinario.

Los problemas renales muchas veces se generan por la falta de líquido en el cuerpo, por eso, el consumo del frutas como el melón es tan importante. | Foto: Getty Images

Asimismo, esta fruta contiene compuestos fitoquímicos como el licopeno y el betacaroteno, que han sido vinculados con la reducción del riesgo de enfermedades renales crónicas. Estos antioxidantes ayudan a proteger los tejidos renales de posibles daños y reducen la inflamación, lo que puede tener un efecto positivo en la función renal a largo plazo.

Es importante tener en cuenta que el melón, como cualquier alimento, debe consumirse con moderación y como parte de una dieta equilibrada. Si bien es beneficioso para la salud renal, un consumo excesivo de potasio puede ser problemático para personas con ciertas condiciones médicas, como la insuficiencia renal crónica.

El melón es una de las frutas con mayor cantidad de agua en su interior; esto, en conjunto con las vitaminas y antioxidantes que posee, logra ser un digestivo bastante eficaz, así como un diurético poderoso. Los diuréticos son un tipo de sustancias que logran que los riñones puedan producir más orina, lo cual es necesario para eliminar el exceso de líquido y sal que retienen los riñones.

De hecho, está comprobado que esta fruta es parte importante de la dieta de las personas que tienen cálculos renales, retención de líquidos o estreñimiento, debido a lo que aporta. Además, ayuda a la piel y a combatir las toxinas que entran a nuestro organismo.

Claro que es mejor que sea recetado por un médico, quien va a dar las recomendaciones en cuanto a cantidades adecuadas para ingerir.

El melón no se tiene que consumir únicamente en trozos, también se puede preparar una deliciosa bebida con su pulpa. | Foto: GettyImages

¿Qué son los cálculos renales?

Los cálculos renales son masas sólidas que se forman en los riñones a partir de pequeños cristales conformados por sales ácidas y minerales, y estos son posteriormente agrupados en la orina concentrada. Estas piedras son generadas cuando se acumulan los desechos y los líquidos en la sangre no son suficientes.