El maíz, uno de los cereales más consumidos a nivel mundial, no solo es una fuente de nutrientes esenciales, sino que también tiene impactos notables en la salud cuando se incluye en la dieta diaria.

También conocido como maíz dulce o choclo en algunas regiones, es originario de América. Se cree que se cultivaba en México hace más de 9,000 años y se ha convertido en uno de los alimentos más importantes del continente.

Aunque el maíz más común es de color amarillo, existen variedades de maíz en una amplia gama de colores, incluyendo blanco, rojo, morado, azul y negro. Estos maíces de colores suelen ser utilizados en platos tradicionales de diferentes culturas.

Así luce el maíz morado. Cereal que sirve para combatir algunas enfermedades del ser humano. | Foto: Presidencia de Perú

Beneficios del consumo diario de maíz

  • Fuente de energía y nutrientes: El maíz es una rica fuente de carbohidratos, proporcionando energía vital para el funcionamiento diario del cuerpo. Asimismo, contiene vitaminas B y minerales como el magnesio y el fósforo, esenciales para diversas funciones biológicas, según el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA).
  • Fibra para una digestión saludable: La alta concentración de fibra en el maíz promueve la salud digestiva. Según la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA), una dieta rica en fibra puede ayudar a prevenir problemas digestivos como el estreñimiento.
  • Beneficios para la salud ocular: El maíz es una fuente significativa de luteína y zeaxantina, antioxidantes que contribuyen a la salud ocular. La Academia Americana de Oftalmología (AAO) destaca que estos compuestos pueden ayudar a prevenir enfermedades oculares relacionadas con la edad.
El maíz es una fuente significativa de luteína y zeaxantina, antioxidantes que contribuyen a la salud ocular. (Imagen de referencia) | Foto: Peter Cade

Precauciones y contraindicaciones

  • Alergias al maíz: Aunque es relativamente poco común, algunas personas pueden ser alérgicas al maíz o a sus derivados. La Asociación Americana de Alergia, Asma e Inmunología (AAAAI) advierte sobre la posibilidad de reacciones alérgicas, que pueden variar desde síntomas leves hasta potencialmente graves.
  • Moderación en el consumo de maíz refinado: El maíz procesado en forma de harina de maíz refinada o jarabe de maíz de alta fructosa puede tener efectos negativos si se consume en exceso. El Instituto Nacional de Diabetes y Enfermedades Digestivas y Renales (NIDDK) de los Estados Unidos recomienda moderar la ingesta de estos productos debido a su alto contenido de azúcares y bajo valor nutricional.
  • Los ultraprocesados: Algunas formas de preparación del maíz, como las palomitas de maíz para microondas con alto contenido de grasas saturadas y sodio, pueden no ser saludables si se consumen en grandes cantidades. La American Heart Association (AHA) aconseja elegir opciones de maíz preparadas de forma más saludable.

El maíz puede ser una adición nutritiva a una dieta equilibrada, brindando una amplia gama de beneficios para la salud. Sin embargo, es importante consumirlo con moderación y considerar las precauciones mencionadas, especialmente para aquellas personas con alergias conocidas o condiciones de salud específicas. Ante cualquier reacción, es aconsejable consultar a un profesional de la salud.

Consultar al médico es clave cuando se pretenden hacer cambios en la alimentación. (Imagen de referencia) | Foto: Getty Images