Tener sed excesiva puede ser una sensación anormal que requiere el consumo constante de líquidos. Sin embargo, las ganas de beber líquidos de manera constante puede ser el resultado de una enfermedad, según La Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos (Medline Plus).
La enciclopedia médica señaló que la sed excesiva podría estar relacionado con los altos niveles de azúcar en la sangre (hiperglucemia), lo cual puede deberse a la diabetes. Además, también podría ser la reacción del cuerpo ante la pérdida de líquidos durante el ejercicio o el consumo de alimentos.
Es importante tener en cuenta que se debe consultar a un médico o profesional en la salud cuando la sed excesiva es continua e inexplicable, la sed está acompañada de otros síntomas inexplicables, como visión borrosa o fatiga o si el volumen diario de orina eliminado supera los cuatro litros, según Medline Plus.
Las causas de tener sed excesiva pueden variar, pero se puede producir después de consumir alimentos muy condimentados o salados, el alto consumo de medicamentos, pérdida de los líquidos corporales, trastornos mentales, entre otras. Sin embargo, este síntoma también podría presentarse con las siguientes enfermedades.
Diabetes
La diabetes es una enfermedad crónica que ocurre cuando el cuerpo no puede regular adecuadamente los niveles de glucosa en la sangre. La glucosa es la principal fuente de energía para el cuerpo y proviene de los alimentos que consumimos. La regulación de los niveles de glucosa en la sangre se realiza mediante la acción de la hormona insulina, que es producida por el páncreas.
Existen diferentes tipos de diabetes, la tipo 1 y 2 que tienen en común el síntoma de sed excesiva, y se produce cuando el cuerpo no puede producir insulina en cantidades suficientes, lo que requiere el uso de insulina externa para regular los niveles de glucosa en la sangre.
Los síntomas más comunes de la diabetes incluyen aumento de la sed, micción frecuente, pérdida de peso inexplicada, fatiga, visión borrosa y cicatrización lenta de heridas. Sin embargo, algunas personas pueden no presentar síntomas o tener síntomas leves.
El manejo de la diabetes implica mantener niveles de glucosa en la sangre dentro de un rango objetivo a través de una combinación de alimentación saludable, actividad física regular, hidratación constante y monitoreo regular de los niveles de glucosa en la sangre.
Cáncer de páncreas
El cáncer de páncreas es un tipo de cáncer que se origina en las células del páncreas, un órgano ubicado en la parte superior del abdomen, detrás del estómago. El páncreas desempeña un papel importante en la digestión y en la producción de hormonas que regulan los niveles de azúcar en la sangre.
El cáncer de páncreas se caracteriza por el crecimiento descontrolado de células malignas en el páncreas. Estas células pueden formar tumores en el páncreas y, a medida que el cáncer avanza, pueden diseminarse a otras partes del cuerpo, como los ganglios linfáticos, el hígado y los pulmones.
Algunos de los factores de riesgo asociados con el cáncer de páncreas incluyen la edad avanzada, el tabaquismo, la obesidad, la diabetes tipo 2, la exposición a ciertos productos químicos y antecedentes familiares de cáncer de páncreas.
Los síntomas comunes de esta enfermedad son la orina de color oscuro, pérdida de pesos y del apetito, coágulos sanguíneos, fatiga, picazón en la piel, dolor abdominal y sed excesiva.
Según Infosalus citando un estudio de la Universidad de Oxford, precisa que uno de los síntomas que se conocieron del cáncer de páncreas es la sed excesiva, que suele estar presente en un daño antes de un posible diagnóstico. La investigación se realizó con 24.236 pacientes de Inglaterra que tenían cáncer de páncreas y también tenían hemorragias en el estómago.