La gripa o resfriado, como también se le conoce, es una afección de tipo respiratorio que es causada por el virus de la influenza. No suele ser una enfermedad grave, pero se debe tratar de buena manera, ya que, su mal control puede terminar provocando el surgimiento de trastornos como la neumonía y la bronquitis, los cuales tienen un nivel de gravedad muy alto.
La fiebre, la tos, el dolo de garganta, la congestión nasal, el malestar en el cuerpo, los dolores de cabeza y la fatiga son algunos de sus síntomas. En niños puede llegar a provocar diarrea. Mantener el sistema inmune fuerte reduce, de forma considerable, el riesgo de contraer gripa o resfriados.
Por su parte, el vómito “es la eliminación de contenido del estómago o del intestino como consecuencia de una brusca contracción de la musculatura de la pared del abdomen y de la caja torácica. El vómito debe diferenciarse de la regurgitación, que es el paso hacia la boca de contenido del estómago pero sin esfuerzo”, dice el sitio web Redacción Médica.
“Para el diagnóstico es fundamental una buena historia clínica y una exploración. Hay que considerar si se trata de un problema reciente o es un problema crónico, si los vómitos se relacionan temporalmente con el consumo de alimentos, etc. En función de la sospecha clínica pueden hacerse diversas pruebas, como una radiografía del abdomen, una ecografía, un TAC abdominal, una gastroscopia o una colonoscopia”, agrega el portal.
Existe un té natural que tiene la capacidad de aliviar la gripa y reducir el vómito. Se trata de la infusión que se preparar con un elemento de origen vegetal como la menta, la cual es una de las hierbas o plantas medicinales más saludables que existen.
“La menta posee propiedades antiinflamatorias, antivirales, antibacterianas y vasodilatadoras que pueden ayudar a aliviar el resfriado o una gripe, dolores de garganta e inclusive usarse como complemento del tratamiento en la rinitis alérgica y en la bronquitis. Está demostrado en algunos estudios, que la menta podría ayudar a reducir la tos y las congestiones nasales al mejorar el flujo nasal, ya que tiene un efecto estimulante sobre el nervio palatino”, indica el portal Tua Saúde.
E incluye que “debido a que el té de menta actúa como relajante del músculo liso gastrointestinal, ayuda a reducir los espasmos que causan calambres y dolores digestivos. También esta hierba puede disminuir las náuseas, los vómitos, la hinchazón abdominal y los eructos excesivos. Además de esto, el té de menta tiene un efecto estimulante sobre la secreción biliar, mejorando la digestión de los alimentos”. Así se prepara.
Ingredientes:
- 1 cucharada de hojas de menta.
- 150 ml de agua.
Procedimiento: se debe poner 150 ml de agua en una olla y esperar a que hierva, retirar del fuego y agregar 1 cucharada de hojas de menta. Después de esto, se debe tapar el vaso y dejar reposar la infusión durante 5 a 10 minutos. Por último, se puede colar y consumir.
Como cualquier tipo de remedio casero, su ingesta debe ser moderada, sin llegar a un exceso, esto con el fin de evitar o prevenir reacciones adversas. Es de vital importancia que su consumo lo autorice un especialista en el tema, de acuerdo con las condiciones de salud de cada persona, pues hay individuos alérgicos a algunas plantas y lo desconocen.