En los últimos años, el Tusi, también conocido como “cocaína rosada” o “2C-B”, ha ganado popularidad en diversos círculos sociales, especialmente entre los jóvenes. Esta droga sintética ha llamado la atención no solo por su color distintivo, sino también por sus potentes efectos psicoactivos. Sin embargo, a medida que su consumo se extiende, también lo hacen las preocupaciones sobre sus consecuencias para la salud.
¿Qué es el Tusi?
El Tusi es una droga de diseño, lo que significa que es una sustancia creada en laboratorio que imita los efectos de drogas más conocidas. Su nombre más técnico es 2C-B, una fenetilamina con propiedades alucinógenas y estimulantes.
Originalmente sintetizada en la década de 1970 por el químico Alexander Shulgin, el 2C-B ha sido estudiado por sus efectos psicodélicos y en algún momento se utilizó con fines terapéuticos, aunque nunca de manera legalizada para estos fines.
El término “Tusi” proviene de una combinación coloquial que se ha popularizado en varios países de América Latina, especialmente en Colombia. Suele presentarse en forma de polvo de color rosa, aunque también puede encontrarse en tabletas o cápsulas.
Composición y modos de consumo
Una de las particularidades del Tusi es que su composición puede variar significativamente. Aunque su ingrediente principal es el 2C-B, los fabricantes clandestinos a menudo mezclan esta sustancia con otros compuestos, como ketamina, MDMA (éxtasis), LSD, e incluso cocaína. Esta variabilidad en la composición hace que los efectos y riesgos del Tusi sean altamente impredecibles.
Los modos de consumo del Tusi también varían. Puede ser inhalado (esnifado), ingerido en forma de pastillas o cápsulas, o incluso disuelto en bebidas. La vía de administración influye en la rapidez y duración de sus efectos.
Efectos del Tusi en la salud
El Tusi actúa sobre el sistema nervioso central, produciendo una combinación de efectos estimulantes y alucinógenos. Estos efectos pueden variar dependiendo de la dosis, la composición exacta de la sustancia y las características individuales del consumidor. A continuación, se detallan algunos de los efectos más comunes:
Efectos inmediatos
- Alucinaciones visuales y auditivas: Uno de los efectos más notables del Tusi es la alteración de las percepciones sensoriales. Los usuarios pueden experimentar colores y sonidos intensificados o distorsionados.
- Euforia y bienestar: Similar a otras drogas estimulantes, el Tusi puede inducir sentimientos de euforia, aumentando la sociabilidad y el deseo de interactuar.
- Aumento de la energía y la actividad física: Los consumidores a menudo reportan un incremento significativo en la energía, lo que puede llevar a comportamientos más activos y una disminución en la sensación de fatiga.
Efectos secundarios y riesgos
- Ansiedad y paranoia: A dosis elevadas, el Tusi puede causar ansiedad severa, ataques de pánico y paranoia. Estos efectos pueden ser particularmente intensos si la droga contiene impurezas o sustancias adicionales.
- Náuseas y vómitos: Es común que los usuarios experimenten malestar gastrointestinal, especialmente si el Tusi se consume por vía oral.
- Aumento de la frecuencia cardíaca y la presión arterial: Los efectos estimulantes de la droga pueden llevar a un aumento significativo de la frecuencia cardíaca y la presión arterial, lo cual es peligroso para personas con condiciones cardíacas preexistentes.
- Deshidratación e hipertermia: Como otras drogas estimulantes, el Tusi puede causar deshidratación y aumento de la temperatura corporal, especialmente cuando se consume en entornos de fiesta o baile.
Efectos a largo plazo
El uso continuado de Tusi puede tener consecuencias graves y duraderas para la salud. Entre los riesgos más preocupantes se encuentran:
- Dependencia y adicción: Aunque el potencial adictivo del 2C-B en sí es menor comparado con otras drogas, la mezcla con sustancias como la cocaína o el éxtasis puede aumentar el riesgo de dependencia.
- Deterioro cognitivo: El uso prolongado de drogas psicodélicas puede afectar la memoria, la concentración y otras funciones cognitivas.
- Problemas psicológicos: El consumo frecuente de Tusi puede exacerbar o desencadenar trastornos psicológicos, como la depresión, la ansiedad crónica y la psicosis.
*Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de El País.