El mercado laboral es cada vez más competitivo. Si bien hay más oportunidades de capacitación, las ofertas de empleo son cada vez más reducidas o especializadas. Poco a poco la tecnología va cobrando más importancia en los procesos de selección, por lo que herramientas como los paquetes de Office o Adobe, así como saber de programación, toman relevancia.
No obstante, otro de los factores que son muy considerados por los reclutadores es el deseo de cumplir con las tareas propuestas. Es por esto que es clave que las personas, en la medida de lo posible, puedan ejercer la profesión u oficio que les apasione.
Estudiar la carrera de su preferencia, haría que las obligaciones se cumplan con mayor voluntad. Sin embargo, hay profesiones más queridas que otras por quienes las desempeñan o por quienes se ven beneficiados por su trabajo, ya que hay elementos como la percepción de la sociedad o el grado de riesgo que hacen que estas sean más o menos respetadas.
Lo cierto es que a veces cuando pasa el tiempo, algunas personas suelen arrepentirse de la elección a nivel profesional que tomaron para su vida.
La encuesta realizada por ZipRecruiter, página de empleos, revela que un 87% de los graduados en Periodismo elegirían una carrera distinta si pudieran, seguido de Bellas Artes y de Sociología, con un 72% de arrepentidos en ambos casos.
Después de esas se encuentran, Licenciatura en Comunicaciones (64%), Educación (61%); Marketing (60 %); Medicina (58 %); Ciencias Políticas (56 %); Biología (52 %); y por último, Lengua y Literatura Inglesa (52 %).
“Cuando te gradúas, la realidad te golpea. Si apenas puedes pagar tus facturas, el sueldo pasa a ser más importante”, resaltó ZipRecruiter.
De hecho, según la plataforma los encuestados afirmaron que entre las principales causas de su arrepentimiento se encuentra la poca oferta laboral y los bajos salarios que reciben.
Las profesiones con menos arrepentimientos
Las carreras que presentan menos arrepentimiento son: Informática (72%), Criminología (72%) e Ingeniería (71%).
Después de estas profesiones, se encuentran Enfermería, Salud, Administración y Finanzas, Psicología y Gestión de Recursos Humanos.
Estrés laboral, un factor que preocupa a los profesionales
Como por ejemplo, el final de las vacaciones y la adaptación a la rutina laboral y doméstica trae consigo en ocasiones algunas molestias digestivas relacionadas con el estrés anteriormente mencionado.
Las molestias digestivas, como ardor e hinchazón abdominal, “son algunas de las formas que tiene la ansiedad de manifestarse, puede percibirse desde una ligera molestia hasta en ocasiones como dolor intenso”, según ha explicado la doctora Isabel Iranzo, especialista de aparato digestivo en el Hospital Vithas Valencia 9 de Octubre.
“Muchas veces la ansiedad y la angustia generan ardor y dolor de estómago, ya que el estrés afecta a la mucosa digestiva produciendo lesiones y reducción de la barrera moco defensiva de la misma. Además, el cortisol, que es una hormona que segregamos en mayor cantidad cuando sufrimos estrés, puede afectar a nuestro sistema digestivo porque puede interferir con la síntesis gástrica de prostaglandinas, que son necesarias para mantener la barrera protectora normal contra el ácido gástrico, y la pepsina. En ocasiones, esto puede producir molestias y/o derivar en trastornos digestivos”, ha advertido la especialista.
Las molestias que se dan en el aparato digestivo por estrés se conocen como distrés abdominal y, de acuerdo con Isabel Iranzo, “llega a afectar a un 25 por ciento de la población”, puede afectar “a todo el aparato digestivo, y es incluso capaz de intervenir en nuestro sistema nervioso modificando el apetito”.
La forma más común en que el estrés afecta al sistema digestivo es empeorando los síntomas de una afección digestiva ya existente.
*Con información de Colprensa.