Hablar de la sexualidad femenina es aún hoy un tabú. Despierta risas nerviosas, comentarios escandalizados y dependiendo de cómo sea vivida por la mujer, es juzgada. Por esto, Valeria De La Espriella, máster en sexología, love coach, fundadora del blog ‘Solteras DeBotas’ y autora del ‘Manual para solteras DeBotas’ creó ‘Sexpodérate’, que más que ser un taller y una sección de su blog, es una invitación para que cada mujer se empodere de su sexualidad.
De La Espriella nació en Cartagena, es publicista especialista en marketing, pero desde hace unos años, queriendo sanar un desamor y liberarse de la presión que ejercían sus conocidos sobre ella por ser soltera, decidió comenzar un blog. Hace ya cuatro años dejó su puesto como directora de marketing y comunicaciones para dedicarse de lleno a ‘Solteras DeBotas’, a escribir y a seguir expandiendo su comunidad de mujeres.
Además, queriendo profesionalizarse y estudiar más sobre el bienestar emocional, el erotismo, las relaciones interpersonales y el feminismo, realizó estudios en coaching y sexología. Hoy su objetivo es recordarle a cada mujer que tiene la libertad de elegir qué tipo de vida quiere, que el bienestar y la plenitud son vitales y que cualquier decisión de cómo llevar su sexualidad es válida.
De La Espriella habló con El País a través de video llamada desde su residencia en Bogotá sobre su proyecto ‘Sexpodérate’, de las opresiones y los juicios morales hacia la sexualidad femenina y de la importancia de que la mujer tome las riendas de su sexualidad.
¿Qué significado hay detrás de Sexpodérate?
El concepto de Sexpodérate nace de dos términos: de sexualidad y de empoderamiento. Es la combinación de la educación en sexología, en empoderamiento y en autoestima enfocado hacia lo erótico y sexual. En pocas palabras, es empoderarse en la parte de la sexualidad.
Inició como concepto, pero ahora es una sección importante de su blog, además de una palabra que usted registró…
Sí, yo ya registré la palabra ‘Sexpodérate’. En mi blog de ‘Solteras DeBotas’ es la sección de sexualidad, también es el nombre de una charla que doy y de uno de los capítulos sobre sexualidad y erotismo de mi libro Manual para Solteras DeBotas.
¿Cómo llegó a la construcción del concepto?
Antes de ser proyecto, inició como un taller para unas amigas que me pedían que me reuniera con ellas para hablar sobre sexualidad y sobre las dudas que tenían frente al placer, la masturbación femenina y temas relacionados. Luego me comenzaron a llamar más mujeres interesadas en el taller y como yo soy publicista, a todo le tengo que poner un nombre, ahí nació Sexpodérate.
¿Por qué es importante que las mujeres nos empoderemos sexualmente?
Porque la sexualidad es un aspecto vital de los seres humanos, es fuente de bienestar, de placer y de felicidad. Sin embargo, con las mujeres hay una opresión simbólica hacia su sexualidad, todo el tiempo está en boca de los demás, en tela de juicio, cuando la verdad es que nosotras también tenemos derecho a disfrutar del placer, a expresar nuestra sexualidad y a elegir cómo queremos vivirla. Es necesario que ese empoderamiento que hemos venido teniendo en otros aspectos de la vida, lo tengamos también a nivel sexual y erótico.
Empoderándonos decidimos qué es lo que queremos, qué es lo que más nos gusta, qué es lo que nos genera placer, conocemos nuestro cuerpo.
¿Cuáles son esas señales que nos indican que no estamos empoderadas sexualmente?
Lo primero es el desconocimiento de qué cosas quieres o no quieres en tu vida. La sexualidad de cada persona es tan única como la huella dactilar, si cada persona se conoce, podrá construir su sexualidad como prefiera. Lo segundo es la culpa y los miedos, hay que empezar a reconocer la sexualidad como un aspecto que genera felicidad y que hace parte de nuestros derechos sexuales y reproductivos, no como un pecado.
Otra señal es la presión por querer ser la mejor ejecutiva, madre, mujer, tener el mejor cuerpo. Esa mala costumbre que nos puede hacer muy eficientes en otros aspectos, no es buena en la sexualidad, pues olvidamos disfrutar, hay que soltar el control y dejarse llevar. Otra de las señales es cuando la mujer no practica el autocuidado y la autoafirmación, cuando no sabe decir no, ni poner límites. También el fingir, muchas mujeres deseando complacer a su pareja fingen para no herirle su ego. En la medida en que una mujer sea más honesta consigo misma, se conozca en lo mental, en lo emocional y en lo corporal, va a poder disfrutar más de su sexualidad.
¿Cómo nos empoderamos sexualmente?
Cada una haciéndose cargo de su vida, ejerciendo la autonomía y la libertad a la hora de decidir y construir la vida que quiere y la hace feliz. También, como mujer debo manejar mi autoestima, autoconocerme para construir mi mapa erótico, reconocer mis zonas erógenas y quitar un montón de mitos que tenemos y que nos hacen sentir raras. La presión social siempre va a estar, pero hay que saber que más allá de la presión, están esas decisiones que deben ser tomadas en pro de mi plenitud y bienestar.
¿Cómo influye la autoestima en la sexualidad?
La autoestima está implicada en todas esas decisiones que se toman en torno a la sexualidad. La autoestima importa para la elección de pareja, para saber decir no, desde lo físico también, para sentirse cómoda con el cuerpo. La autoestima y el amor propio son la base de cualquier relación, sintiéndose merecedora de cosas buenas, se toman mejores decisiones es el aspecto sexual.
Usted mencionaba que conocerse es también importante…
Es otro pilar del autoestima. El autoconocimiento se conecta con la sexualidad, porque si yo no me conozco, si no sé cuáles son mis zonas erógenas, lo que me gusta, ¿cómo voy a guiar a mi pareja? No puedo esperar que una tercera persona me diga cómo debo sentir y entonces quedaré muy insatisfecha. El conocimiento es poder y en el caso de la sexualidad es placer.
¿Cuáles son algunos de esos estereotipos vigentes sobre la sexualidad femenina?
El de la mujer que es promiscua si tiene una vida sexual bastante activa; el de la mujer que no es profesional por mostrar escote; el de la mujer amargada y aburrida si no tiene vida sexual; que si eres soltera entonces estás triste porque solo eres feliz estando casada.
¿Qué problemáticas afronta la sexualidad femenina?
La doble moral. Por un lado, las mujeres somos objeto de deseo, una imagen sexual estereotipada, cuando eres una mujer en ese sentido, chévere, pero cuando eres una mujer que decide dejar de ser objeto y te conviertes en un ser integral que desea experimentar su sexualidad, disfrutar y explorarse, entonces es malo.
Siempre la sexualidad de la mujer ha estado construida por el Estado, por el marido, por la iglesia, por la cultura, pero no por ella misma. Ya es tiempo de que la mujer empiece a diseñar qué tipo de sexualidad quiere vivir.
Hablar de sexualidad es liberador…
Totalmente. Cuando una mujer puede hablar de su sexualidad, de las cosas que quisiera hacer, sobre lo que le genera placer y sentir que nadie la va a juzgar porque está en un espacio donde hay confianza y no hay prejuicios, eso repercute en que ella se sentirá mejor, más segura consigo misma y eso lo va a aplicar con ella y con su pareja.
Estamos en el hoy llamado Mes de la Mujer. ¿Cómo ve nuestro panorama?
Marzo es el recordatorio de todo lo que hemos alcanzado, pero también de todas las cosas que hacen falta. Lo cierto es que vivimos en un sistema patriarcal y sí, la mujer conquistó muchos espacios, pero aún están los micromachismos latentes y hay muchas cosas por hacer.
Todavía en Colombia los hombres ganan más que las mujeres y nos toca esforzarnos el doble para demostrar que podemos con todo, que por ser mamá no dejamos de ser eficientes, pero a su vez, atender al marido, tener la casa organizada y bonita porque qué dirá la gente…
La liberación femenina al final no es tan liberación femenina, hoy estamos esclavizadas de un montón de cosas y del qué dirán.
¿Cómo se siente al haber construido una comunidad de más de 250.000 personas en Solteras DeBotas?
Ha sido un proceso bonito sentir que somos un grupo de mujeres que nos unimos, leer que las chicas me dicen “a mí también me pasó” ha sido una forma de compartir y de crear una solidaridad silenciosa. Yo te apoyo y tú me apoyas. Es importante que entre mujeres nos apoyemos, que ayudemos a las otras, entender que cuando a una mujer le va bien a las demás también.
¿Por qué el nombre de Solteras DeBotas?
Soltera para decir que la soltería es igual de respetable que el matrimonio, que la mujer escoja qué es lo que quiere. Debotas porque es una burla al machismo cuando se refiere a las mujeres devotas, la esposa y madre devota, y también queriendo dar el mensaje de ponerse las botas y caminar hacia adelante, hacia la vida que uno como mujer quiere construir.
Está próxima a publicar su segundo libro, cuéntenos un poco sobre él.
Es un libro bellísimo, se va a llamar ‘Lovefulness’ y será publicado en mayo. Es un texto tipo guía práctica de amor propio, en este hago un recorrido de cómo puedes fortalecer tu autoestima a través de diferentes aristas, tiene teoría, algunas meditaciones mindfulness, ejercicios de coaching y es interactivo, lo puedes rayar, colorear, colocar notas porque la idea es que lo personalices.
¿Qué mensaje les deja a las mujeres?
Querida mujer, recuerda siempre esto: eres suficiente y no necesitas demostrárselo a nadie.
A empoderarse
El empoderamiento femenino es integral así que también incluye la sexualidad, por eso es tan importante fortalecer la autoestima en este aspecto y reducir el analfabetismo erótico.
Autoconciencia: La sexualidad también es fuente de bienestar, por eso dale la importancia que se merece. Identifica los miedos, las culpas y las creencias limitantes que impiden gozártela a plenitud y empieza a trabajarlos. Desarrolla la creatividad y date el permiso de merecer una vida sexual llena de experiencias enriquecedoras.
Autoaceptación: Reconócete sin juzgarte o compararte. No importa el tipo de cuerpo que tengas o si ya no tienes 20, todas merecemos sentirnos cómodas con nuestra anatomía y el sex-appel no tiene fecha de vencimiento. El poder no está en el físico sino en la actitud. Sin aceptación no hay disfrute, cuando te enfocas más en que no se vea la celulitis, te distraes y te desconectas del placer.
Autoconocimiento: Construye tu mapa erótico, este esquema incluye aspectos físicos, emocionales y mentales, y te ayuda a descubrir tus zonas erógenas, el tipo de prácticas, personas, situaciones, o fantasías que te encienden o te apagan. Si tú misma no sabes lo que quieres, no esperes a que alguien externo lo adivine.
Autoafirmación: Pon límites sanos y aprende a decir NO. Desde la antigüedad a las mujeres nos educaron para complacer y no para el experimentar el placer, no debes fingir que algo te gusta si lo que sientes, es todo lo contrario, algunas callan por miedo, por presiones, o para no herir el ego de su pareja. Tu cuerpo te pertenece y tienes el derecho de decidir cuándo, cómo y con quién.
Autoerotismo: Esta es una práctica natural y saludable, al estimular tu cuerpo y no solamente el área genital, disfrutarás de las sensaciones que tú misma te produces y te vuelves partícipe en la construcción de tu placer, esto favorece al autoconocimiento y al amor propio, también ayuda a reducir los niveles de estrés, se fortalece el suelo pélvico, entre otros muchos beneficios.
Autonomía: Ten tu propio criterio y toma decisiones basadas en lo que consideras mejor para ti, no en lo que piensan los demás. En términos de sexualidad esto se puede expresar de muchas formas, desde elegir cómo te quieres vestir, tu orientación sexual, con que método planificas, si te gusta ser lanzada o recatada, si te maquillas o no, si deseas una relación afectiva o prefieres estar soltera, si eres monógama o poliamorosa, si quieres o no quieres hijos, etc.
Autocuidado: Además de utilizar métodos de barrera como el condón en tus encuentros sexuales, cuídate también en las relaciones afectivas. Aprende a detectar las señales, si la persona intenta manipularte, controlarte o te trata mal, aléjate lo más rápido posible. No te quedes en donde no te valoren.
Autenticidad: Tu vida sexual es tan única como tu huella dactilar, además es dinámica, ya que puede cambiar de acuerdo a la etapa de la vida en la que te encuentres y a tus experiencias. Así que no tienes por qué imitar a una actriz porno, ni sexo todos los días, tampoco estás en la obligación de conocer todas las posturas del Kamasutra. Diseña tus encuentros con lo que te gusta, ábrete a explorar cosas nuevas, desecha lo que no te sirva y quédate con lo que mejor funcione para ti.