El correo electrónico se ha convertido en una herramienta fundamental para la comunicación personal y profesional. Sin embargo, uno de los problemas más comunes que los usuarios enfrentan es la clasificación errónea de correos importantes como spam.

Esto puede llevar a que mensajes cruciales se pierdan o se pasen por alto, por lo que a continuación encontrará algunas estrategias y prácticas recomendadas para evitar que sus correos de Gmail terminen en la carpeta de spam.

1. Evitar el uso excesivo de palabras o frases sospechosas

Los filtros de spam de Gmail utilizan algoritmos para detectar palabras o frases que suelen estar asociadas con correos no deseados. Evite el uso excesivo de palabras en mayúscula, signos de exclamación o lenguaje que suene demasiado promocional, pues estos pueden activar los filtros de spam. En su lugar, opte por un lenguaje claro y conciso.

Gmail es una de las aplicaciones más utilizadas por las empresas. | Foto: (c) Copyright 2021, dpa (www.dpa.de). Alle Rechte vorbehalten

2. Personalizar su dirección de correo electrónico

Las direcciones de correo electrónico genéricas o poco conocidas pueden aumentar las posibilidades de que su correo termine en la carpeta de spam. Intente utilizar una dirección de correo electrónico profesional y personalizada en lugar de una genérica, debido a que esto genera confianza en el destinatario y reduce la probabilidad de clasificación errónea.

3. Mantener una buena reputación de remitente

Gmail y otros servicios de correo electrónico consideran la reputación del remitente al decidir si un correo es spam o legítimo. Evite enviar mensajes masivos no solicitados y asegúrese de que sus suscriptores tengan la opción de cancelar los correos si desean hacerlo, así puede reducir las posibilidades de que sus correos se consideren spam.

4. No abusar de los enlaces y archivos adjuntos

Los correos con numerosos enlaces o archivos adjuntos pueden levantar sospechas y activar los filtros de spam. Evite incluir una gran cantidad de enlaces en un solo correo y asegúrese de que los archivos adjuntos sean seguros y relevantes para el contenido del mensaje.

5. Utilizar el campo “Asunto” de manera adecuada

El asunto del correo es uno de los elementos clave que los filtros de spam consideran al determinar si un mensaje es legítimo. Evite asuntos vagos o excesivamente largos; sea claro y conciso en la descripción del contenido del correo.

Debe tener cuidado de que sus correos no se vayan a spam. | Foto: Illustration by Thiago Prudencio/SOPA Images/LightRocket via Getty Images

6. Comprobar la lista de remitentes bloqueados y filtrados

Es posible que haya configurado accidentalmente reglas de filtrado que envían correos de ciertos remitentes a la carpeta de spam. Revise sus configuraciones de filtro y asegúrese de que no esté bloqueando direcciones de correo electrónico importantes.

7. No utilizar imágenes en exceso

8. Enviar correos electrónicos regularmente

Si tiene una lista de contactos o suscriptores, es importante mantener una comunicación regular. Los correos esporádicos pueden parecer sospechosos para los filtros de spam, así que se debe mantener una frecuencia consistente en sus comunicaciones por correo electrónico.

Siguiendo estos tips podrá evitar que sus correos se vayan a la carpeta de spam. | Foto: PA Wire/PA Images

9. Utilizar una dirección de respuesta válida

Verifique que la dirección de respuesta en sus correos electrónicos sea válida y esté monitoreada. Esto proporciona una forma para que los destinatarios se comuniquen con usted en caso de preguntas o problemas, lo que aumenta la credibilidad de tus mensajes.

10. Realizar pruebas de envío

Una buena práctica es enviar sus correos electrónicos a una dirección de prueba antes de enviarlos a su lista completa. Esto te permite identificar cualquier problema que podría hacer que su correo se clasifique como spam y corregirlo antes de enviarlo a sus destinatarios.

Siguiendo estos consejos y buenas prácticas, puede mejorar significativamente las posibilidades de que sus correos de Gmail lleguen a la bandeja de entrada de sus destinatarios en lugar de la carpeta de spam. Recuerde que es importante mantener buenas prácticas de remisión y contenido en sus comunicaciones por correo electrónico.

*Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de El País.