La cocina, ese espacio vital en cada hogar donde se crea magia culinaria, también puede ser un lugar donde la energía se consume sin que apenas nos demos cuenta. Desde el humilde hervidor de agua hasta el sofisticado horno, cada electrodoméstico tiene su propio apetito energético. En este artículo, podrá conocer algunos de los principales drenadores de energía en la cocina, revelando el consumo de cada uno de ellos y ofreciendo una recomendación sobre cómo minimizar su impacto en nuestra factura energética y en el medio ambiente.

Identificando los drenadores de energía

Tanto la Organización de Consumidores y Usuarios como el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), han proporcionado datos reveladores sobre los electrodomésticos de cocina que más energía consumen. Entre ellos se destacan la nevera (662 kWh/año), el congelador (563 kWh/año), microondas (800 y 900 kWh) el lavavajillas (246 kWh/año).

La nevera: Un titán del consumo

La nevera es indiscutiblemente el rey del consumo energético en la cocina. Aunque no sea el más potente en términos de energía, su constante funcionamiento lo convierte en un gigante devorador de electricidad. Consumiendo hasta 662 kWh anuales, puede representar hasta el 22% del gasto eléctrico de un hogar. Sin embargo, optando por modelos eficientes energéticamente, este consumo puede reducirse drásticamente a menos de 200 kWh al año.

Descubrir los drenadores de energía en tu cocina puede ser el primer paso hacia un hogar más eficiente y económico. | Foto: Gary Burchell

El lavavajillas: Eficiencia en acción

Aunque puede sorprender, el lavavajillas contribuye significativamente al gasto energético de un hogar, representando el 8.3% del mismo. A pesar de esto, su eficiencia supera con creces el lavado manual de platos, ya que no solo ahorra electricidad sino también agua. Se estima que al utilizar un lavavajillas en lugar de lavar a mano, se pueden ahorrar hasta 30 litros de agua por ciclo.

Desde la nevera hasta el microondas, cada electrodoméstico tiene su propio apetito energético que puede impactar tu presupuesto mensual. | Foto: Getty Images

El microondas: Eficiencia de alta velocidad

A menudo subestimado, el microondas comparte un consumo energético similar al del horno, oscilando entre 800 y 900 kWh. Sin embargo, su capacidad para calentar alimentos de manera rápida y eficiente lo ha convertido en una opción cada vez más popular. En el peor de los casos, puede representar hasta el 7% del consumo total de energía de los electrodomésticos.

La lucha contra el derroche energético comienza en casa, y los electrodomésticos de la cocina pueden ser los principales culpables. | Foto: Getty Images

Recomendaciones para reducir el gasto

Más allá de conocer los drenadores de energía en la cocina, es crucial adoptar medidas para reducir su impacto en las facturas y en el medio ambiente. Optar por electrodomésticos con alta eficiencia energética, como los clasificados con la etiqueta energética A+++, puede significar una considerable reducción en el consumo de energía.

Además, practicar hábitos conscientes, como mantener los electrodomésticos limpios y en buen estado, ajustar adecuadamente la temperatura y utilizar programas de ahorro de energía cuando sea posible, puede marcar una gran diferencia en el consumo energético a largo plazo.