En la actualidad, los electrodomésticos se han convertido en una parte esencial de la vida cotidiana, facilitando tareas y mejorando nuestra calidad de vida. Uno de los dispositivos más utilizados en los hogares es el televisor, que no solo sirve como fuente de entretenimiento, sino también como una herramienta para la información y la educación.
Sin embargo, pocos son conscientes de que el televisor, incluso cuando no está en uso activo, puede seguir consumiendo energía y, por lo tanto, incrementando la factura de electricidad. Este consumo de energía en modo standby o de reposo es un fenómeno común en los televisores modernos y, si no se toman las precauciones adecuadas, puede tener un impacto significativo en el gasto energético del hogar.
¿Por qué el televisor consume energía en standby?
La razón principal por la que un televisor sigue utilizando electricidad en modo standby es la necesidad de mantener algunos circuitos en funcionamiento. Esto permite que el televisor reciba comandos del control remoto y que, en el caso de los modelos inteligentes, se mantenga en espera para actualizaciones de software o para aplicaciones en línea.
Además, los televisores más modernos, en especial los televisores inteligentes, están equipados con tecnología como el Wi-Fi y Bluetooth, que permanecen activos incluso cuando el aparato no está encendido. Esta conectividad también contribuye al consumo de energía.
El impacto en la factura de electricidad
El impacto del consumo en modo standby de un televisor puede parecer insignificante a corto plazo, pero si se deja conectado de esta manera durante largos períodos, puede acumularse y resultar en un incremento significativo en el precio de la factura de electricidad.
Por ejemplo, un televisor que consume 1 vatio en standby durante 24 horas al día podría gastar aproximadamente 365 vatios al año, lo que equivale a 0.365 kWh. Aunque este consumo por sí solo no es elevado, si se tiene más de un televisor en la casa o se deja en standby durante períodos prolongados, el gasto puede aumentar considerablemente.
De acuerdo con estimaciones, si un hogar tiene varios televisores en standby durante todo el año, el consumo adicional de energía puede llegar a ser de entre 20 y 30 kWh anuales, lo que puede traducirse en un costo adicional de aproximadamente entre 10.000 y 13.000 pesos colombianos, dependiendo de la tarifa eléctrica.
Este aumento en la factura puede parecer pequeño si se considera un solo televisor, pero en hogares con varios televisores o en aquellos que pasan muchas horas frente a la pantalla, los costos pueden acumularse con el tiempo.