¿Está pensando en cambiar de nevera, de carro o de lavadora? Tal vez le conviene pensar no solo en el tamaño, el color, el diseño o las funciones básicas de cualquiera de esos aparatos. La pregunta más importante qué usted debería hacerse, si piensa en alguna de esas inversiones, es qué tanta capacidad tienen de conectarse a internet.
Porque el ‘internet de las cosas’ (‘IoT’ por sus siglas en inglés), esa tendencia global hacia la que apuntan hoy todas las industrias basadas en tecnología de la información, empezará a entrar de lleno a Colombia en el 2018.
El año próximo los colombianos contarán con la primera red 4.5G para conectarse a Internet. Claro, la compañía que la desarrolla, prevé que la misma estará operando a finales del primer semestre. La misma, promete la compañía, multiplicará por siete la velocidad de transferencia de datos, garantizará más rápida respuesta entre dos usuarios y ofrecerá mayor capacidad para conectar dispositivos.
Y ese será su primer paso para empezar a masificar en el mercado colombiano las soluciones tecnológicas que permiten conectar miles de dispositivos de uso cotidiano a internet: desde electrodomésticos tan comunes como una nevera o una cafetera, hasta dispositivos especiales para cuidar la salud, o vehículos.
En realidad, para algunos colombianos no se trata de algo nuevo. La misma Claro ya cuenta desde el 2016 con usuarios que utilizan sus servicios ‘Care Time’, ‘Move Track’ y ‘Smart Home’.
El primero es una conexión que les permite a los padres de familia saber dónde están sus hijos en edad escolar, e incluso comunicarse con ellos, y funciona a través de un reloj. El segundo cumple casi la misma función, pero aplicada a mascotas u objetos. Y el tercero permite a una persona contar con un sistema de seguridad y control de diversos aparatos de su casa, que se gestiona desde la pantalla del celular.
Según José Luis Gómez, director de Innovación de Claro, lo que cambiará a partir del 2018 es que “la red 4.5G permitirá acceder a esos servicios en condiciones de movilidad, y de forma más veloz y eficiente”.
Pero, ¿qué tanto se masificará el ‘IoT’ en nuestro país? Los analistas de la industria sostienen que eso dependerá de tres grandes factores. El primero, qué tan rápido avanzan los fabricantes de electrodomésticos u otros dispositivos en incorporar a sus creaciones las nuevas funciones de conectividad. El segundo, el tiempo que se tomarán para traer al mercado colombiano esos nuevos aparatos equipados para conectarse a internet. Y por último, el precio al que los mismos llegarán.
Según cifras del estudio Ericsson Mobility Report (presentado en junio de este año), se estima que en el 2022 habrá 29 mil millones de dispositivos conectados a Internet en todo el planeta. De esa cantidad, unos 18 mil millones serán aparatos asociados al ‘internet de las cosas’
Tras el avance en el segmento de relojes, pulseras y otros accesorios relacionados con el vestuario, grandes marcas de electrónica han empezado a hacer sus grandes apuestas por el negocio de los electrodomésticos que operan conectados a internet. Samsung, por ejemplo, sorprendió en enero de este año al lanzar su ‘FamilyHub 2.0’, una nevera con la que se puede interactuar a través de una pantalla táctil de 21.5 pulgadas, para incorporar internet al mundo de la cocina.
Ese tipo de productos electrónicos son los que empezarán a abrir un nuevo segmento en el país, una vez opere la infraestructura que garantiza mayor y mejor conectividad.
Pero más allá de ese mercado masivo, el otro gran reto para Colombia será incorporar el ‘IoT’ a las empresas, para ganar en productividad. En ese frente se visualizan ya posibilidades como la de hacer más eficiente el manejo de las cadenas de distribución, controlar al máximo la gestión industrial o lograr ahorros en la prestación de servicios públicos.
Ese será solo el principio. Porque lo que hasta hace poco parecía ficción, ya empieza a ser realidad.