Temu, una plataforma de comercio electrónico que ha ganado popularidad por sus precios bajos, no está exenta de controversia. Scott Dixon, un especialista en derechos del consumidor del Reino Unido con una destacada trayectoria en la recuperación de reembolsos para sus clientes, ha expresado serias reservas sobre la plataforma.
Dixon, conocido por haber logrado más de 300.000 libras en reembolsos, ha compartido sus preocupaciones en una reciente entrevista con el medio iNews. Según Dixon, el simple hecho de que Temu no sea un portal fraudulento no implica que sea una opción segura para los consumidores.
Preocupaciones sobre la privacidad de los datos personales
Uno de los principales motivos de desconfianza de Dixon hacia Temu es el manejo de los datos personales de los usuarios. En su entrevista, el experto destacó un sorteo realizado por la plataforma en el que se ofrecían cupones de descuento a cambio de información detallada de los usuarios. Dixon comenta que, una vez que los usuarios entregaban esta información, pierden el control sobre ella, lo que podría llevar a suplantación de identidad.
Aunque Temu declara cumplir con las normativas de protección de datos en los territorios donde opera y niega comercializar la información de sus usuarios, varios especialistas en seguridad digital han manifestado inquietudes sobre el posible mal manejo de esta información.
Un estudio realizado por la Comisión que evalúa las relaciones económicas y de seguridad entre EE.UU. y China señaló carencias en la protección de datos por parte de Temu. Por otro lado, una investigación de Grizzly Research catalogó la app móvil de Temu como una de las más riesgosas a nivel mundial.
Dudas sobre prácticas laborales y ética en precios
Más allá de los problemas de privacidad, Dixon pone en tela de juicio las prácticas laborales que posibilitan los precios extremadamente reducidos de Temu. En su papel de intermediario entre vendedores y compradores, Dixon resalta lo complicado que resulta identificar la procedencia de los artículos y sugiere que los bajos costos podrían estar vinculados a mano de obra mal remunerada o incluso explotada.
El experto señala que la opacidad en cuanto al origen de los productos impide a los consumidores conocer las circunstancias en las que se elaboran. Esta falta de transparencia podría estar encubriendo prácticas laborales cuestionables, lo cual representa una preocupación adicional para aquellos consumidores interesados en el respeto a los derechos laborales y las condiciones de trabajo adecuadas.
*Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de El País.