La robótica permite que las generaciones que crecen se llenen de ilusión, de capacidades y valores para reconstruir sus realidades, permite que los dispositivos hagan parte de nuestro cotidiano vivir y que podamos capacitarnos para utilizar estos recursos a nuestro favor.
Ayudar al medio ambiente, llegar a lugares inexplorados y construir máquinas que puedan limpiar el agua contaminada del océano, son algunas de las soluciones que la robótica proyecta para Jose Díaz, un pequeño de 9 años, quien además de ser un gran lector y aficionado de la robótica, ha pedido a su padre, Yesid Díaz, que lo lleve a recorrer por segunda vez La feria Ciudad Futuro ubicada en el centro comercial Unicentro, en el sur de Cali.
De esta manera los padres se convierten en instrumentos indispensables para el fomento y apoyo del aprendizaje de los infantes del país. Lorena Hoyos, madre de Joshua Ibargüen, de 7 años, al terminar el recorrido por la feria, considera que “este es un espacio que Colombia necesitaba porque nuestros niños tenían total acceso a la tecnología pero no a algo que retroalimentara su creatividad y aprendizaje”.
La creatividad es un aspecto que cada vez toma más valor. Y cuando se recorre la muestra se escuchan las ideas de los niños: “¿será que ese robot vuela?” “¿Te imaginas un robot que le haga masajes a mi mamá?”. “Yo quiero uno que haga el aseo”. “Yo me haría uno para que me lleve al colegio”.
‘Ciudad futuro’ se llevará a cabo hasta el 31 de diciembre. Los asistentes podrán entrar en el mundo de la robótica y la tecnología mientras caminan por las cinco secciones o ciudades: Ciudad Futuro, Ciudad Bloques, Ciudad Ecológica, Ciudad 3D y Crea City. También hay una zona enfocada en la realidad virtual y la exposición de Nao, un robot mundialmente conocido.
Nao es un robot humanoide programado para hablar, entender chistes, caminar y bailar. Fue ensamblado en Francia en 2004. Se maneja a través de un programa básico por medio del cual se muestra a los niños cómo se envían órdenes al robot.
La realidad virtual también hace parte de Ciudad Futuro con el casco de realidad virtual oculus, a través de este se permite la interacción de los asistentes con juegos que ponen a prueba sus sentidos.
Andrés Felipe Pérez, asistente de la exposición opina que “estas son cosas que uno no ve a diario y de las cuales puede aprender mucho. Sin embargo, necesitamos más apoyo de las entidades pertinentes para que estas oportunidades se sigan dando, porque a la final este es nuestro futuro”.
En 3D
En Ciudad 3D se encuentran las máquinas ensambladas por la empresa Colombiatec por medio de las que se realizó una exposición de figuras impresas en 3D, así como también la realización de un “mapa mundi” impreso con las partes representativas del mundo.
Ensamblando magia
La primera ciudad es la del Futuro, caminar por ella es una inmersión total en el mundo de la robótica. En ella se cuenta con exponentes de la Universidad Autónoma de Occidente, quienes además de encargarse del ensamblaje y programación de los robots, permiten que los asistentes comprendan su funcionamiento.
Jorge Andrés Jaramillo, uno de los ingenieros de la exposición, ha rediseñado el interior del robot BB-8, de Star Wars, reemplazando piezas de impresión 3D por unas elaboradas en fibra de vidrio y madera, esto debido a los altos costos que se requerían para elaborar el diseño original. “He trabajado durante un mes para hacerlo factible”.
Los implementos nos fueron facilitados, sin embargo la programación es trabajo nuestro, esto nos llevó aproximadamente cinco horas en las que requerimos buscar programas y aplicaciones que nos facilitaran el proceso”, afirma César González quien estudia Ingeniería Mecatrónica en la Universidad Autónoma de Occidente y se encargó de la programación de tres de los robots de la exposición. Estos son brazos mecánicos coordinados en código a través de un arduino (dispositivo a través del cual se programa).
Además de brazos mecánicos y robots en construcción en esta sección pueden encontrarse distintos robots de exhibición, tres de estos son funcionales y pueden ser manejados por los asistentes a la exposición.
Pequeños inventores
En Ciudad Bloques se encuentran los dispositivos de la empresa Lego, los cuales se manejan a través de una aplicación en un dispositivo móvil. Esta zona también permite que los niños interactúen con fichas y jueguen mientras construyen estructuras.
“Esta robótica es más educacional, nosotros queremos que por medio del juego los niños estén aprendiendo aspectos de lógica, motricidad, trabajo en equipo y valores”, asegura Stephania Betancourth, egresada de ingeniería mecatrónica de la Universidad Autónoma de Occidente, quien además es profesora de la empresa Robótica para Niños y se encarga de manejar la programación de las miniaturas tipo industriales de Lego (maneja desde simuladores de robots de carga hasta grúas mecánicas y bandas de producción).
Por otro lado, Melanny Fernández estudia arquitectura en la universidad San Buenaventura y ha hecho parte del equipo para el ensamblaje de los robots en Ciudad Bloque. “La robótica permite que los procesos que creemos complejos se hagan mucho más fáciles y espacios como este permiten que también se formen lazos familiares, porque son padres e hijos quienes han decidido construir un robot juntos”.
La robótica se hace simple para los pequeños utilizando piezas y figuras que los adentran en este mundo haciéndolo más interesante para ellos.
Ciudad Ecológica
Ciudad Ecológica es el contacto de la robótica con la vida cotidiana. Aquí se encuentran la exposición de los robots realizados por la empresa Robótica para Niños, así como exposiciones sobre la educación de los infantes en una perspectiva tecnológica. Igualmente, se exhibe un robot que funciona con reconocimiento de voz.
Esta ciudad permite que lo cotidiano sea cambiado para hacer la vida más sencilla. El pedagogo de Robótica para Niños Rubén Cardona está seguro de que “esta generación puede cambiar el mundo, pensar por sí misma y salir de la trivialidad de las redes sociales para hacer algo más allá con lo que ofrece la tecnología”.
Crea City: trabajando juntos
Crea City es el espacio para que padres e hijos entren al mundo de la robótica; en esta sección se enseña y se asesora el paso a paso de cómo construir un robot.
Francisco Pedroza estudia ingeniería mecatrónica y es el encargado de asesorar y guiar esta actividad. Afirma que la curiosidad de los niños es lo que permite que se interesen tanto por la robótica “Estas ferias aportan muchísimo a la educación porque a veces en países como el nuestro no se abren espacios a los grandes avances de la ciencia y esta exposición nos permite hacerlo y llamar a los niños a que quieran en un futuro ser ingenieros, investigadores y demás, esto traerá más desarrollo para las futuras generaciones”.
Pioneros en robótica
Esta feria nació por una iniciativa construida por Ferney García y su esposa Sandra Ortegón, quienes son creadores desde el año 2016 de la empresa Robótica para Niños. Allí trabajan con menores de 5 a los 11 años de edad. Actualmente cuentan con una sede en el sur de Cali con capacidad para cien alumnos por clase. Dicen que esta exposición es una oportunidad para dar a conocer su empresa, pero también para mostrar lo que es capaz de hacer el Valle del Cauca.
“Estamos en la vanguardia en robótica y tecnología y la idea es seguir creciendo”, comenta el empresario Ferney García quien agrega que el uso de las nuevas tecnologías puede ser un motor para el progreso de Colombia.
Asimismo Angélica María Andrade, jefe de prensa de la Feria Ciudad Futuro asegura que “la idea es que la exhibición pueda recorrer el país, sin embargo, lo más cercano es llevarla a Bogotá y a Medellín y tenerla el próximo año en Cali, mejorando esta primera versión”.