Al suroriente de Colombia, en zona fronteriza con Venezuela y Brasil, se encuentra el departamento de Guainía, uno de los menos poblados del país y que posee una gran extensión de selva amazónica, así como una gran biodiversidad. Entre toda la riqueza de Guainía sobresalen los llamados Cerros de Mavecure, un conjunto de tres montañas atravesadas por el río Inírida, muy populares entre los turistas que prefieren internarse en zonas remotas y descubrir los prodigios de la naturaleza.

El cerro Pajarito, el más alto de los tres cerros de Mavicure. | Foto: Semana

Los tres cerros son lugares sagrados para las culturas indígenas que han habitado esta región por siglos. De hecho, la palabra “mavecure”, procede de la lengua indígena curripaco, un pueblo que vive en la base de los cerros, y significa “cerbatana y curare”, de acuerdo con Dessy Avaristo, indígena curripaco y académica, consultada por el portal Colombia Visible.

Cada cerro tiene un nombre, Pajarito de 712 metros de altura, Mono de 480, y Mavicure de 170, que hacen parte del Macizo Guayanés, una estructura geológica de millones de años que alteró la topografía del continente. Debido a que son los únicos en una gran extensión de selva, crean una vista hermosa e imponente sobre el paisaje.

A estas formaciones naturales se puede ascender caminando, siempre que se cuente con la guía y los elementos adecuados, por eso la recomendación es usar zapatos deportivos cómodos con buena adherencia, llevar impermeables, usar sombrero, bloqueador, y aprovisionarse de agua potable en gran cantidad, puesto que en esta zona selvática no se encuentran fuentes de agua tratadas para consumo humano.

Desde los Cerros de Mavecure se puede podrá admirar la belleza hidrográfica del Guainía. | Foto: Foto tomada de colombia.travel

La única forma de llegar a los Cerros de Mavecure es por vía fluvial, saliendo en lancha desde Puerto Inírida, la capital del departamento, y surcando el río Inírida por aproximadamente dos horas, hasta arribar a la reserva natural de los indígenas puninave, allí también están las poblaciones de El Venado o El Remanso, en cercanías de los cerros.

Cabe advertir que para ingresar a esta región, las personas deben estar vacunadas contra la fiebre amarilla, al menos con 10 días de anticipación. Para llegar a Puerto Inírida se pueden tomar vuelos desde Bogotá, que tardan una hora y media, pero deben programarse con tiempo, dado que las aerolíneas no salen a diario para esta parte del país.

El avistamiento de Toninas es uno de los muchos atractivos turísticos que tiene el departamento del Guainía. | Foto: WWF

Al llegar a la base de los cerros, los turistas pueden hospedarse en cabañas o incluso acampar, de otra forma deben regresar a Puerto Inírida donde hay más oferta de hotelería. De acuerdo con el medio citado, un viaje por cuatro días a los cerros, podría costar alrededor de 2 millones de pesos más los tiquetes.

Otro atractivo del lugar es la Estrella Fluvial del Sur, un punto del río Inírida donde sus corrientes confluyen con las de los ríos Atabapo y Guaviara, para luego desembocar juntas en el gran río Orinoco, uno de los más grandes del planeta. También, en el trayecto del río es común avistar aves, animales salvajes y algunas especies acuáticas como las toninas o delfines de río.