En el parque natural El Darién, cerca a la frontera de Colombia con Panamá, se encuentra un paraíso de playas soñadas y aguas cristalinas, se trata de Capurganá, una joya turística que muy pocos pueden visitar por lo lejana. Además, no muchos han escuchado de ella, pues hasta hace no mucho era un paraíso reservado para muy pocos.
Capurganá es un corregimiento del Municipio de Acandí, en Chocó que fue habitado por los indígenas Cuna y la naturaleza se muestra en su máximo esplendor. Es una playa custodiada por un bosque que parece impenetrable conocido como el tapón del Daríen rodeada de ricos ecosistemas de río, mar y selva. El clima es ideal para el descanso, pues varía entre los 22 y los 28 grados centígrados, sus playas son cristalinas y allí se puede practicar el surf, snorkeling o el buceo.
Para llegar se puede tomar un vuelo privado desde Medellín, en el aeropuerto Enrique Olaya Herrera, hasta el aeropuerto Narcisa Navas, el trayecto puede demorar cerca de una hora y se puede comprar con antelación en algunas agencias turísticas, su valor puede estar desde los 400 mil pesos. Así mismo se puede volar hasta Acandí, en un vuelo Santena, que puede estar entre los 170 y los 230 mil pesos, allí nuevamente habría que tomar lancha.
Hay una opción más económica, pero mucho más demorada, primero llegar al terminal de Medellín, tomar un bus, que cuesta entre los 95 mil y los 115 mil pesos para legar hasta Necoclí, de allí tomar una lancha que lo transporte hasta el último destino. El viaje hasta Necoclí toma 6 horas. La lancha en este lugar puede costar cerca de 170 mil pesos y solo salen entre las 8 y las 9 de la mañana. Además, la entrada a Capurganá vale 4700 pesos.
Algunos de los atractivos son Sapzurro, La Miel y Playa Soledad, que son lugares paradisiacos rodeados de vegetación, manglares y selva.