Entre cascadas, pueblos bonitos y una naturaleza extraordinaria, Noruega, conocida como la “Tierra de los Fiordos”, es un destino interesante por descubrir, con una rica historia vikinga y un enfoque en sostenibilidad que hoy en día juega a su favor en el sector turístico.
Este país escandinavo combina paisajes de ensueño con ciudades modernas, ofreciendo una experiencia única para quienes buscan explorar la naturaleza y la cultura en un ambiente lleno de armonía.
Si planea viajar a este país, a continuación encontrará una serie de recomendaciones sobre las mejores cosas por ver y hacer durante una visita de cinco días.
- Ver de cerca un glaciar: los glaciares con uno de los mayores atractivos de Noruega. Por esta razón, resulta ser un plan imperdible ver de cerca uno de éstos, destaca el portal Viviendo de Viaje, que además recomienda el glaciar Nigardsbreen.
- Apreciar sus majestuosos fiordos: este país tiene miles de fiordos, que geológicamente son valles en forma de U creados por la acción erosionadora de un glaciar. Éstos figuran entre las maravillas naturales más impresionantes del planeta, destacando el Fiordo de Geiranger y el Fiordo de Nærøy, declarados Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
- Visitar el Preikestolen: también conocido como El Púlpito, este enorme acantilado es uno de los puntos más populares de este destino, especialmente entre los amantes del trekking.
- Dejarse cautivar por la aurora boreal: visible en los meses de invierno, este espectáculo natural atrae a miles de visitantes al norte del país cada año, especialmente en las ciudades de Tromsø y Alta.
- Disfrutar del aire libre: en verano el mejor plan es vivir experiencias únicas practicando actividades como senderismo, kayak y ciclismo.
Además, Noruega cuenta con ciudades vibrantes para explorar como Oslo, su capital, que combina modernidad y tradiciones culturales, con museos dedicados al arte, la navegación y la historia vikinga.
Por otro lado, Bergen, con su pintoresco muelle de Bryggen, es un punto de partida ideal antes de apreciar los fiordos.