El juez 12 penal del circuito condenó este martes a los cuatro responsables del asesinato del fiscal Alcibiades Libreros Varela, ocurrido el pasado 29 de diciembre en Cali.
De acuerdo con la sentencia, los hombres deberán pagar una pena que ronda los 27 años de prisión.
El togado condenó a Álvaro Rubén Preciado Quiñónez y Édison Fajardo Angulo a 325 meses y 15 días de cárcel (27 años, 1 mes y 15 días) por los delitos de homicidio agravado; fabricación, tráfico y porte ilegal de armas con circunstancia de agravación y hurto calificado y agravado, a los cuales ya se habían allanado los hoy sentenciados.
La Fiscalía confirmó que Fajardo Angulo era el cabecilla de una banda de asaltantes de joyas, mientras que Preciado Quiñónez fue el hombre que transporto al sicario en una motocicleta.
Los otros dos implicados (Samuel Hernando Alvear Ramírez y Yojan Mauricio Salazar Martínez) recibieron penas de 323 meses de cárcel (26 años y 11 meses) por los mismos punibles. Cabe resaltar que Alvear Ramírez fue el hombre que disparó contra el fiscal, mientras Salazar Martínez fue el encargado de 'marcar' a la víctima.
La audiencia en la que se dictó la sentencia se llevó a cabo desde las 2:00 de la tarde. En ella hubo presencia de dos procuradores delegados, el abogado de víctimas, familiares del fiscal Libreros, medios de comunicación y delegados de las Naciones Unidas, organización que acompaña el proceso.
El fallo fue apelado por la Procuraduría, quien deberá sustentarlo por escrito dentro de los cinco días siguientes.
La investigación
Según la Fiscalía, los cuatro sentenciados integraban una red delincuencial que hurtaba joyas y elementos de valor en Cali. Con este propósito, asegura el ente, siguieron e interceptaron el vehículo en el que iba el fiscal Libreros, a quien le dispararon en medio del robo.
La Fiscalía indicó que durante el proceso presentó 35 videos obtenidos de cámaras de seguridad que permitieron conocer los roles de los homicidas y sus recorridos; así mismo, presentaron evidencias como reconocimientos morfológicos, entrevistas e interceptaciones telefónicas.
La familia de la víctima, sin embargo, ha reiterado en varias ocasiones que no se debe descartar del todo la hipótesis de que el homicidio estuvo vinculado a las investigaciones que el fiscal llevaba contra bandas criminales, una de las cuales podría haber contratado a la banda responsable del crimen, que no es necesariamente la autora intelectual.
“En las dos audiencias de imputación (llevadas a cabo en el Palacio de Justicia de Cali) se ha dicho que fue por robarle una cadena de oro, pero mi hermano no cargaba nada de eso, sino un escapulario de acero”, afirmó la hermana del fiscal, Carmenza Libreros.
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