La alcaldía de Cali decidió extender las medidas de pico y cédula y ley seca, que estaban vigentes hasta el jueves.
Así quedó determinado en el decreto 4112.010.20.0539, firmado por el alcalde Jorge Iván Ospina este 5 de agosto.
El pico y cédula mantendrá la rotación que tenía desde el 1 de agosto, esto es, los días pares las personas habilitadas serán quienes tengan documento de identidad terminado en dígito impar y viceversa, los días impares los ciudadanos con documentos terminados en números pares:
6 de agosto: 1, 3, 5, 7 y 9
7 de agosto: 2, 4, 6, 8 y 0
8 de agosto: 1, 3, 5, 7 y 9
9 de agosto: 2, 4, 6, 8 y 0
10 de agosto: 1, 3, 5, 7 y 9
Por su parte, la prohibición para el expendio y consumo de bebidas embriagantes en la ciudad, o ley seca, se mantendrá en el horario de 1:00 a.m. a 5:00 a.m., cada día.
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Excepciones se mantienen
El pico y cédula restringe el acceso a cualquier establecimiento comercial para adquisición y pago de bienes y servicios, así como el ingreso a entidades bancarias, financieras y notariales y las oficinas de atención al ciudadano.
En el decreto dado a conocer este viernes se mantienen las excepciones que se habían establecido en la norma anterior.
Así, la restricción no aplica para las personas que tengan el esquema completo de vacunación contra el covid-19 ni para el personal de salud.
Tampoco para quien sirva de apoyo a adultos mayores, personas en condición de discapacidad o enfermos con tratamientos especiales que requieren acompañamiento.
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Los trámites para pago ante la subdirección de impuestos, la subdirección de tesorería y los Calis, así como los servicios de tránsito, el consumo en restaurantes y bares y el ingreso a hoteles, servicios de hospedaje, establecimientos gastronómicos y gimnasios, también están exentos.
Cabe recordar que los establecimientos deben garantizar el distanciamiento físico de mínimo un metro de distancia entre las personas que se encuentren en el lugar y contar con un aforo máximo del 50 %.
Alerta naranja hospitalaria
La red hospitalaria, que se mantenía en alerta roja desde el mes pasado, pasará ahora a alerta naranja.
Lo anterior luego de que las cifras de contagios nuevos y ocupación de UCI en la región bajaran en los últimos días.
La declaración de alerta naranja busca "continuar mitigando el impacto del covid-19 en la red prestadora de servicios de salud y garantizar la prestación del servicio ante eventualidades de orden público que exijan capacidad de respuesta".