Por incumplimiento del contrato y por no cancelar salarios y prestaciones sociales a sus trabajadores y a los proveedores, la Secretaría de Infraestructura del Departamento sancionará a la empresa Construciviles Diseño y Consultoría, que tenía a cargo la construcción de la Alameda del Río Tuluá, cuyos trabajos dejaron abandonados.
Así lo anunció el titular de esa dependencia, Miguel Ángel Muñoz, al revelar que el contratista tiene dificultades financieras.
"El contratista, a pesar de que le falta el 8% para concluirla, hace dos meses viene insistiendo en que la va a terminar y no lo hace, pero ya iniciamos el proceso sancionatorio", indicó el funcionario.
La Alameda del Río Tuluá, con senderos peatonales, zona gastronómica, de descanso y vista al río, es una de las obras con las que comprometió la Gobernación del Valle con el municipio.
Precisamente, el alcalde de Tuluá, Gustavo Vélez Román le había hecho varias observaciones a lo que se ha construido hasta el momento.
"Realmente estoy muy preocupado por la calidad de los trabajos que se han hecho, podemos ver que el último tramo de pavimento que hicieron es de muy mala calidad, es defectuoso, incluso causaron algunos daños a lo que ya estaba hecho", manifestó el Mandatario local, quien agregó que "es una obra que no sabemos cuándo la van a terminar".
Por su parte, el personero de Tuluá, Rubén Darío Benítez Sierra, indicó que la obra se encuentra suspendida desde el pasado 25 de julio, desde hace cinco meses los trabajadores se encuentran sin afiliación al sistema de salud, no les pagan sus liquidaciones y les deben las primas y los sueldos desde hace dos meses.
"Esto no puede ser así, un contratista debe responder con su capital. Por esa razón cuando se accede a un proceso licitatorio se debe demostrar una solvencia económica para que pueda responder por la ejecución de la obra", manifestó el representante del Ministerio Público.
José Ómar Rojas es uno de los subcontratistas afectados por la empresa Construciviles Diseño y Consultoría pues le adeudan más de $200 millones, pues según él, era quien les suministraba la maquinaria y el material de construcción para ejecutar esa obra cuyo costo superó los $3812 millones.
Como esta persona, se encuentran otros subcontratistas y más de 20 trabajadores, entre ellos varios venezolanos, quien están a la espera de que les cancelen esos compromisos.
Lea además: Avanza modernización de los ascensores del edificio de la Gobernación del Valle