Tragedias como la de Mocoa o Corinto, causadas recientemente por cuenta de la temporada invernal, se pueden repetir en cualquier parte del Valle del Cauca; sin embargo, Pradera y Florida son dos poblaciones que tendrían mayor vulnerabilidad.

Así lo dio a conocer el secretario de Gestión de Riesgo Departamental, Jesús Antonio Copete, quien indicó que en este momento hay 18 municipios en el departamento afectados por las lluvias.

“No olvidemos que nosotros tuvimos el río Bolo que acabó con Pradera en el 94”, recordó Copete.

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Asimismo, reveló que hay dos “catástrofes anunciadas”, en El Águila y Bugalagrande, centro y norte del Valle del Cauca, que generan mayor preocupación.

¿Cuáles son los principales riesgos que enfrenta el Valle por la temporada de lluvias?

En cada municipio tenemos identificados los ríos, quebradas y acequias que nos pueden hacer algún daño, esto se ha hecho conocer a cada uno de los coordinadores municipales de gestión del riesgo, hemos recalcado que ante la comunidad se hagan los trabajos preventivos para evitar un manejo de un desastre, pero a veces la comunidad es muy terca, no colabora mucho...

Además de las crecientes súbitas, también hay riesgos por deslizamientos y tormentas eléctricas.

¿Por qué dice que la comunidad es terca?

Porque hay gente que se está bañando en el río y uno les advierte que cuando el color del agua esté cambiando o haya tormentas eléctricas abandonen esos sitios, pero no lo hacen, tampoco hacen caso en el tema de no dejar basuras que pueden taponar ríos y quebradas.

¿Cuáles son las zonas que más le preocupan frente a las emergencias por lluvias?

Todo lo que tenga que ver con el río Cauca, todos los municipios ribereños desde Jamundí hasta la terminación en el departamento de Risaralda, me preocupa el río Dagua que está en alerta, el río Anchicayá, me preocupa la situación de Cali con el río Cañaveralejo, el Lili, en estos estamos en alerta roja. Nos tiene muy preocupados el río Cañaveral en El Águila, es un río donde nos tienen anunciada una catástrofe hace ocho años y está por escrito, redactado por la CVC.

¿Qué pasa con el río Cañaveral?

Es un río que viene desde el departamento de Risaralda, tiene una pendiente muy complicada, hay unos barrios que están al pie de ese río, la CVC ha dicho que hay que reubicar a toda esa gente, infortunadamente no se ha hecho nada. El alcalde que está ahora está trabajando duro en el tema, ya comenzó a conseguir un lote para reubicar a las primeras familias, son como 130 familias, pero hay un problema y es que El Águila es muy pequeño y no hay dónde ubicar la gente.

¿Por qué ha habido negligencia con esa situación?

Lo que sucede es que el tema no es fácil. Se me estaba olvidando el río Bugalagrande, es otro dolor de cabeza que tiene las mismas características de Él Águila, y ahí la Gobernadora ya dijo que ponía una plata, la CVC también dijo que tenía una plata, lo que ocurre es que para poder hacer las obras de mitigación hay que sacar la gente y ese trabajito le corresponde al Alcalde.

¿Cuántas familias se verían afectadas en Bugalagrande y qué obras se deben hacer?

No tengo el dato concreto, pero son barrios. Se deben hacer muros y unos dispersadores de energía porque el río trae mucha corriente. Lo que podemos destacar es que el Alcalde ya está haciendo las gestiones para trasladar la gente, por este tema inclusive tenemos un incidente de desacato por no hacer las obras de mitigación.

Si llega a ocurrir una tragedia en estos sitios ¿quién responde?

Nosotros creemos que las administraciones (municipales), en este caso se está trabajando en buscar solución. Es algo complicado porque cuando se reubican familias no es solo trasladar la vivienda sino que también se debe involucrar el aspecto social.

¿En el Valle del Cauca se puede presentar una tragedia como la de Mocoa o Corinto?

En cualquier parte del Valle y de Colombia pueda pasar, por eso hay que estar trabajando en la reducción del riesgo, no olvidemos que nosotros tuvimos el río Bolo que acabó con Pradera en el año 94; hemos tenido problemas en los ríos Fraile y Desbaratado (Florida), el Guadalajara de Buga tiene su historia, el Cañaveral de El Águila, entonces sí tenemos ríos que nos puedan ocasionar esas tragedias, por eso estamos trabajando tanto el tema de descolmatación y la vigilancia para reducción del riesgo.

¿Cuáles son las zonas más vulnerables a una tragedia de esas dimensiones?

Nosotros estamos muy prevenidos con quebradas como La Honda (Cerrito), Culebras (Trujillo), el río Guadalajara (Buga), río Tuluá, río Anchicayá en Dagua, Fraile y Desbaratado en Florida, Bolo en Pradera, Amaime y Nima en Palmira, la Vieja en Cartago, y el Cañaveral.

Pero si uno se pregunta por algún sitio específico donde pudiera ocurrir una tragedia similar, ¿dónde estaría la amenaza?

Para mí lo más semejante a Mocoa aquí (en el Valle) es Pradera y Florida porque sus ríos van por toda la mitad del Municipio, están cerca a la montaña, el agua baja con toda la fuerza, entonces son los que tienen las condiciones más similares para causar una tragedia de tipo Mocoa o Corinto. Son ríos de alta pendiente como el río Cali, pero una cosa es la estructura de Cali, donde tenemos edificios, mientras que en estos municipios tenemos casitas de bareque todavía.

¿Qué ríos del Valle están bajo alertas en este momento?

Hay alertas en Trujillo, Florida, Cerrito, Bugalagrande, Andalucía, Yumbo, Jamundí, Dagua, Anchicayá, Calima y Cartago. Hay tres ríos de Cali que hay que ponerles mucho cuidado que son el Lili, Meléndez y y Cañaveralejo.

¿Por qué existe la alerta con los ríos de Cali?

Porque hacia el lado de la cordillera está lloviendo demasiado. Esos ríos se pueden desbordar, generar inundaciones a las viviendas cercanas a esos ríos y también deben tener mucho cuidado los bañistas, por las crecientes súbita.

¿Cómo están manejando el tema de alertas tempranas para prevenir?

Nos ponemos de acuerdo con los consejos municipales de gestión del riesgo sobre la necesidad de emplear una alerta temprana. Se instalan unos parlantes en postes, tenemos una aplicación que se coloca a máximo 250 celulares de personas de la comunidad y cuando alguien nota que el río está bajando amarillo o de otro color, o ven deslizamientos, o cualquier otro evento, activan la alarma y deben evacuar mientras llegan los organismos de socorro. Hoy tenemos trece alarmas instaladas y vamos a colocar otras diez.

¿Hasta el momento se ha activado alguna de esas alarmas?

En la quebrada La Honda (Cerrito) se utiliza permanentemente. Es una quebrada que queda al pie de una montaña y esta montaña se nos está desprendiendo porque hay una falla, es decir, ahí puede haber un riesgo de represamiento y posterior avalancha, fuera de eso el material colmata el recorrido de la quebrada.

¿Qué más están haciendo para prevenir y mitigar riesgos?

Estamos trabajando con maquinaria amarilla para descolmatar ríos, en este momento tenemos cuatro máquinas en Trujillo, estoy consiguiendo una para Calima – Darién y están trabajando dos en Ginebra. Adicionalmente, hemos iniciado una campaña fuerte este año, trabajando la reducción del riesgo, hemos capacitado a comunidades en 26 municipios y vamos a completar 100 escuelas enseñándole a los niños el cuidado que se debe tener ante un sismo, una inundación o una tormenta eléctrica.

¿Hasta el momento, cuál es el balance de afectados por el invierno?

Tenemos 18 municipios (Florida, Pradera, Cali, Guacarí, Ginebra, San Pedro, Trujillo, El Cerrito, Riofrio Bugalagrande, Tuluá, Buga, Dagua, Calima- Darién, Bolívar, El Águila, Restrepo y Cartago). Cartago está en alerta por aumento en los niveles del río Otún y Consotá qué son afluentes del río La Vieja.

¿Cuáles son los daños?

Dentro de las afectaciones tenemos inundaciones por desbordamiento de ríos, colapsos de alcantarillado, movimientos en masa y colmatación de ríos. Tenemos cerca de 3000 personas incomunicadas por derrumbes, en los distintos municipios.

¿Y cuántos son los afectados en Cali?

No contamos Cali, los reportes de Cali los da Zamorano (secretario de Gestión del Riesgo Municipal) y es un convenio que hay con él.

¿No se trabaja de manera conjunta?

Se trabaja de manera conjunta con el respeto debido. Cada consejo municipal de gestión del riesgo es autónomo, el Valle es un coordinador, no es el jefe, ellos responden por sus municipios, nosotros somos subsidiarios, por ejemplo, si a mí Zamorano me dice no tengo que darle a la gente yo entro a gestionar, pero ellos tienen que ser los primeros y el Departamento siempre está atento, afortunadamente Cali hasta el momento no nos ha solicitado ayudas.

Sobre sismos

¿Por qué está temblando tanto por estos días?

El promedio de temblores en el mundo son 280 diarios. Estamos localizados en una zona de alta sismicidad, tenemos la famosa falla Patía, pero no es que se estén presentando por las lluvias o esos tabús que se manejan.

¿Esos sismos puede representar algún riesgo frente al tema de lluvias?

En los deslizamientos, especialmente, porque se pueden dar movimientos en masa. Los que se han presentado en los últimos días (en Ginebra y El Cairo) no han causado daños.