Una fiesta electrónica en la que participaban unas 50 personas aproximadamente fue desactivada en una finca del corregimiento Potrerito, jurisdicción de Jamundí.
En el operativo que se realizó la noche del domingo, participaron funcionarios de la Alcaldía, en coordinación con la Policía, el Cuerpo de Bomberos y la Defensa Civil.
Indicaron que acudieron al lugar luego de varias denuncias de la ciudadanía y descubrieron que se estaban incumpliendo el toque de queda y la ley seca, medidas implementadas para contener el avance del coronavirus en esta fase de la pandemia.
Se incautó el equipo de sonido y el licor que estaba siendo comercializado en el evento.
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El teniente coronel (r)Jonathan Camargo, de la Secretaría de Gobierno, manifestó que "al inicio nos indicaron que era una reunión familiar, pero al ingresar nos dimos cuenta que era una fiesta comercial en la que se estaban infringiendo todas las medidas vigentes".
Vecinos del sector aseguran que el evento se estaba llevando a cabo desde hace dos días y que en varias ocasiones solicitaron a los organizadores que disminuyeran el volumen del sonido, sin que ellos atendieran los llamados de la comunidad.
Tanto el responsable de la fiesta como los asistentes deberán responder a las autoridades en Jamundí por incumplir el Código Nacional de Seguridad y Convivencia y se les aplicó la sanción de comparendo.