Para qué me quedo en la junta desde este ejercicio de la oposición, cuando ni siquiera tengo informes de lo que está pasando en la Asamblea, no tiene de verdad ningún sentido. En estas condiciones, creo que mi presencia en la mesa ni le sirve al Valle del Cauca, ni le sirve al ejercicio que estoy haciendo con tanta responsabilidad política”.
Así se expresó la diputada del Valle, Griselda Restrepo Gallego, respecto a su renuncia irrevocable al cargo de Vicepresidenta en la Asamblea del Valle del Cauca.
Como se recordará, Restrepo aspiró a la Gobernación en las pasadas elecciones, siendo la candidata con la segunda mayor votación. Luego, aceptó una curul en la Asamblea por el Estatuto de la Oposición.
En entrevista con El País, la diputada contó cuáles fueron las razones de su decisión, si mantendrá o no su curul pese a la renuncia y qué opina sobre el proceso de revocatoria de mandato que enfrenta la gobernadora Clara Luz Roldán.
¿Cuáles fueron las razones que la llevaron a renunciar a la Vicepresidencia de la Asamblea del Valle?
Son varias, la primera es que en el momento en que estábamos asumiendo el paro nacional en el Valle del Cauca, yo le pedí a la Asamblea y a su Presidente que nos permitiera abrir el debate para un encuentro con el Comité del Paro, con los jóvenes y con los empresarios, pues se estaba viviendo un gran drama en el departamento. Me negaron la posibilidad de que la Asamblea fuera un instrumento de diálogo en un momento en el que la región necesitaba de nuestro liderazgo.
Luego el presidente de la Asamblea se niega a darme el puesto que tenía del debate de control político, que había presentado, para hacer un debate sobre la crisis hospitalaria que tiene el Valle, él me quitó el derecho que me entregaba una ley de la República, amparándose en un concepto de un asesor del Consejo Nacional Electoral. Y eso fue la tapa, no quiero sentarme en una mesa con alguien que viola de esa manera los derechos de la otra orden en el Valle del Cauca, pero que además tiene la obligación de convocar a reuniones de mesa directiva cada mes; han pasado ocho meses y nos hemos reunido dos veces, tampoco llama a lista, a pesar de mi llamado permanente, de que incluyan el punto. Entonces, estar en una mesa para fijar resoluciones, no puede ser la agenda de una mujer que ha aportado con tanto compromiso.
Pero, ¿mantendrá su curul?
Creo que puedo seguir ejerciendo la oposición desde la curul de la Asamblea que me entregó la ley, esperemos que se pueda, pues me han negado el derecho a muchos debates de control político por falta de garantías de participación, cuando se debería permitir que el debate se pueda hacer, permitir que quien piensa y opina distinto o tenga una postura distinta, pueda hablar. Es muy limitado ese derecho en la Asamblea del Valle del Cauca.
Desde la Asamblea se dice que usted no se acogió al Estatuto de la oposición a tiempo y que por eso usted perdió algunos derechos...
No, eso es mentira. Presentamos a tiempo los documentos tanto en la Asamblea, como en el CNE. Que la Asamblea tenga desórdenes administrativos no es mi culpa. Me da un poco de tristeza también esto, porque no le veo ningún sentido, de corazón, que vengan a decir que yo no radiqué a tiempo, quien avaló mi derecho a la oposición fue el Polo Democrático, yo mandé al CNE mi carta y el documento donde el Polo Democrático avalaba mi derecho a la oposición y ambos se radicaron en el mes de enero.
¿El hecho de renunciar a la vicepresidencia no es entregar de alguna manera las armas ante una oficialidad muy fuerte?
No, es sentar un precedente. Si yo no tomo una decisión drástica como esta, el Valle del Cauca no oye la voz de la oposición.
Esto también es un hecho político para hacerme escuchar. Yo soy una mujer que ha desempeñado muy importantes dignidades en la agenda pública, tengo la responsabilidad de seguir siendo la voz de la oposición desde mi curul. Y yo creo que desde ahí, puedo hacer una labor extraordinaria, no sentada en una mesa, figurando, firmando resoluciones de felicitación y de duelo, cuando en el Valle del Cauca están pasando además de esas cosas que son importantes, otras mucho más relevantes, pero que en la mesa no se ven.
¿Como cuáles?
No he conocido un solo documento que llegue a la mesa indicando necesidades del empresariado del departamento, no he conocido cómo está el sector privado, que permanentemente envía comunicaciones a la Asamblea. A la mesa nunca llega nada porque el presidente tiene el argumento de que todo se lo mandaron a él para que él tenga conocimiento. El Plan de Desarrollo que presenté, un documento de cincuenta páginas, no fue registrado en casi ninguna parte, no tuvo ni siquiera una respuesta del Gobierno del Valle. También me han negado, en el momento en que el Valle está con tanta inseguridad, debates sobre la seguridad del departamento.
¿Considera que en la Asamblea se le ha hecho suficiente control político a la gobernadora Roldán?
Claro que no y yo lo he denunciado en la Asamblea en comunicados que he enviado. No ha habido control político, primero porque a la oposición no le aprueban una sola proposición de debate político. Y segundo, porque solamente se le ha reservado el derecho a una proporción enorme de los que están en su gobierno, los controles políticos se los hacen ellos a los secretarios en unos cuestionarios y en unos debates sosos, donde el funcionario va y hace una presentación y hay oportunidades que inclusive no han habido preguntas. Yo participo en todos los debates, los haya convocado o no. ‘No haga esa pregunta, no puede hacer esa pregunta’. Uno le hace la pregunta, y el funcionario determinará si tiene la respuesta o no, pero no dejan terminar la pregunta, no puedo hablar. Este ejercicio ha sido verdaderamente triste, es una gestión sombría que deja muchos sinsabores a un departamento que tiene tantas preguntas.
¿A qué debates no se les ha dado lugar en la mesa de la Asamblea?
Por ejemplo en la pandemia se perdieron unas vacunas, ¿hubo oportunidad para hacer un debate de eso? ¿Hubo oportunidad para preguntar qué pasó con esas personas que fueron vacunadas sin haberlas tocado? ¿Qué pasó con esas investigaciones? No pasó nada.
Salió a la luz pública que está avanzando un proceso de revocatoria contra la Gobernadora Roldán, ¿cree que se debería revocar su mandato?
Tengo diferencias sustanciales con el Gobierno del Valle del Cauca, en cómo gobiernan, cómo distribuyen y direccionan los recursos, pero no estoy de acuerdo con la revocatoria. El país no está en condiciones de gastarse ni en el Alcalde de Cali, ni en el Alcalde de Palmira, ni en la Gobernadora del Valle, semejante monto de recursos para hacer una revocatoria cuando ellos ya están llegando a la mitad del período. Yo más bien invito a la región a que acompañe un ejercicio legal y democrático de oposición seria y que las investigaciones entre los organismos de control cumplan las expectativas.