Por Valentina Moreno Rosero, subeditora de Medios Sociales de El País
Hacia las 8:00 de la mañana del pasado lunes 16 de octubre, y bajo un sol incandescente, en el mar de Buenaventura se empezó a sentir la presencia de una insignia nacional que enorgullece no solo a los militares que viajan a bordo de él, sino a los colombianos que han podido conocerlo.
Se trata del buque escuela ARC Gloria, el barco insignia de la Armada Nacional de Colombia, que en su segundo crucero de cadetes de este 2023, y después de 24 años, volvió a una de las terminales marítimas más importantes del país, el Puerto de Buenaventura.
La histórica visita, que se celebró con bombos y platillos, fue un sueño cumplido para los 155 miembros de la tripulación que llegaron a bordo del emblemático barco.
“Recibirlo es muy importante, tal vez para una capitanía de Cartagena, Barranquilla y Santa Marta que están acostumbrados a recibir el barco es distinto, pero para nosotros después de 24 años es un honor, es demostrarle a Colombia y el Mundo que Buenaventura es un puerto seguro e idóneo para recibir al buque”, indicó el capitán de Fragata Alberto Buelvas, capitán de puerto de Buenaventura de la Dimar, Dirección General Marítima.
Cadetes, alféreces y guardiamarinas de la Escuela Naval de Cadetes ‘Almirante Padilla’ y Max, un pastor belga que acompaña la misión, son los tripulantes que hacia las 9 de la mañana y en alta mar, empezaron a formarse en sus posiciones correspondientes para realizar las maniobras de atraque que iban a llevar a cabo una vez estuvieran en inmediaciones de la Sociedad Portuaria de Buenaventura, es decir, el lugar en el que se cumpliría el sueño de tener al buque de vuelta en el puerto del Pacífico colombiano.
Luego de que transcurrieron largos minutos mientras los cadetes se ponían en posición junto a las velas y de que dos pequeñas embarcaciones se unieran para realizar el acompañamiento del barco al muelle, a las 10:30 de la mañana el buque ARC Gloria, el embajador flotante de Colombia en el mundo, hizo su tan esperado y anunciado arribo al puerto de Buenaventura.
“Se tardó en volver 24 años por la dificultad de tratar de coordinar los cruceros, cada año se reciben invitaciones con las que se planean los destinos que tendrá el buque, pero tratar de coincidir los sitios es complicado porque no solo es tener la invitación y las ganas”, explicó el contralmirante Carlos Serrano, Comandante de la Fuerza Naval del Pacífico.
El recibimiento, digno de una símbolo patrio, fue por lo alto junto a la banda musical de la Armada Nacional y los infinitos aplausos de los altos mandos de la Institución, de la sociedad civil que esperaba con ansias la llegada del buque, así como de todos los familiares y amigos de la tripulación que viajaron desde diferentes zonas del país para acompañar el histórico regreso del ‘Gloria’.
Una vez atracó en el muelle, el orgullo y la felicidad de los tripulantes del buque era evidente, se notaba no solo en las sonrisas y abrazos eufóricos que intercambiaban entre ellos, sino en las palabras de felicitación de sus altos mandos, de aquellos que tuvieron el privilegio de ser los encargados de lograr que una misión del buque llegara de nuevo al puerto del Pacífico.
“Es un orgullo poder, nuevamente, estar en Buenaventura y en esta hermosa unidad trayéndolo luego de años de ausencia a este bello puerto de mar. Para los alumnos es una satisfacción enorme del deber cumplido, ellos se preparan y esperan tres años para que llegue el anhelado día en que puedan pisar esas cubiertas”, dijo el teniente de Navío Javier Cabezas, jefe de embarque del buque escuela ARC Gloria.
Estando todos en muelle, el paso a seguir dejó en evidencia la disciplina y rigor característico de la Armada Nacional. Cada uno de los tripulantes se formó en su posición correspondiente para dar paso a que el capitán de Navío Gustavo Gutiérrez, comandante del buque ARC Gloria, presentara oficialmente la embarcación a los asistentes, quienes tuvieron el honor, que pocos colombianos han tenido, de recorrer todos los rincones del barco y conocer cuál es la labor que los cadetes cumplen cuando viajan en este.
“Durante su navegación los cadetes ven clases, a bordo van profesores e instructores. La maniobra es una de las clases que ven y lo que se hace es aprovechar el mar y el buque para que cada uno reciba el entrenamiento que le hace falta para que, al final del viaje, tengan madurez, criterio y experiencia en el mar”, detalló el Comandante.
Y agregó que “todos los alumnos suben por alto, hacen maniobras de izado de velas, navegación astronómica y electrónica, control de averías y emergencias que se presentan en el mar. No tienen tiempo libre”.
El privilegio de estar el ‘Gloria’ y de conocer cómo viven sus tripulantes durante las largas travesías que este realiza, lo tuvieron cerca de once mil bonaverenses que visitaron el buque durante los tres días que este estuvo en el Puerto, días que estuvieron cargados de cultura, música y gastronomía en honor a la embarcación que en este 2023 ha viajado por el mundo conmemorando el bicentenario de la Armada Nacional.
“El ARC Gloria es expresión de nuestra cultura, a bordo va una representación de lo mejor del país, en él se forman los mejores marinos; es el embajador flotante porque llevamos un mensaje de paz, hermandad y buena voluntad a todas partes donde tiene la oportunidad de recalar”, dijo el Comandante del buque.
Detalles del viaje
Dentro de la tripulación del buque hay oficiales invitados del Ejército Nacional, la Fuerza Aeroespacial Colombiana, la Policía Nacional y tres oficiales extranjeros de las Armadas de Argentina, España y México.
El segundo crucero de entrenamiento de 2023 tuvo a Buenaventura como el primer puerto de destino y continuará su rumbo hacia El Callao - Perú, Valparaíso - Chile, Guayaquil - Ecuador y Balboa - Panamá.
El buque de formación de cadetes navegará más de 6.300 millas náuticas durante 73 días de recorrido.