"Es una distinción que llena de orgullo a todas las personas vinculadas al Grupo Tecnoquímicas. La he querido recibir en nombre de las empresas que, como nosotros, hemos seguido invirtiendo, ensanchándonos, incrementando el empleo y apostándole al futuro, en medio de las complejidades de nuestro país".

Así se refirió Francisco Barberi Ospina al reconocimiento que le hizo la Asociación Nacional de Industriales, Andi, este viernes, al entregarle la Orden al Mérito Empresarial.

Y si de méritos se trata, a Tecnoquímicas, la empresa que preside Barberi, estos le sobran: genera 7600 empleos de trabajo, no dejó de trabajar un día durante la pandemia; no solo no recortó su planta de empleados, sino que la amplió y es, de lejos, el primer laboratorio farmacéutico del país, que produce más de 800 referencias en ese campo.

En entrevista con El País, Barberi Ospina dice que Colombia debe producir sus propios biológicos para garantizar su autonomía sanitaria, se muestra confiado en el futuro de la economía nacional y dice que el Valle debe consolidar los procesos de unión que se han ido tejiendo.

¿Qué representa para usted y para Tecnoquímicas el reconocimiento que le hacen los industriales colombianos a través de la Andi, al entregarle la Orden al Mérito Empresarial?

​Es una distinción que llena de orgullo a todas las personas vinculadas al Grupo Tecnoquímicas. La he querido recibir en nombre de las empresas que, como nosotros, hemos seguido invirtiendo, ensanchándonos, incrementando el empleo y apostándole al futuro, en medio de las complejidades de nuestro país, e incluso a pesar de los retos de la pandemia y del pasado paro nacional.

¿Cuál es la cualidad de Tecnoquímicas que usted más destaca?

El compromiso de nuestro equipo humano con el bienestar de las comunidades y el desarrollo del país. Esa razón de ser está presente en nuestras estrategias de crecimiento, que impulsamos con una cultura corporativa enmarcada en la responsabilidad total, la transparencia y tenacidad.

¿En cuántos países hace presencia hoy la empresa, cuántos empleados tiene y cuántos productos produce?

Tenemos operación propia, además de Colombia, en Ecuador, Guatemala, Honduras, Panamá, Nicaragua, República Dominicana, Costa Rica y El Salvador. El Grupo genera 7600 puestos de trabajo, 6700 de ellos en Colombia.

Nuestras exportaciones llegan a cerca de 20 países de las Américas. Contamos con 8 plantas en Colombia y 3 en El Salvador. Fabricamos alrededor de 840 especialidades farmacéuticas, además de apósitos (curas y esparadrapos), líneas de aseo personal, pañales de bebé y de adultos, y 60 productos veterinarios y agrícolas.

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Hablemos un poco de la historia de esta empresa y del papel inicial que jugó su padre, Francisco Barberi Zamorano, en esa creación.

Tecnoquímicas comenzó hace 86 años como distribuidora de productos farmacéuticos. Mi papá, Francisco Barberi Zamorano, llegó a la compañía en 1941 a la edad de 20 años, y durante cinco décadas impulsó, con visión, a la empresa en sus distintos negocios comerciales e industriales.

En 1951 abrimos la primera planta de producción farmacéutica en Cali. Fuimos por varios años productores y comercializadores de medicamentos de laboratorios extranjeros.

A partir de la apertura de 1991 realizamos esfuerzos muy grandes para reemplazar las marcas extranjeras por propias. Adquirimos la marca MK, y la desarrollamos con los genéricos de calidad y confiabilidad total que son líderes en el mercado. También fortalecimos nuestra presencia en medicamentos de venta libre.

Nuestra internacionalización comenzó en Ecuador y se fortaleció en 2009 con la adquisición de un laboratorio en El Salvador.Posteriormente adquirimos la marca MK para Centroamérica, el Caribe y otros países de Suramérica.  

En pañales incursionamos en los años 80, y en 1996, cuando instalamos máquinas de tercera generación, nuestro crecimiento se multiplicó. Con calidad, innovación y competitividad.

¿Cuál ha sido el secreto de Tecnoquímicas para convertirse en el primer laboratorio farmacéutico del país?

No hay secretos. Nuestros resultados son el fruto de un talento humano comprometido, calificado, que ha sido capaz de interpretar y atender las expectativas de los consumidores en un mundo cambiante y cada vez más exigente. Es una empresa que tiene al consumidor en el centro de todas sus acciones. Lo anterior también nos ha permitido ser el más grande productor de pañales del país.

¿Cree que en Colombia se debería desarrollar una vacuna contra el Covid? ¿A Tecnoquímicas le interesaría medirse a ese proceso?

Estamos viviendo las consecuencias de varias décadas de ausencia de una política industrial farmacéutica y el impacto de marcos regulatorios y tributarios que han frenado la competitividad de la producción nacional. El país produjo vacunas en el pasado; sin embargo, esa capacidad se perdió. La pandemia ha puesto en evidencia la urgencia de tener una seguridad sanitaria, y por eso los distintos países buscan reducir su vulnerabilidad fortaleciendo la producción farmacéutica para tener más independencia en este campo.

En este contexto, Colombia debe afianzar las capacidades productivas e incursionar en la producción de biológicos, incluidas las vacunas que hoy son muy distintas a las del pasado y requieren además nuevos desarrollos biotecnológicos. Para esto se necesita una política de Estado que incluya al sector privado y, muy importante, a la academia.

A los jóvenes tenemos que oírlos, y ellos también deben escuchar lo que el resto del país espera. Debemos tener la capacidad de escuchar, respetar y construir de forma colectiva”

Precisamente, Cali ha sido la capital del país que ha presentado menor letalidad por Covid. ¿A qué atribuye usted este logro?

En la región existe un clúster de salud que incluye las clínicas de primer nivel reconocidas en el escalafón latinoamericano, la excelencia de las facultades de medicina, de los profesionales de la salud que han pasado por ellas, y las plantas farmacéuticas. Son elementos que contribuyen a tener un escenario admirable para sortear esta terrible enfermedad.

¿Qué lecciones le ha dejado la pandemia a la industria y a la economía nacional?

La pandemia ha enseñado que las crisis exigen tomar decisiones con racionalidad, datos, hechos científicos y sin subjetividad; y que los retos colectivos exigen compromisos ciudadanos de los distintos sectores.

También nos mostró que la calidad en los sistemas de salud es vital para el bienestar y para el sistema económico; por eso el clúster de salud en Cali ayudó a una mejor respuesta.

También aprendimos que para responder a retos sociales, no se puede detener el aparato productivo ni abandonar la generación de empleo, que son la base para detener los efectos de la pandemia y asegurar la reactivación con equidad.

¿Qué mensaje les transmite a los empresarios y a qué le deben apostar en los siguientes meses?

Los empresarios debemos mantener la confianza en el país y en el futuro. Debemos apostarle a fortalecer la educación, pues este es el camino eficaz para transformar las economías y las sociedades.

Les diría que deben continuar con sus ensanches, sus inversiones en Colombia y la creación de empleo. En Tecnoquímicas hemos tenido este compromiso y visión desde el comienzo de la pandemia; no dejamos de trabajar ni un solo día, prioritariamente de forma presencial con la bioseguridad requerida.

¿Cómo van los planes de expansión de la empresa?

Seguimos adelante en nuestro plan de expansión 2019-2022 que incluye inversiones por 200 millones de dólares en ampliaciones y fortalecimiento tecnológico en plantas farmacéuticas y de pañales, de los que llevamos invertidos más de la mitad.

En noviembre esperamos la visita del INVIMA para la aprobación de la planta y en los siguientes 15 meses iremos abriendo los nuevos ensanches.

Nuestro plan contempla crear 1.000 nuevos empleos, de los cuales ya hemos generado 380, en los últimos 18 meses. Adicionales a los que se crearon con terceros en la construcción e instalación de equipos.

"Debemos afianzar el trabajo y el diálogo colectivo, donde se prioricen los objetivos regionales de desarrollo, por encima de fines particulares”

¿Por qué, tras tantos años al frente de Tecnoquímicas, continúa asistiendo a los comités de ventas de la empresa?

No solo yo. Todos los responsables de la cadena de valor de la compañía estamos involucrados en la misión corporativa, y participamos en los distintos comités estratégicos para nuestra operación.

Durante crisis como la reciente, se vuelve doblemente importante hacer seguimiento a los resultados, día a día.

Hablemos un poco de la economía nacional. ¿Cómo ve su futuro inmediato y de largo plazo?

Tengo confianza en que continuaremos en la ruta de la reactivación. Si los empresarios tenemos la disposición para seguir invirtiendo y apoyando las iniciativas que promuevan la recuperación y la equidad, estoy seguro de que vamos a lograr unos crecimientos incluso superiores a las cifras que han venido publicándose. Nuestros legisladores y gobernantes deben seguir apoyando esta reactivación evitando propuestas que impongan barreras al empleo, la inversión y la competitividad del país.

¿Y cómo ve la economía de Cali y del Valle del Cauca?

Somos una región con un panorama complejo. Por un lado, tenemos una economía más diversificada que otras regiones del país que son puramente minero-energéticas, y esto ofrece oportunidades para crecer en la medida en que se reactivan los distintos sectores agrícolas e industriales.

Pero tenemos alta informalidad, alto nivel de desempleo y altos niveles de pobreza. El futuro va a depender de que seamos capaces de darle solución en el mediano plazo a estos temas.

¿Qué cree que se debe hacer para mejorar esas perspectivas?

Lo primero es fortalecer la educación no solo en cobertura sino en calidad. Este es el elemento que transforma sociedades. Y es factor fundamental para reducir inequidad, y fortalecer la competitividad, el empleo, el emprendimiento y la innovación.

Además de fortalecer los niveles de preescolar, básica y media, tenemos que reforzar el acceso de los jóvenes a educación superior de alta calidad, tanto en universidades de manejo estatal como de administración privada.

Así mismo, debemos construir más sintonía entre los sectores productivos y la academia, para asegurar que el nuevo talento humano responde a las necesidades del desarrollo y la economía en un mundo cada vez más exigente.

Deberíamos convertirnos en una región con múltiples clústeres potentes, que vayan desde la academia hasta las empresas. Por ejemplo, en sectores agroindustriales y de alimentos procesados; en tecnologías de información y comunicaciones; en diseño, moda y confección; y en economías creativas y culturales, entre otros.

¿Cree que los vallecaucanos, obligados por las circunstancias por fin están aprendiendo a trabajar en equipo?

Estamos aprendiendo. El trabajo en equipo funciona muy bien al interior de las empresas, pero nos falta avanzar en este tipo de visión dentro del contexto regional. Debemos afianzar el trabajo y el diálogo colectivo, donde se prioricen los objetivos regionales de desarrollo, por encima de fines particulares.

El Presidente Duque ha sido un trabajador incansable, que ha mantenido su lucha por la legalidad, que ha priorizado la búsqueda de equidad, la promoción de emprender”.

¿Qué tanto influye para bien y para mal en la situación de la economía el alza del dólar?

Como en toda economía abierta, habrá sectores que se ven beneficiados y otros que pierden. Como un todo, mientras Colombia siga teniendo una economía altamente dependiente de sectores extractivos y no se fortalezca la diversificación de sus sectores, con industrias de mayor valor agregado e innovación, seguiremos expuestos a los efectos de la volatilidad en el valor de las divisas.

Nosotros particularmente tomamos la decisión de presupuestar un dólar para el segundo semestre, en promedio de $3.800. Algunos creen que el valor al final del año, será superior, y otros lo ven inferior.

¿Y qué hacer para morigerar la insatisfacción social que reina sobre todo entre los jóvenes?

A los jóvenes tenemos que oírlos, y ellos también deben escuchar lo que el resto del país espera. Debemos tener la capacidad de escuchar, respetar y construir colectivamente.

Usted le ha apostado a apoyar la educación superior. ¿Cómo hacer para facilitar el acceso de más jóvenes a las universidades?

La oferta académica, garantizada por el Estado, debe incluir a todo tipo de universidades, tanto las de administración estatal como no estatal. El país debe dejar de lado las dicotomías, y reconocer que las universidades son todas públicas, porque conforme a la ley, su servicio es público, su actividad no tiene ánimo de lucro, y su administración autónoma tiene un control estatal.

En las universidades públicas de administración privada, ningún particular, donante o fundador es dueño del patrimonio ni de los excedentes de las universidades, sus recursos son de utilidad común y deben destinarse a la educación.

Cuando se ignora esta realidad, se tiende a priorizar el acceso a la universidad de manejo estatal, y se desaprovecha un activo social que está disponible en los cupos de universidades de gestión privada y alta calidad. Y que podría beneficiar a jóvenes de familias de bajo ingreso.

Cabe anotar que en promedio un estudiante en una universidad de administración estatal de alta calidad cuesta lo mismo o más que en una de gestión privada.

¿Cómo califica al gobierno de Iván Duque?

Ha sido un Gobierno enfocado a resultados, que ha tenido que enfrentar un momento complejo para toda la Humanidad. El Presidente Duque ha sido un trabajador incansable, que ha mantenido su lucha por la legalidad, que ha priorizado la búsqueda de equidad, la promoción del emprendimiento, y una visión responsable en lo ambiental que marcará el desarrollo sostenible de Colombia en las próximas décadas.

¿Cuál considera que es la mayor amenaza que enfrenta hoy el país?

Hay dos amenazas claras: por una parte, la inequidad y la pobreza reflejadas en brechas sociales y económicas que afectan a la población; y por otra, la inseguridad y los riesgos que generan las economías ilícitas y criminales que persisten en el país. Todos debemos trabajar para contrarrestar estas amenazas.

“Debemos construir más sintonía entre los sectores productivos y la academia, para asegurar que el nuevo talento humano responde a las necesidades del desarrollo y la economía en un mundo
cada vez más exigente”.

Al margen de su pasión por su trabajo, un pajarito me contó que otra de sus pasiones es la cocina. Cuénteme qué significa la cocina para usted. ¿Por qué le gusta tanto?

Yo creo que la cocina es una forma de expresión artística. Tiene casi todo lo que se hace cuando se diseña una estrategia o se compone una obra.

El secreto consiste en combinar los distintos elementos con los diversos sabores y producir una combinación armónica que genere una sensación placentera, como quien escribe una pieza musical o pinta un cuadro.

Un plato es un conjunto de ingredientes que armonizan. Igual que una buena estrategia. En este sentido, son muy similares.

Usted nunca repite la elaboración de un plato. ¿Por qué?

Un nuevo plato yo lo repito y repito hasta que quedo satisfecho con el resultado. Una vez diseñado, ya no lo repito, pero se vuelve parte del menú que sirven en el comedor.

Usted tuvo una relación muy especial con su papá. Que él fue una persona muy importante en su vida. ¿Cuál fue el mayor aprendizaje que usted adquirió de él?

El mayor aprendizaje que adquirí de mi papá es la importancia del detalle.

Ser amante del detalle. Me enseñó que hay que ir más allá de lo aparente, él hacia todas las operaciones en la cabeza y encontraba en el detalle cosas que los demás no habíamos visto en el conjunto.