Con más de 120 cámaras para el reconocimiento facial, de placas y de vigilancia, alarmas comunitarias y botones de pánico, el Distrito Especial de Buenaventura y Jamundí reforzarán la seguridad con el proyecto ‘Zonas Seguras’, iniciativa de la Gobernación del Valle del Cauca que logró la cofinanciación del Ministerio del Interior para hacer realidad el fortalecimiento de la seguridad con tecnología de punta.

Jamundi se convertirá en una Zona Segura para recuperar nuevamente la tranquilidad y la seguridad en este municipio del Valle. | Foto: Alcaldía de Turismo Valle del Cauca

Agregó que “cada uno de estos convenios abarca más de 120 cámaras, entre reconocimiento facial, reconocimiento de placas, analítica de comportamiento y, por supuesto, videovigilancia. Adicionalmente, incluyen botones de pánico y alarmas comunitarias”.

Además de los refuerzos policiales para la región, también se implementarán estrategias con apoyo de tecnología de punta para combatir los atentados y ola ola delincuencial en Jamundí y Buenaventura. | Foto: Cortesía Policía Nacional

Este proyecto impactará en cada uno de estos municipios alrededor de 45 manzanas, donde hay 900 establecimientos de comercio y viviendas que recibirán los beneficios de la intervención con estas Zonas Segurad.

Sanclemente precisó que con este proyecto “estamos logrando la financiación con el Ministerio del Interior a través del Fondo de Seguridad Nacional que es el Fonsecon y la Gobernación del Valle está cofinanciando a estos dos municipios para lograr mejorar las capacidades y la atención en seguridad”.

En el Distrito de Buenaventura también se instalarán cámaras de reconocimiento facial y analítica de comportamiento para frenar los delitos de alto impacto como la extorsión y el hurto. | Foto: 2015 Kaveh Kazemi

En Buenaventura, si bien ha bajado el índice de homicidios, aún persisten delitos como la extorsión y el hurto que hacen necesaria la ubicación estratégica de estos equipos de videovigilancia para contrarrestar estos fenómenos delincuenciales que afectan no solo al sector comercio, sino a la ciudadanía en general del principal puerto sobre el Pacífico colombiano.