Manejar un vehículo es un acto de gran responsabilidad. Por ello, los Centros de Enseñanza Automovilística, CEA, a través de los cursos de conducción, imparten formación en competencias teóricas y prácticas para que los futuros conductores no pongan en riesgo su vida ni la de terceros. De acuerdo con el Ministerio de Transporte, en el país existen más de 400 centros de enseñanza, de los cuales 100 están habilitados en Cali en jornadas diurna, nocturna o sabatina.

Los instructores de estas escuelas, tal como lo explica María Elena Restrepo, auxiliar administrativa del Centro de Enseñanza Automovilística La Gran Colombia, en Cali, “son bachilleres certificados y profesionales avalados como instructores de conducción por instituciones como el Sena; son conocedores de las normas de tránsito y están familiarizados con los contenidos que se transmiten en el programa”.

Los precios y duración de los cursos varían de acuerdo con el tipo de licencia que se necesita. Por eso, Pedro Nel Alarcón, gerente del Centro de Enseñanza Automovilística Autoaprendizaje, en Bogotá, recomienda que quien esté en el proceso de iniciar un curso de conducción se pregunte qué tipo de categoría requiere.

Igualmente, deben inscribirse en el Registro Único Nacional de Tránsito, Runt, presentar la evaluación psicosensométrica, que es un conjunto de exámenes que mide la aptitud física, mental y de coordinación motriz.

En caso que la persona requiera la renovación de su licencia, no será necesario realizar nuevamente el curso, pero sí presentarse y aprobar la evaluación psicosensométrica.

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Cómo se desarrolla el curso

La primera parte de un curso de conducción consiste en un número de horas teóricas, que varía según el tipo de licencia.

Posteriormente, se procede a realizar un examen teórico. “Los inscritos responden en una hora 40 preguntas seleccionadas aleatoriamente sobre lo que se aprendió en la clase teórica. Después, en la práctica, se profundizan los conocimientos desde la experiencia individual de cada estudiante”, dice Luis Rafael Victoria, gerente del CEA Victoria, en Cali.

Entre los temas evaluados están técnicas de conducción, normas de tránsito, adaptación al medio y marco legal.

Si se pierde el examen teórico, algunos Centros de Enseñanza otorgan una segunda oportunidad. De lo contrario, se debe volver a pagar y hacer el curso en su totalidad. Una vez aprobada la parte teórica y práctica, los CEA reportan la información al Runt para la expedición de la licencia.

Para mayor control

Como lo confirma la vocera del CEA La Gran Colombia, hasta finales del 2017, algunos Centros de Enseñanza Automovilística en el país otorgaban licencias de conducción, sin que la persona cumpliera con la formación necesaria.

Debido a esta situación, la Superintendencia de Puertos y Transportes, entidad encargada de regular el trabajo de los CEA, presentó e implementó a partir de diciembre del mismo año el Sistema de Control y Vigilancia, Sicov.

El objetivo es que desde el Ministerio de Transporte se pueda tener mayor control sobre la legitimidad de las licencias de conducción expedidas en el territorio nacional.

Martha Liliana Gutiérrez, directora administrativa del Centro de Enseñanza Automovilística J.C, en Cali, considera que la implementación del Sicov y de plataformas como Olimpia y Ci2, asignadas directamente por la Superintendencia de Puertos y Transportes, ha mejorado la calidad del servicio. “Ahora, al iniciar y culminar una clase teórica o práctica, además de acoger los protocolos de bioseguridad, los estudiantes e instructores deben pasar un control biométrico, que permite conocer en tiempo real si existe alguna suplantación, ya que se trabaja coordinadamente con bases de datos de la Registraduría Nacional del Estado Civil”, comenta Gutiérrez.

Luis Rafael Victoria, gerente del CEA Victoria, en la capital del Valle, por su parte, asegura que el Sistema de Control y Vigilancia permite también garantizar que los estudiantes reciban todas sus clases teóricas y estén capacitados para que obtengan, como mínimo, el 90 % de calificación en el examen teórico, que permite proseguir con las horas prácticas del curso.

El carro de enseñanza

Todo vehículo empleado para enseñar debe tener por norma las siguientes características:
- Color blanco.
- Doble juego de espejos internos y externos.
- Bocinas para el instructor y el aprendiz.
- Doble pedal de frenos y embrague.
- Distintivo externo con la palabra Enseñanza, con cinta o papel reflectivo de color verde, el cual debe estar adelante, atrás y en los costados.  Logos y teléfonos del centro de Enseñanza Automovilística respectivo.
-Las motocicletas, además de lo anterior, deben llevar un banderín.

Categorías

Para carros

Particulares: con vigencia de 10 años para menores de 60 años, de 5 años para los de entre 60 y 80 y de 1 año para mayores de 80.
B1. Para automóviles y camionetas.
B2. Para camiones rígidos mayores a 3.4 toneladas.
B3. Para articulados.

Públicos: tiene vigencia de 3 años para menores de 60 años y de 1 año para mayores de 60.
C1. Para automóviles y camionetas públicos y vehículos particulares.
C2. Para camiones rígidos desde 3.4 toneladas.
C3. Para articulados de servicio público.

Motocicletas
A1. Hasta 125 c.c.
A2. Cualquier cilindraje.