Estos son los tratamientos estéticos que podría hacerse una mujer luego de cumplir los 50 años

Envejecer es un proceso natural que trae consigo cambios visibles en la piel y el cuerpo. A partir de los 50 años, muchas mujeres notan que su piel comienza a perder firmeza, aparecen más arrugas, y los signos de envejecimiento se vuelven más evidentes.

Sin embargo, la ciencia y la tecnología en la medicina estética han avanzado notablemente, ofreciendo una variedad de tratamientos que pueden ayudar a mitigar estos efectos, permitiendo que las mujeres se sientan y se vean lo mejor posible en esta nueva etapa de sus vidas.

A medida que se envejece, la producción de colágeno y elastina en la piel disminuye, lo que provoca la aparición de arrugas y la pérdida de firmeza. Para contrarrestar estos efectos, los tratamientos faciales no invasivos se han vuelto extremadamente populares. Entre ellos, el rejuvenecimiento con láser fraccionado y la terapia de luz pulsada intensa (IPL) destacan como opciones efectivas. Estos procedimientos ayudan a mejorar la textura de la piel, reducir las manchas de la edad y estimular la producción de colágeno, otorgando un aspecto más joven y saludable.

Otra opción popular es la aplicación de ácido hialurónico y toxina botulínica, comúnmente conocida como bótox. Mientras que el ácido hialurónico se utiliza para rellenar líneas finas y restaurar el volumen perdido en áreas como las mejillas y los labios, el bótox es ideal para suavizar arrugas profundas en la frente, el entrecejo y alrededor de los ojos. Estos tratamientos son mínimamente invasivos, no requieren tiempo de inactividad y ofrecen resultados visibles de inmediato.

El área alrededor de los ojos es una de las primeras en mostrar signos de envejecimiento. Con el tiempo, la piel de los párpados se vuelve más delgada, y pueden aparecer bolsas y ojeras, dando una apariencia de cansancio constante.

Para tratar esta zona delicada, la blefaroplastia, o cirugía de párpados, es una opción que puede marcar una gran diferencia. Este procedimiento quirúrgico elimina el exceso de piel y grasa de los párpados superiores e inferiores, lo que ayuda a rejuvenecer la mirada y dar un aspecto más descansado.

Para quienes buscan opciones menos invasivas, los tratamientos con láser y la radiofrecuencia fraccionada también pueden ser muy efectivos. Estos procedimientos no solo tensan la piel alrededor de los ojos, sino que también mejoran la textura y reducen las arrugas finas, sin la necesidad de pasar por el quirófano.

Con el paso de los años, no solo la cara experimenta cambios. El cuerpo también refleja el envejecimiento, especialmente en áreas como el abdomen, los brazos y los muslos. La pérdida de elasticidad de la piel y la acumulación de grasa en estas zonas pueden ser abordadas mediante tratamientos de contorno corporal.

La liposucción asistida por láser y la lipólisis son opciones populares para eliminar depósitos de grasa resistentes al ejercicio, mientras que los tratamientos con ultrasonido y radiofrecuencia ayudan a tensar la piel y mejorar el contorno general del cuerpo. Estos tratamientos no solo mejoran la apariencia física, sino que también pueden aumentar la autoestima y el bienestar general.

Dos áreas a menudo descuidadas, pero que revelan rápidamente la edad de una persona, son las manos y el cuello. Con el tiempo, las manos pueden desarrollar manchas de la edad, arrugas y pérdida de volumen, mientras que el cuello puede presentar flacidez y bandas verticales.

Para estas áreas, el tratamiento con láser, el uso de rellenos dérmicos y la escleroterapia para tratar venas prominentes son altamente recomendables.

Además, la aplicación de cremas con retinol y antioxidantes, junto con el uso regular de protector solar, puede ayudar a mantener la piel de las manos y el cuello más joven por más tiempo. En algunos casos, una combinación de tratamientos no invasivos, como la radiofrecuencia y la terapia con láser, puede ofrecer resultados significativos sin la necesidad de cirugía.

*Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de El País.