Cali
Hoy se cumplen 100 días de Alcaldía de Alejandro Eder; lo bueno y los pendientes que ha dejado su gestión
Analistas, contradictores, políticos, ciudadanos y funcionarios hacen un balance de gestión del arranque del primer mandatario de los caleños. Balance.
Por José Luis Carrillo Sarria, editor de Cali
A pocos días de que Alejandro Eder y Dilian Francisca Toro cumplan sus primeros 100 días al frente a la Alcaldía de Cali y de la Gobernación del Valle del Cauca, respectivamente, el balance de su gestión podría describirse como bueno, según analistas, políticos y los mismos sectores de oposición. No obstante, hay reparos que se deben señalar.
La mayoría de analistas coincide en que entre ambos mandatarios se ha gestado un ‘matrimonio’ armonioso, como no se veía hace muchos años entre Gobernación y Alcaldía de Cali. Esa unidad ya empieza a dar frutos como la sede de la COP16, el Tren de Cercanías y la seguridad.
Pero la llegada al hito de los 100 días se da en medio de un ataque de las disidencias de las Farc a la Tercera Brigada y un clima nacional de incertidumbre por el tema de salud, que pondrán a prueba a ambos dirigentes.
Aunque muchos analistas coinciden en que la consecución de la sede de la COP16 para Cali -el congreso de biodiversidad más grande del planeta- es la victoria temprana más importante de Alejandro Eder en estos primeros 100 días, la reducción de homicidios y algunos delitos es lo que más tiene satisfecho a los ciudadanos, según analistas.
“La disminución de los homicidios ha sido la victoria temprana más significativa de la actual Administración. Asimismo, la puesta en marcha de un plan para mejorar la movilidad y la gestión en buscar recursos internacionales. La gente siente una nueva esperanza, que hay un nuevo gobierno, que hay alguien que maneje las riendas de Cali, eso no se sentía en el gobierno de Jorge Iván Ospina”, sostiene el analista político Eduardo Llano.
Una opinión similar tiene Roberto Ortiz, actual concejal, que se midió con Eder en las urnas por la Alcaldía. “Se han intensificado los operativos, tanto de Policía como de tránsito, para imponer orden, seguridad y disciplina. Esto se refleja en la disminución de homicidios en un 21 % y de las diferentes modalidades de hurto, además mejora la percepción de seguridad”.
María Isabel Alvarado, directora de la Unidad de Acción Vallecaucana, destacó el impulso que le dio la Alcaldía a la campaña ‘Volvamos a mi Cali bella’ en temas de reapropiación y cultura ciudadana. “Eso contribuyó a generar un ambiente de optimismo. En esa misma línea, la implementación de estrategias de control y regulación de tránsito, se suman a una mayor percepción de orden en la ciudad”, asevera.
Desde el laboratorio ciudadano, Mi Cali Contrata Bien, se ha percibido mayor tracción en la ejecución de las obras que estaban pendientes, como es el caso de la rehabilitación vial.
Demoras en contratación y programas sociales, los desaciertos
Arrancaba el primer mes de la Alcaldía de Alejandro Eder y ya en la plazoleta del Centro Administrativo Municipal, CAM, los coordinadores de los comedores comunitarios ya hacían su primera protesta con fogón y olla a bordo.
Días después se sumarían los monitores de los Centros de Desarrollo Infantil, las quejas por la ausencia de programas para los habitantes de y en calle y las quejas por la demora en la activación de la Ciclovida, que valga decir, ya está funcionando.
“Esto generó un ruido grande. Pero además hay un desacierto generalizado de esta Alcaldía y es mantener a la población al margen de lo que se hace. Creo que se debería tener más contacto con la comunidad, con los líderes barriales y no solo con quienes lo apoyaron para llegar a la Alcaldía”, dice Llano.
El analista sostiene que todavía se siguen viendo muchos partidos políticos en la contratación de la Alcaldía.
“Mucha gente que estaba en la Alcaldía de Palmira y que trabajaba con el exalcalde de ese municipio, Óscar Escobar, terminan trabajando en Cali y eso obedece a las dinámicas políticas de la gente que apoyó a Eder para llegar a la Alcaldía y en este caso obedece al grupo de Diana Rojas y Reyes Kuri, con ‘Juntos’”, manifiesta.
El excandidato a la Alcaldía y ahora concejal, Roberto Ortiz, también enfatiza que el mayor desacierto de esta administración es la implementación tardía de los programas sociales.
“762 comedores comunitarios que alimentan a más de 80.000 personas en Cali estuvieron en el limbo por muchos días, además hubo una mala comunicación inicial que desató protestas”, sostiene.
Añadió que tampoco fueron oportunos los cambios viales en el sector de Ciudad Jardín, “empezando que no hubo ni siquiera una socialización previa y evidenciamos el caos vehicular que se formó”.
Ortiz dice que, además, no se sabe si el secretario en propiedad de la secretaría de Movilidad de Cali es el asesor de la Alcaldía, Alberto Hadad, o Wilmer Tabares, actual secretario, “porque la intromisión del asesor es evidente cuando las decisiones son tarea del titular”.
El nombramiento de un gran número de asesores, 17 en total, en la cual la gran mayoría obedece al cumplimiento de compromisos de campaña, también ha sido uno de los aspectos por los que se ha cuestionado esta Alcaldía.
“A excepción de Juanita Cataño, que lidera el proceso de los ‘Consejos Ciudadanos’, no se sabe cuál es el rol de estos asesores; además, a esto se suma que uno de los asesores de despacho, Juan Camilo Castilla, renunció luego de conocerse una denuncia en su contra por presunto abuso sexual. Castilla era el encargado de coordinar las relaciones de la Alcaldía con el Gobierno Nacional”, explicó un funcionario cercano a la campaña a la Alcaldía y que ahora hace parte de la administración de Eder.
A ello se suma la dimisión de Fernando Grillo, director del Departamento Administrativo de Desarrollo e Innovación. Hasta el momento dicha dependencia se encuentra acéfala.
Desde el Concejo de Cali se cuestionó la demora en la posesión de la directora de Hacienda de Cali, María Mercedes Prado, quien fue una de las últimas en asumir el cargo, resultando ser una cartera neurálgica para el buen andar de la Administración.
“Esto sin contar el gran número de contratistas que hacen falta dentro de la Alcaldía para realizar labores misionales. Hay muchos jóvenes profesionales venidos desde otras zonas del país con vacíos debido a su inexperiencia en los procesos y en la ciudad y eso pesa a la hora de hacer ágil la gestión pública”, dijo.
A esto se suman los cuestionamientos, desde algunos sectores, por el método de nombramiento de las Empresas Sociales del Estado.
“Hay que decirlo, las pasadas administraciones, por lo menos, hacían concursos con entidades u universidades para escoger a los directores de la ESE, pero en esta oportunidad fue prácticamente a dedo y hay algunos de esos directores nombrados que no han tenido buen desempeño en otras entidades de salud”, dice la fuente.
Relaciones políticas están a prueba
Frente a su relación con el Concejo, hasta el momento se encuentra en un ‘tire y afloje’ de parte y parte para medir los compromisos.
“Por ahora se habla mucho de una lista de Prestadores de Servicios Públicos (PS) que son cuota de los concejales, pero muy pocos han sido contratados, la verdad, por ahora no se han aprobado proyectos de acuerdos claves e importantes en el Concejo, caso distinto de lo que sucede en la Gobernación del Valle”, dice una fuente del CAM.
Agrega que el verdadero pulso de la coalición del Municipio con el Concejo se verá en las sesiones de mayo donde se aprobará el Plan de Desarrollo.
Regístrate gratis a nuestro boletín de noticias
Recibe todos los días en tu correo electrónico contenido relevante para iniciar la jornada. ¡Hazlo ahora y mantente al día con la mejor información digital!