Alcaldía endurecería el 'pico y placa' para ejercer más control durante la cuarentena

Con el fin de reducir la cantidad de vehículos que circulan en la ciudad y así reforzar el control para hacer cumplir el aislamiento obligatorio, la Alcaldía de Cali estudia aumentar el pico y placa de dos a cuatro dígitos en un mismo día.

La propuesta se la presentó al alcalde Jorge Iván Ospina el secretario de Seguridad Municipal, Carlos Rojas, en un consejo de seguridad que se realizó ayer en la capital del Valle.

Según el funcionario, pese a que el Gobierno decretó la cuarentena en todo el territorio nacional con el fin de contener la propagación del coronavirus, en Cali están circulando “demasiados vehículos particulares en las calles”.

“Entonces, lo que estoy proponiendo es que se duplique el número de placas que tengan la restricción de movilidad en la ciudad, es decir, que en un solo día, por ejemplo, no solo dejen de circular los carros con matrículas terminadas en 1 y 2; sino en 1, 2, 3 y 4 y así sucesivamente”, explicó Rojas.

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El Secretario de Seguridad aseguró que con esta estrategia se busca reducir en un 20 % el número de vehículos que circulan en la ciudad de lunes a viernes, aprovechando el sistema de cámaras de fotomultas que hay en Cali, el cual servirá para hacer un mayor control de la cuarentena.
“No podemos llenar la ciudad de policías porque no tenemos todos los efectivos que necesitaríamos para hacer cumplir el aislamiento. Sin embargo, aumentar el pico y placa sí es una medida efectiva ya que las personas saben que si una cámara de fotomulta captura un vehículo circulando durante la restricción de movilidad, les va a tocar pagar una sanción, y eso duele”, indicó Rojas.

Ante el incumplimiento de la cuarentena en algunos sectores de la ciudad y el incremento de casos de Covid-19 en la misma, el alcalde Jorge Iván Ospina señaló de manera enfática que los controles en vía pública serán “más estrictos”.

“Aplicaremos con todo rigor los comparendos y las sanciones pertinentes, invitando a que las comunidades tomen seriedad en el asunto, sumado a que la presencia de la autoridad en la calle posibilite ser más férreos en los controles para ubicar esos focos calientes de indisciplina en la ciudad”, manifestó Jorge Iván Ospina.

Al respecto, el secretario de Seguridad de Cali precisó que se implementarán mayores controles en sitios como La Casona, en la Comuna 14; al igual que en el sector de La Nave, en Siloé.

“En estas zonas tenemos demasiada afluencia de personas porque allí hay unos mercados informales que nos están generando mucha concentración de personas”, explicó Rojas.

Las aglomeraciones también preocupan en lugares como el centro de la ciudad, donde está llegando una gran cantidad de población flotante de migrantes venezolanos.

“Además, allí tenemos concentrada la mayor cantidad de establecimientos que están prestando servicio bajo la lógica del decreto nacional, como es el caso de los bancos y por eso queremos reforzar los controles”, señaló Rojas.

Según el funcionario, otra de las medidas que se está contemplando en la Alcaldía es la implementación de toques de queda en comunas y barrios donde los caleños no están respetando el aislamiento obligatorio.

“Pero debo decir que hay una gran parte de la ciudad donde se está cumpliendo la cuarentena y solo una pequeña parte en la que no, y sobre esas zonas es que tenemos que focalizar las decisiones”, manifestó el titular de la cartera de Seguridad.

Finalmente, Carlos Rojas indicó que también va a solicitar controles del Ejército en la entrada a Cali por el Sur, porque allí se han identificado muchos taxis que están llegando a la ciudad desde algunos municipios del norte del Cauca, y los cuales “no están haciendo carreras, sino que están circulando con otros objetivos”.

Cabe recordar que esta semana el alcalde de Cali advirtió que podría bloquear el ingreso a la ciudad por el sur debido al arribo masivo de venezolanos que están llegado a la capital del Valle huyendo de la pandemia del coronavirus en Ecuador, en cuya frontera con Colombia también pidió crear un campamento humanitario para atender la emergencia.