Armitage ya hace cuenta regresiva para dejar Alcaldía: "tengo un almanaque, me faltan 140 días"

Con los comentarios jocosos que lo han caracterizado, el alcalde Maurice Armitage reiteró este jueves en entrevista con Caracol Radio que hace la cuenta regresiva para el fin de su administración, sin antes destacar todos su esfuerzos por las obras públicas, educación e inclusión social.

"Me faltan 140 días, yo tengo un almanaque en mi oficina. Ayer conté y faltaban 141", precisó entre risas Armitage.

También se refirió a varios temas muy comentados en Cali como el decreto que prohíbe el consumo de drogas en los parques, la reducción de pie de fuerza para la ciudad y el Petronio. 

"A mí no me cabe en la cabeza que con todos los problemas que tenemos en Colombia tengamos plata para comprar aviones F16 dizque para una guerra, a la cual no nos están invitando, peo no tenemos plata para poner más policías en todas las ciudades", expuso. 

En su momento, Armitage manifestó su inconformidad con la decisión del ministro de defensa, Guillermo Botero, de no mandar más pie de fuerza a las principales ciudades de Cali, pues le habían sido prometidos a la ciudad 1.000 uniformados. 

Además, en el último año 1.300 policías se jubilaron de la institución, lo cual redujo en gran medida su presencia en la ciudad.

Acerca del decreto que prohíbe el consumo de drogas y alcohol en parques y sitios públicos de Cali que se dio a conocer esta semana dijo: "Esto nos va a permitir que cualquier persona podrá estar sujeta a una multa o si reincide hasta preso lo llevamos. Debemos cuidar a los niños". 

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Sobre el festival de música del Pacífico Petronio Álvarez,  que comenzó este miércoles y que irá hasta el próximo lunes 26 de agosto, el alcalde Armitage destacó los esfuerzos de su administración para llevarlo a cabo, asegurando que el evento une a la población del Pacífico, pues Cali es la capital de toda la región.

Se refirió a las bebidas típicas del Pacífico que se venden en el festival, como el viche y el arrechón: "ayer (este miércoles) me dieron un trago (...) yo debí tomármelos antes", precisó. 

"Yo creo que los caleños van a extrañar el llanto mío cuando me vaya. Hemos trabajado siempre por lo social, aunque eso no dé votos. Los colombianos tenemos que cambiar no podemos pensar que todo se resuelve a punta de bolillo y de pistola", concluyó.