Cali
Así son los días en el Zoológico de Cali tras la muerte de Orus, el puma que consternó a toda la ciudad
Esta es la historia del felino que se escapó de su jaula y que minutos después falleció. Siguen las investigaciones.
La muerte de Orus, el puma que hace 10 días se escapó de su jaula en el Zoológico, ha tocado a la mayoría de los caleños.
Muchos de ellos acuden hasta el sitio para observar a los 1100 individuos entre mamíferos, aves, reptiles y anfibios que se encuentran dentro del zoológico y que reciben atención las 24 horas del día; pero al pasar por la exhibición de pumas, esa felicidad que irradiaban al realizar el recorrido de más de dos horas por el lugar, cambia abruptamente cuando recuerdan con tristeza lo sucedido el pasado 28 de febrero de 2025.
Algunos en medio de su tristeza y con un silencio sepulcral, han llegado incluso a dejarle flores en una de las fotografías que allí reposan; mientras que otros que aseguran tener la verdad absoluta, han insinuado al personal del lugar que fueron ellos los que acabaron con la vida del puma de cinco años.

El joven felino llegó a Cali el 21 de febrero del 2021, cuando tenía tan solo un año de edad, luego de ser rescatado de una muerte segura al ser víctima del tráfico de fauna silvestre, delito que en el mundo ocupa el cuarto lugar, y del cual Colombia, después del narcotráfico, el comercio ilegal de armas y la trata de personas, también comparte el mismo puesto, según el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible.
“Desafortunadamente por un tema de escape del animal, se hizo la restricción y al llevarlo a las zonas de manejo, este empezó a presentar una reacción adversa a la anestesia, con periodos de apnea. No respiraba bien, por eso se intubó, se le realizó el tema de respuesta a emergencia, se logró establecer una vía venosa para pasar medicamento de una forma más rápida, pero sus signos vitales eran más lentos”, contó Dave Wehdeking, gerente del zoológico de Cali.
La emergencia los llevó a utilizar analépticos cardiorespiratorios, que es lo que se debe utilizar en estos casos, según los veterinarios.
Además, como Orus estaba intubado con el ambú, observaron que había un retorno de sangre a través del tubo endotraqueal, lo que indicaba que algo estaba pasando en los pulmones.
A pesar de la desesperación, el personal puso en práctica todas las medidas de reanimación, pero lastimosamente, el puma falleció.
Fueron momentos de incertidumbre y desasosiego, pues en un abrir y cerrar de ojos, uno de los animales a los que hacía poco habían alimentado y se habían percatado de que se encontraba en perfecto estado, acababa de fallecer.
“Empezamos a hacer revisión de lo que pudo haber pasado, hicimos una revisión de protocolos y corroboramos con expertos que estos fueron acertados, las dosis fueron exactas. El animal siempre colaboraba en los procesos de manejo, por eso teníamos su peso exacto, no fue una sobredosificación, el puma no cayó desde una distancia alta o algo así, simplemente después de salir de su lugar, se bajó y se metió en una jardinera y allí nos dio la oportunidad de aplicar el protocolo anestésico”, explicó el gerente.

La causa de su muerte
La necropsia de Orus se realizó ese mismo día, en dos fases. La primera fue una macroscópica que determinó que la causa de la muerte fue un paro cardiorespiratorio debido a un edema pulmonar.
“Ahora la siguiente fase es la histopatológica, la cual ya se enviaron todas las muestras de los órganos al laboratorio, estamos esperando que llegue un resultado. Esto puede haber sido por una reacción anafiláctica o por una persistencia médica que tuviera el animal, que no habíamos detectado”, insistió.
Cabe mencionar que el Grupo Especial para la Lucha contra el Maltrato Animal, Gelma, de la Fiscalía General de la Nación, los visitó y determinó que no se utilizó control letal contra el puma, ni violencia.
Pero a pesar de los resultados el dolor por la pérdida del felino no ha sido fácil de asimilar.
“Para todo el equipo de la Fundación Zoológica de Cali es muy dura esta situación, sobre todo para quienes trabajan en la Unidad de Bienestar Animal. Ya el hecho de tener que lidiar con el duelo, de perder a un animal tan querido por nosotros, es duro, así como también tener que defendernos de las personas que nos culpan por lo que pasó”, dijo el gerente.
Un equipo dedicado a los animales
Luego de lo sucedido con el puma, los ojos de muchos ciudadanos se han volcado al zoológico para opinar sobre el estado y comportamiento de los animales.
Lo cierto es que este sitio posee un equipo de salud, otro de nutrición, de cuidado y manejo, de comportamiento y uno más de poblaciones, los cuales se encargan de garantizar las mejores condiciones a los animales que se encuentran bajo su cuidado.
“Más del 80% que están bajo nuestro cuidado, son nacidos en el parque de generaciones anteriores y/o productos del tráfico de fauna. Hay algo que hay que entender y es que los animales en vida silvestre no la están pasando bien porque hay una gran pérdida de su hábitat a raíz de la tala del bosque, de los nuevos cultivos, de la contaminación de las aguas donde ellos viven, entonces al perder su hábitat pues se convierten en presa fácil del tráfico de fauna”, mencionó María Clara Domínguez, directora de la Fundación Zoológico de Cali.
Pero la situación es más crítica de lo que parece. La Policía Nacional incautó 37.998 animales víctimas de tráfico ilegal, entre el 1 de enero de 2023 y el 24 de marzo de 2024.
Mongabay, el portal web de noticias sobre conservación, señaló que en este grupo 23.418 reptiles fueron decomisados, al igual que 9829 aves y 5763 mamíferos.
Lo triste es que, tal y como lo señala la Unidad Investigativa de Delitos contra los Recursos Naturales y el Medioambiente de la Policía Nacional, los animales se convierten para las estructuras criminales en un premio mayor y solo por eso son buscados en diferentes zonas del país. Inclusive, a la gran mayoría les terminan asesinando a su madre para poderse quedar con las crías y venderlas a un precio irrisorio.

Es allí precisamente donde los zoológicos se convierten en los ‘ángeles’ para estos animales que quedan desprotegidos, y fuera de su hábitat.
Domínguez contó que es por eso que las corporaciones autónomas que tienen a cargo sus Centros de Atención y Valoración de Fauna, CAF, se mantienen llenos de estos animalitos.
“Las nuevas generaciones no queremos ver a los animales encerrados, el problema es que si los liberamos un porcentaje muy alto de ellos morirán porque desconocen los lugares donde se están liberando, se convierten en presa fácil de depredadores, no consiguen alimento y otras especies similares pueden matarlos”.
Los especialistas se basan en los estudios realizados por muchos años, los cuales han logrado mostrar que los animales que se liberan cuando han estado en cautiverio no son exitosos en un alto porcentaje.
“Todos los zoológicos en general fungen como el último lugar donde los animales pueden tener un hogar porque no pueden ser reintegrados y su única opción es o vivir toda la vida en un centro de atención de fauna o la eutanasia. Por eso terminan con |nosotros en estos espacios donde nos encargamos de generarles cuidados, darles todo el cariño y garantizar que lleven el tiempo que estén con nosotros, la mejor calidad de vida”, recalcó Wehdeking.
Atila está bajo observación
Algo que no hay que olvidar es que Orus no estaba solo, tenía una compañera y su rutina diaria la compartía con Atila.
Hoy la puma recibe especial atención. Un equipo de expertos analiza su comportamiento y sobre todo que su apetito esté bien. La idea es que Atila siga comportándose como regularmente lo hace.
“Aparentemente ella está muy tranquila. Él tenía más apego a ella, que ella a él, ya que Orus era más joven, entonces la molestaba mucho. Ya se le hicieron las revisiones y esperamos que vuelva a su recinto”, indicó el personal especializado.
Otro punto que se ha tenido muy en cuenta, según el personal del Zoológico de Cali, es el estado de la malla, sobre todo porque al parecer el puma realizó un pequeño hueco por el cual pudo salir.
Por ello, una empresa experta en este tipo de protecciones realizará una revisión en todo el lugar para garantizar que todo se encuentre en su lugar, sobre todo después de reconocer que aunque la malla era catalogada como irrompible, Orus pudo encontrar el punto exacto para descoserla.
Ahora bien, durante esta semana que Atila regrese a su recinto, el personal del lugar estará aún más atento para observar y valorar cómo ella responde a los estímulos de enriquecimiento que le harán.
En redes sociales, muchos ciudadanos han señalado la posibilidad de conseguir un nuevo compañero para la puma y evitar que esta pueda desmejorar, pero el gerente del zoológico es claro y asegura que hablar en estos momentos de ese tema sería un poco apresurado.
“Pero sabemos que hay muchos de ellos en centros de atención de fauna que están necesitando ser recibidos. Obviamente estamos siempre disponibles para apoyar a estos animales que no tienen otra opción de vida más que llegar a recibir cariño a los zoológicos, pero seguramente tomaremos decisiones más adelante con cabeza fría”. dijo.
Además, según Dave Wehdeking, aunque tienen claro que Orus fue una parte muy importante para todo el lugar y sobre todo para el personal, también tienen a 1100 animales, más el acuario y el mariposario, que necesitan su dedicación.
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