"Atención de los venezolanos podría costarnos $1 billón": Supersalud

En su visita a Cali, el superintendente Nacional de Salud, Fabio Aristizábal Ángel, mostró su preocupación por los altos costos que le está representando al sistema de salud colombiano la atención de la población venezolana.

Al respecto, el funcionario aseveró que, a pesar de que se le seguirá garantizando a los migrantes la atención en salud, el Estado deberá apropiar nuevos recursos para evitar el colapso de la red hospitalaria pública del país.

Aristizábal también se refirió a la situación del Hospital Universitario del Valle, HUV, y a otros temas sensibles, como el traslado de los 3,8 millones de usuarios afiliados a la EPS Medimás.

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¿Qué encontró en su recorrido por el HUV durante su visita a Cali?

El hospital está atendiendo más población de la que debería y se encuentra lleno de patologías que debieron haber sido atendidas en los hospitales públicos de primer nivel.

Un ejemplo claro de esta situación es que el 40 % de los partos que se están atendiendo en el HUV no son de alto riesgo, los cuales debieron haber sido atendidos en otra red, es decir, pacientes que ya se les pagó a otros hospitales, pero que llegan al HUV vía evento, entonces esa es la platica que está perdiendo este hospital...

Pero también me voy contento porque veo que el HUV ha cogido un camino distinto, veo nuevos servicios, nuevas áreas para inaugurar y veo que se está prestando una atención con oportunidad.

¿Qué acciones se pueden tomar para mejorar la red pública de primer nivel en Cali y el Valle?

Vamos a revisar la red pública de primer nivel de Cali para que esta amplíe la jornada de atención. Voy a ayudarles con recursos financieros. A mí también me preocupa mucho que los gerentes de los hospitales públicos se quejan del flujo de recursos y de que no les llega plata y esto se volvió un círculo vicioso: entonces las EPS no contratan con el HUV porque no tiene capacidad de resolución y este no tiene capacidad de resolución, precisamente, porque no contratan con él.

De esta manera, vamos a hacer unos compromisos con el departamento. Probablemente me voy a llevar toda la red pública para Bogotá, voy a citar a los gerentes y representantes legales de las EPS para analizar el tema de la contratación, del flujo de recursos y de la liquidación de contratos viejos; pero, realmente, que estos respondan por lo que están contratando.

Pero algunos gerentes de las EPS dicen que la crisis económica por la que están atravesando radica en que el Estado tampoco les paga. Entonces, ¿cómo garantizarle esos recursos a las EPS para que el sistema de salud pueda mejorar?

Aquí hay dos cosas que se nos juntaron. Una es lo que deben los entes territoriales y otra lo que debe la Adres (Administradora de los Recursos del Sistema General de Seguridad Social en Salud). Esto es real, a las EPS se les debe una plata y para eso es el acuerdo de punto final que quedó establecido en el Plan Nacional de Desarrollo. Si este acuerdo funciona y logramos determinar las deudas entre los actores, saneamos el sistema. A las EPS se les debe $5 billones, $6 billones, $7 billones. Nosotros vamos a honrar nuestra deuda, estamos mirando mecanismos, certificación o titularización de la misma y eso le va a dar a las EPS un oxígeno grande.

Por otro lado vamos a reconocer el deterioro. Con esta modalidad, los indicadores financieros de las EPS deben mejorar y estas ya no tendrían excusas para no girarle a los hospitales.

Los sindicatos del HUV cuestionan frecuentemente la tercerización de contratos que hay en este hospital...

La descentralización puede ser el primer paso de una privatización, pero no siempre que hay un privado en la mitad es que haya corrupción. Hay que tener en cuenta que si el hospital público no es capaz, le toca entrar al privado, muchos hospitales públicos se quebraron porque los cogió la politiquería y los parlamentarios, los hospitales tenían nombres propios y los saqueaban durante cuatro años y, cuando ya los iban a liquidar, el Gobierno volvía y los salvaba. No podemos seguir salvando hospitales por administraciones mal hechas, hay que ayudarles a los hospitales a que haya una buena contratación, pero también a que se preocupen por hacer las cosas bien.

Justamente, la población venezolana está consumiendo una gran cantidad recursos de esa red, ¿cómo van a sortear esta situación?

Este es uno de los temas que más me preocupa. Aquí, sobre todo, la gran afectada es la red pública: hay hospitales de frontera que están facturando $7000 millones, $8000 millones y $10.000 millones mensuales solo por la atención de población venezolana. Yo no soy el Ministro de Salud (Juan Pablo Uribe), pero creo que vamos a tener que apropiar nuevos recursos porque, de lo contrario, los hospitales van a reventar y la red va a colapsar.

Incluso, tengo entendido que hay hospitales que actualmente están atendiendo más venezolanos que colombianos...

Cúcuta, por ejemplo. También acabo de ver unos hospitales en Barranquilla que, a pesar que no son hospitales de frontera, en ellos el 60 % de la facturación es de venezolanos. Financieramente esto es un desastre para el país y, al paso que vamos, podría costarle al Estado cerca de $1 billón. Sabemos que los recursos no son suficientes, pero tenemos que seguir atendiendo a los hermanos venezolanos.

Pasemos a otro tema, el de los pacientes de Medimás, ¿qué va a pasar con ellos?

En estos momentos Medimás sigue habilitada como EPS y, mientras nosotros no tomemos decisiones de fondo, al paciente lo tienen que seguir atendiendo con la misma oportunidad y calidad. Segundo, hay que seguir girando los recursos.

Estamos a la espera de la ejecutoría de los fallos. Los magistrados nos dieron una instrucción, hay unos recursos de apelación y de impugnación de los involucrados, nosotros le pedimos al tribunal que nos aclarara y adicionara algunas de las órdenes que nos dan porque necesitamos el marco regulatorio. Muy probablemente esto irá al Consejo de Estado, no sabemos cuánto se va a demorar y por eso voy a seguir la ruta que traía en la Superintendencia, independiente de la órdenes que nos den los tribunales.

De hacerse efectivo el traslado de los pacientes de Medimás, ¿cómo garantizar que estos no van a terminar en una EPS peor?

Los vamos a trasladar a EPS que no estén en medida de vigilancia especial. Hoy tenemos en la Superintendencia 21 EPS con medida de vigilancia especial y con restricción de afiliación, es decir, que no pueden recibir más pacientes. Pero hay otras EPS que lo han hecho bien, tienen el margen de solvencia, buenos indicadores financieros y le están cumpliendo a la red de prestación pública y privada. Esas son las EPS que los van a recibir.

¿Cómo se realizará el traslado de los pacientes de Medimás?

En el evento en que se cumpliera el fallo y que fuera una orden ejecutoria, lo aplicaríamos como dice la norma. El 50 % en las EPS que pueden recibir pacientes, dependiendo el departamento, y el otro 50 % de acuerdo al número de usuarios, pero necesitamos un marco regulatorio, que están armando. Este marco es necesario porque actualmente hay muchos municipios de Colombia en los que solo existe Medimás como EPS, entonces, donde no hay más EPS, tenemos que habilitar otras de estas entidades. Por su parte, en algunos municipios en los que Medimás comparte la plaza con otras 3 o 4 EPS que también están en medida de vigilancia, allí tampoco se podrían trasladar.

¿Qué investigaciones está realizando en Cali y en el Valle?

Tengo muchas en curso, muchas de las EPS que están en el departamento tienen medida de vigilancia especial. Estamos haciendo actuaciones oportunas, tenemos medidas con contralores, inclusive en algunas dependencias, estoy trabajando de la mano con el grupo de parlamentarios del Valle: vamos a revisar la situación de SOS, de Coomeva...

En la región son incontables las quejas por parte de los usuarios en contra de estas y otras EPS...

La situación es grave en todo el país. Por eso, hemos mandado un mensaje muy especial a las EPS, de que tengan cuidado con los niños, los adultos mayores y personas en condición de discapacidad.